El perro Pipo iba del garaje al jardín y luego se paraba cerca de la reja del portón y observaba. Se notaba como preocupado. Tal vez tenía ese sentimiento, pues su dueño y más aún su amigo, el periodista Juancho Marcano, había salido a la ciudad de La Asunción y no había regresado, y eso le angustiaba. puesto que el reportero no era hombre de estar saliendo y mucho menos ahora con esta pandemia.
Mientras tanto los gatos Rocky y Rockyta, jugaban y se divertían tranquilamente, como si en el mundo no pasara nada. Igualmente unas mariposas jugueteaban sobre el mantel rojo de las ixoras del jardín y más bien parecían unas manchas amarillas.
En eso Pipo sintió un ruido y movió la cola, pues había reconocido que el auto de Juancho Marcano se acercaba y cuando llegó éste, meneó más la cola y una vez que se bajó del carro, el perro le preguntó:
- ¿Cómo te fue Juancho?
- Muy bien Pipo y me gustó la charla que dio nuestro amigo el periodista Emigdio Malaver, y que se llamaba: "Tacarigua como una muestra del humor margariteño", en la cual se paseó por una serie de cuentos, historias y anécdotas que reflejan una parte de ese humor tan inteligente que tiene la Tacarigua de Margarita y que está regado por calle y vericuetos de esta maravilla de pueblo, y que se debiera recoger y darlo a conocer, porque de verdad vale la pena que este tipo de conversatorio se presente en otros pueblos y se compartan esos momentos humorísticos que han alegrado los poblados desde tiempos remotos.
- ¿Pero de eso Juancho, no se han publicado libros?
- Lamentablemente, que yo sepa, no, Pipo, pues ni los historiadores, ni los cronistas ni nosotros los periodistas hemos hecho un estudio serio al respecto; sólo ésta muestra que muy divertida nos expuso Emigdio Malaver en el museo Nueva Cádiz, este jueves 4 de marzo de este año 2021.
Pipo viendo que el periodista quería almorzar y descansar, dejó de preguntar y Juancho Marcano, pasó a la casa donde lo esperaba su esposa para comer.