¿Que es ser megalómano? Megalómano o megalómana es un adjetivo que se refiere a una persona que presenta megalomanía. Una persona megalómana presenta las siguientes características: se piensa un ser superior y por tanto, más importante que los demás. Tiende a mostrarse extremadamente orgulloso de sus propias habilidades, riquezas, y estatus social, mostrando arrogancia y desprecio hacia todo aquel o aquello que no tiene que ver consigo mismo, y sobre valora su influencia hacia terceras personas de forma desproporcionada. A pesar de esta autoestima presente en un megalómano, su auto percepción no necesariamente corresponde con la realidad. Fin de la cita.
El recién electo alcalde de El Tigre-Anzoátegui Ernesto Paraqueima, en un programa radial que mantiene en dos emisoras de la localidad de 6am, a 8am. Utiliza un lenguaje soez, escatológico, y de baja estofa, violando todas las normas de la Ley re Responsabilidad en Radio, Televisión y Medios Electrónicos. Cuando utiliza palabras que tienen como fin dañar la dignidad de las personas, y que están prohibidas tácitamente en dicha ley por ser un horario que lo escucha niños, y adolescentes. Dicho espacio radial esta fuera de contexto, ya que no es un espacio de opinión, cuando es utilizado por un político psicopata, y más aún si se trata del alcalde del municipio.
La ofensa desmedida, y sin derecho a replica utilizada por este abusador, es siempre un arma destinada a dañar la dignidad de las personas que le critican su mal proceder. Insultar a alguien tiene como objetivo demeritar la calidad humana de aquel que recibe el mensaje que critica, como lo hizo con mi persona a quien: "califico de vago" y que me iba a aplicar la extinta "Ley de Vagos y Maleantes" por el solo hecho de pedirle al presidente Nicolás Maduro, a Diosdado Cabello, y a Tarek William Saab www.aporrea.org/amp/actualidad/a307961.html que cuidado que le entregaban la Policía Municipal a ese megalómano, y psicópata. No siempre esta acción daña al receptor del mismo, ya que en ocasiones se voltea como búmeran contra aquel que profiere el insulto, por falta de argumentos sólidos frente a la crítica constructiva. En el fondo se trata de un instrumento que denota la incapacidad para argumentar por parte de aquel que, sintiéndose superior, es incapaz de responder con razones a aquello que le molesta, o con lo que está en desacuerdo. Por supuesto que siempre hay una ocasión en que recurrir al insulto es un acto de impotencia ante la imposibilidad de dialogar con aquellos carentes del don de la tolerancia, y la inteligencia.
Pero si hay alguien que tiene prohibido utilizar este recurso agresivo es el, por ser el alcalde de la ciudad, y más aún el conserje del municipio, ya que su deber es mantener limpia, las calles, plazas, mercados, avenidas etc. Y recoger diariamente la basura, no pretendiendo convertir este trabajo ordinario en algo extraordinario. Su diario discurso escatológico por Orbita 90.1 FM, y Mariana 100.7 FM en contra de personajes como Luis José Marcano gobernador del Estado a quien llama "influencer pantallero", a Jesús Figuera ex- candidato del PSUV "perdedor" a la alcaldía, quien saco 20.000 votos, y al cual despectivamente lo llama "Jesús Flojera". Así como al ex-alcalde saliente Ernesto Raydan con 12.000 votos, a quien despectivamente llama el "Oso Yogui", debe darse cuenta que son 32.000 personas que votaron en su contra, su primitivismo semántico soez, y escatológico, es de tan baja estofa, cuando llama "chupadelicas" a las viejitas de 70 años, a quienes invita a tener sexo en un motel de la ciudad, a el cual le hace una pauta publicitaria, o las últimas expresiones de que iba a ser unos matrimonios colectivos, y en los cuales iba a casar a personas del mismo sexo, pretendiendo violar el articulo 77 de la Constitución Nacional. El jueves 16 de diciembre hizo un acto de lanzamiento de la Navidad en la Plaza Revenga, violando todas las normas de Bioseguridad contra el covid-19, impuesta por el gobierno nacional que preside Nicolás Maduro. Ese día la ciudad era un desnalgue, y una bebedera de aguardientes por todos lados, la gente sin tapa bocas e incumpliendo el distanciamiento social, así mismo ha hecho varios eventos de ese tenor en la ciudad, será este alcalde irresponsable, el único responsable de resurgir, un brote masivo de este mortal virus en El Tigre.
