Rafael Rincón González nació en los Biombos del Barrio El Saladillo, en aquel Maracaibo de Tranvías, hombres vestidos de dril y sombrero blanco, donde las mujeres no presumían, sino que eran unas verdaderas bellas damas antañonas, un 30 de septiembre de 1922.
Por los lados de la calle el Dati, Salina Ancha, el Cerro de la Gaveta, el Transito y los Cucaracheros, dicen que lo vieron de niño jugar y de joven serenatear a las muchachas de la calle derecha, Carabobo y a las que en las tardes iban a caminar por la Placita de San Juan de Dios y el Teatro Baralt.
Sus primeros pasos en el mundo del arte y la cultura, se los enseñó su padre, el reconocido Pintor Zuliano, Neptalí Rincón, pero su candencia, ritmo y tonalidades, lo cultivó de su Madre Inés Delia González, quien era una apasionada de la música y su guitarra.
Rafael Rincón González formó parte de los tríos América y Naiguatá. Además, con Ciro Adarmes y Adelina Valbuena anduvo con el conjunto Los Melódicos.
En reconocimiento a los aportes que dio a la cultura marabina, el gobierno regional lo nombró Patrimonio Musical del Estado Zulia en 1993 y en febrero del 2005 la Universidad del Zulia le confirió el Doctorado Honoris Causa.
Este Saladillero amante de la danza, la Contradanza el Valse y la Gaita, siempre será recordado por sus inolvidables temas como El Platanero, Maracaibo Florido, Pregones Zulianos y su linda Flor de Mayo. En 1997 compone la gaita "Mensaje" donde nos dejará constancia de su lucha por saberse Maracucho:
"Yo soy Rafael Rincón el cantor del Saladillo, que nació cuando Virgilio con su gaita lo arrulló, y por lo mismo es que yo, no venderé mi conciencia, porque la gaita es esencia y no vulgar expresión.
La gaita maracaibera tiene sabor especial, me la han querido cambiar, haciéndomela extranjera. La gaita no es un cumbión, bolero ni vallenato y por lo mismo yo trato de enseñar la tradición.
A los jóvenes creadores de gaita tradicional, los poetas del antaño los quieren felicitar, porque han seguido la línea de nuestra gaita ancestral, saben que la gaita es signo de nuestro Zulia inmortal".