En nuestra ciudad (Maracaibo), han dicho las autoridades, el horario para echarle gasolina a los carros es desde las ocho de la mañana hasta las doce del mediodía, luego de lo cual, no debe haber colas en las gasolineras. La realidad, contradice, nuevamente, lo reglado. Todos los días, sin excepción, luego del tope del horario fijado, muchos vehículos permanecen en cola hasta el día siguiente. Es así, como vemos a innúmeras personas a la sombra de los árboles, de las casas o edificios, sentadas conversando, sin el tapa boca la mayoría, absolutamente despreocupadas de la pandemia que aflige al mundo entero, aun sabiendo que en Maracaibo hay un foco grande de Covid-19, el tan citado foco del mercado Las Pulgas.
Lo anterior, no es más que otra muestra inequívoca de la falta de estado que vivimos todos los venezolanos. Ciertamente, aquí, en medio de esta crisis de todo tipo, todo el mundo hace lo que quiere. Es frecuente también, ver carros circulando después del mediodía sin tener salvoconducto, o gente reunida en las plazas de las urbanizaciones conversando. Al margen de que no se guarda el distanciamiento social.
Yo, que soy abogado, conozco la naturaleza del Derecho, y entre otras consideraciones, éste es coercitivo, es decir, cuando una persona incumple las normas dispuestas en las leyes, reglamentos, ordenanzas, etc, debe ser castigado. Esto es así, porque está más que demostrado, que por mera conciencia cívica son muy pocos, poquísimos, los que cumplen con lo normado. Están entonces, las autoridades ( Cuerpos policiales, Guardia Nacional Bolivariana, etc) para hacer respetar las leyes, y de llevar a todo aquél que se niegue a obedecer ante la justicia.
Como podemos ver, la funcionabilidad del estado está, al menos en Maracaibo, trastocada; por ello y por la inconsciencia de muchos maracaiberos, los contagios seguirán incrementándose, lo que, obviamente, nos pone en riesgo a quienes sí cumplimos con nuestros deberes cívicos.
En Venezuela, ya para finalizar, se ha llegado al punto, de que el estado en gran parte del territorio no existe (caso frontera colombo-venezolana, ruta Maracaibo-Maicao), y tampoco hay quien tome la responsabilidad por lo que se hace mal, o por lo que se deja de hacer.
En diciembre vendrán promesas...en diciembre llamarán a votar...