Yo he escrito varios artículos recomendando al Presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolas Maduro Moro, ciudadano por el cual voté para que ejerciera la presidencia de la Republica durante 06 años, que por favor decrete la creación de la Gran Misión LOCOVEN, para que atienda a la población que se ha ido desquiciando mentalmente, porque él no deja el pelero y se vá "pal Caracas Country Club" , como se expresaba la inolvidable Martha Olivo, en su personaje de Malula en el recordado programa de la Radio Rochela. Como a uno, No lo oyen, que se atengan a las consecuencias. Después no diga, que no se lo dijimos.
Ya comenzaron a salir personajes que quieren imitar al CHAPULIN COLORADO, dicen que ellos están dispuestos a sacrificarse por el 80% de la población venezolana, que según ellos se encuentra viviendo una vida miserable por culpa de Maduro. Uno lee sus escritos y parecen escritos por seres de otro mundo cuyo único objetivo es salir de Maduro de la forma que sea. Tienen una fijación y obsesión contra El Super Bigote, que a veces uno piensa que Freud tiene razón al plantear que todas las motivaciones tienen un origen sexual.
Son tan locos y disparatados los mensajes y argumentos de los llamados Antimaduristas, que yo, que he vivido intensamente la política venezolana a partir de 1958, no dejo de sorprenderme al oír los contenidos impregnados de odio personal contra la figura del Presidente de la República. El sólo hecho de que exista un venezolano, que piense o sienta, que Maduro es el único causante de todos los problemas que venimos arrastrando desde hace 200 años y que con su salida de Miraflores, todo se solucionará, me parece raya en lo estúpido. Es como pensar que con la salida del anciano presidente de USA, Joe Bidem, el Imperio Norteamericano, va a dejar de ser Imperio.
Yo no sé si Mérida es la excepción y ruego a San Lucas, que así sea, pues representa menos del 1% del total de votantes del país, donde se concentra la esencia del odio miserable contra Nicolas Maduro. Esta ciudad, donde Chávez nunca ganó una elección y Maduro va por el mismo camino, está haciendo todo lo posible por arrancar de raíz todo lo que huela a Chavismo, a Socialismo y a Bolivarianismo. Aquí es peligroso identificarse con Chávez, con el PSUV y más si dices que eres Socialista.
Aquí no es raro oír argumentos como estos: "En este país no habrá paz ni progreso, mientras el bigotudo ése, esté en Miraflores. ¿Dios mío, que te hemos hecho los venezolanos para merecernos semejante castigo? ¿Tanta gente que formamos en nuestras excelentes universidades y que nos haya tocado un autobusero bruto e incapaz para dirigir a este bello país? Señor apiádate de nosotros y quítanos esa pesadilla de encima. Maduro es un maluco: Ni renuncia, ni se deja tumbar. ¿Cómo va a progresar un país con hombres así? Si él fuera un poco inteligente o quisiera un poco a este país, donde supuestamente nació, ya se hubiera ido a Cuba, para disfrutar los reales que se ha robado.".
Que esos argumentos los oiga uno, en un barrio de cualquiera ciudad de Venezuela, donde gran parte de la gente apenas sabe leer y escribir, gracias a la Misión Robinson, es aceptable. Pero oír eso en boca de venezolanos, profesores de la única "universidad que tiene una ciudad por dentro·", lo que dá es pena ajena. Yo que me gradué en la Escuela de Ciencias Políticas de esa universidad, siento que fui estafado en mi buena fé.
El colmo de los colmos, los percibí ayer 5 de marzo, cuando algunas personas en Mérida, estaban celebrando la partida del "Mortadelo", el nombre que ellos colocan al Comandante Eterno, para hacer que los Chavistas nos arrechemos. No volverán, hagan lo que hagan. Ahora entiendo más a Diosdado Cabello y su actitud provocadora y desafiante que muestra en su Programa: CON EL MAZO DANDO.