La reina Isabel tiene 95 años y desde 1952, o sea desde hace 70 años, anda jodiéndose la vida y trabajando como una verdadera loca, por todos los suyos que son los ingleses y su familia; aparte del largo tiempo que dedica a la humanidad. Sin contar los años que antes, casi en lo mismo, estuvo en su condición de princesa.
Un tonto como uno, que estuvo apenas casi cuarenta años en el aula de clases, se queja de "tanto de lo que trabajó", que no es sino una pendejada ante eso de la reina inglesa; y uno, todavía tiene el "tupé", de exigir le paguen una jubilación que, por lo menos, le sirva para comer en lugar de volverse emprendedor y seguir como ella, como una "chompa".
Esos tantos años gobernando, puesta allí, según la tradición "por mandato divino de Dios", la habilita para que su gobierno califique a quienes les convenga de dictador y abusador del poder. Otros no pueden estar tanto tiempo gobernando porque para eso se requiere un carnet, una matrícula que Dios mismo firma. No es propiamente un carnet de la patria, que no sirve de mucho, ni siquiera para recibir el Clap, aunque pudiera servir bastante, pero es un amuleto que le permite estar allí hasta morirse y dejar el cargo en herencia. No tampoco es que se lo va a dejar a cualquiera,como cuando uno tira un traste, algo inservible u obsoleto, para quién lo encuentre se quede con él. Por esto justamente ha llegado a tan larga edad, porque por más que miran alrededor del estrecho entorno, les provoca decir "esto es mucho camisón pa` Petra".
Fíjese el lector que, en eso ha sido tan cuidadosa, que no ha muerto, pese su avanzada edad, tanto doblar el lomo y sus últimas luchas contra el Covid que, al parecer se llevó a su esposo, porque tendría que dejar el trono a su hijo, el mismo que no pudo con la Diana y es de esperar que menos con las responsabilidades del reino. Pues para eso hay que mantenerse erecto y más ante todo desafío.
Y puede hacerlo, es decir dejar el reinado en herencia por ese amuleto, como las claves del príncipe, en la obra "El Príncipe y el Mendigo" de Mark Twain. Claves que le permitieron al príncipe volver a palacio después de haber vivido la experiencia de mendigo en las calles de Londres.
Pero no vayamos a creer que eso es mantequilla. Recuerden ustedes que la princesa Diana, que sólo era princesa, murió trágicamente de tanto trabajar y sudar para ejercer su representación y cuidar a sus hijos. Se cuenta que, su muerte, fue justamente por haber tenido que salir de noche a la calle a comprar una jeringa para inyectar a unos de sus muchachos que tenía una simple gripe, de esas nada malignas, sino de pura fiebre y moco, que daban antes de la llegada del Covid. Y por ese quitarse de encima el acoso periodístico que querían saber la medida y marca de la jeringa, le imprimió a su vehículo tal velocidad que terminó estrellándose ante un muro sólido, no algo debilucho y desleído como el príncipe, su esposo y padre de sus hijos.
Y es que los reyes, reinas, príncipes y princesas tienen demasiado trabajo que hacer, sobre todo ese de tener que estar resolviendo cuanto problema surja en el reino y más los que afecten a la comunidad mundial. Y los saraos que son bastantes, como casi todos los días y las vacaciones demasiado frecuentes en largos paseos en yates, agobian y destruyen rápidamente.