Se presenta diariamente de lunes a viernes, como símbolo de las más viles chabacanerías, mostrando sus carencias argumentativas ante la opinión publica tigrense, burlándose de la inteligencia discursiva de sus críticos, y oponentes. Porque yo le digo como analista político, que para golpear elegantemente, con el lenguaje "cervantino" se requiere oficio, y conocimiento, y no descalificaciones propias de bravucones de baja ralea.
Y es que lo que decía en su escatológica campaña electoral, la cual enfrenté, porque apoyé la formula electoral del PSUV, que encabezó el gobernador triunfador Luis José Marcano el 21N, forma parte de lo que este megalómano alcalde Paraqueima utilizó, y se conoce como la pirotecnia política propia del fracaso una vez que gana la competencia, pero que tiende a desaparecer una vez que se inicia el ejercicio de gobierno. Este alcalde megalómano de oposición, si lo dejan correr sin control, seguirá con un lenguaje soez frente a los críticos que se oponen a sus arbitrariedades, pero como opositores serios frente a su gobierno municipal estamos obligados a responder con argumentos sólidos, y con base en la superioridad que nos brinda tener en las manos las riendas del Estado Anzoátegui, con el gobernador Luis José Marcano. Cuando este Alcalde Paraqueima utiliza los calificativos: soeces, neofascistas, mezquinos, o hace alusión a "a sus tiempos de canalla, cuando Tarek William Saab era gobernador, y lo teníamos que enfrentar por los medios de comunicación", no sólo se remonta sus abusos, a la época de la campaña, sino que reafirma su maligna convicción en el sentido de que existen distintos tipos de tigrenses. Los buenos, y los malos.
Además, cuando se cuenta con la fuerza que representa ser dueño transitoriamente del poder Ejecutivo y Legislativo Municipal, la necesidad de responder con insultos desde esa posición, es un exceso que no se justifica de ninguna manera. Insisto, mientras la oposición revolucionaria municipal con un poder limitado grita con pocos resultados efectivos, no tiene justificación alguna el insulto gratuito por parte de esta autoridad municipal desbocada. Sólo este alcalde no democrático que considera ilegítimos a sus adversarios políticos es quien, en un acto de soberbia, y prepotencia, agrede primero verbal, y después físicamente a aquellos que cuestionan su forma de actuar, menos mal que no le dieron la policía municipal, ya que en su anterior mandato tiene imputaciones, por abuso de poder, violación a los derechos humanos, homicidios, y hasta le asesinaron al jefe de esa policía de apellido Acosta Millan.
El otro efecto de los insultos proferidos por un personaje poseedor del poder público municipal en el Tigre, es el mensaje que este transmite a sus seguidores e incondicionales. Nadie puede pensar que la retórica neofascista, de Paraqueima está desconectada de las acciones de sus grupos supremacistas contra sus oponentes que no ‘cojan mínimo’. Llamar "Jesús flojera", "vagos" o "osos yoguis" a determinados sectores sociales, considerados como sus críticos ilegítimos por parte de este alcalde, sólo legitima la acción de sus violentos contra sus adversarios.
Las palabras matan, y más aún cuando éstas provienen de las altas esferas del poder municipal tigrense, desde donde se decide quién es parte del pueblo, y quién no. No es esta una forma de reducir la polarización política, y mucho menos generar consensos para definir el futuro de la ciudad de El Tigre. El insulto no funciona, a menos que se pretenda dividir a la ciudad.