Por ejemplo, el rey "Emérito de España, Juan Carlos, el padre del en ejercicio, tuvo que abdicar cansado de tanto joderse en orgías con distintas mujeres que se le brindaban por su condición de rey, matando elefantes y bebiendo caña sin parar, aparte de sus agotadoras tareas oficiales del reinado. Pero dejamos aparte, todo el esfuerzo que significa vivir haciendo negocios ilícitos y el esconder lo por ello alcanzado
A la reina, quien ya ha recibido tres dosis de vacunas, le entró de golpe un leve resfriado, según una fuente, "El Palacio de Buckingham confirmó previamente que tanto la monarca como su difunto esposo, el príncipe Felipe, habían recibido sus primeras dosis de una vacuna contra el covid-19 en enero de 2021. Pero sobre las vacunas posteriores, el palacio se negó a revelar información citando privacidad médica."
https://cnnespanol.cnn.com/2022/02/22/reina-isabel-ii-cancela-compromisos-covid-19-trax/
Es que el oficialismo inglés, ni por el cipote, está dispuesto a revelar detalles acerca de las vacunas que aplicaron a la reina y su recientemente difunto esposo. Pero queda claro que este último, pese su edad, no tuvo impedimento en vacunarse, nada se lo impidió, pero al poco tiempo murió sin que se sepa con exactitud la causa, porque como en este caso, el de la reina, "el palacio se negó a revelar información citando privacidad médica".
Uno no duda que ella siendo reina, pese falta de tiempo, siempre habitual entre quienes viven demasiados atareados y sin nadie les ayude, como yo que hube de detener este trabajo para llenar de agua cuanto envase hallase a mano, dado que el agua llega un año por la cuaresma y ahora llevaba como semana y media sin venir y de repente me avisa el vecino, casi tirando los pulmones, como cuando Rodrigo de Triana gritó ¡¡¡tierra!! , se haya pegado por lo menos tres vacunas. Tampoco duda que, por ser reina, la gente no se le tira encima como a uno, en la calle, el abasto y en el banco mismo, buscando algo de efectivo, sino que más bien le saludan desde lejos y con una venia, pues eso de besarle la mano, que lo hacen personas muy cercanas, importantes y muy aseadas y saludables, debe estar suspendido. Tampoco duda que para entrar a palacio hay que pasar por una lluvia de cosas que matan las bacterias que pudieran venir desde afuera y más si esa persona se quiera o necesita a acercar a los espacios de la reina y el protocolo lo admite.
Pero por lo que sospecho, el rey murió de Covid, poco después de haberse aplicado sus tres vacunas, que el palacio no quiere revelar por "privacidad médica". ¿Cuáles fueron esas?
Y debió ser de Covid, pues si le vacunaron es por haberle hallado en perfecto estado como para eso. Y no teniendo necesidad, por su edad y ninguna obligación de exponerse a contaminarse reuniéndose con el primero que venga, como no creo tuviese que ir al trabajo, no obstante murió y no es por la edad, pues la reina sigue dura y curvera, pero contaminada de Covid y hay preocupación en "El Palacio de Buckingham". Por esto es valedero volverse a preguntar ¿cuál vacuna a la reina de Inglaterra y su consorte aplicaron? ¿Cuál se aplica en palacio y en Inglaterra primordialmente? Yo he leído de una marca preferida, Es la misma que el primer ministro Boris Johnson se aplicó y no obstante también Covid le ha dado.
No creo sea la China y tampoco la Sputnik-V de Rusia. Pues hacerlo sería como incitar al pueblo inglés y buena parte del mundo a imitarles. Y con los enemigos eso no se hace. Es más, a Inglaterra, como a EEUU, España y los países satélites del segundo, no dejan entrar a nadie que muestra haberse aplicado las vacunas antes mencionadas. Según ellos, esas son chimbas. Para ellos las buenas son unas pocas y una en particular. Pues más que vacunarse, hay que bajarse de la mula.
Pero el esposo de la reina Isabel murió, pese haber cumplido todo el protocolo de vacunas como de repente, así como muere tanta gente que al final sabemos es de Covid, ayudado este por complicaciones con otras enfermedades y deficiencias por la edad, Y a la reina, con sus tres vacunas encima y como canta Fray Luis de León "Qué descansada vida la del que huye del mundanal ruido", la agarró el Covid y en Palacio hay preocupación.
¿Qué vacunas le pusieron?