I.
Al leer con atención las cifras recogidas por la Organización Mundial de la Salud (OMS) nos vemos obligados a sacar una conclusión: la vida la estamos perdiendo por los pulmones.
La OMS es tajante al decir que "Las enfermedades respiratorias son las principales causas de muerte y discapacidad en el mundo".
Una afirmación que se soporta con seis registros muy alarmantes:
- Cerca de 65 millones de personas sufren de enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) y 3 millones mueren cada año por esta causa, lo que la convierte en la tercera causa de muerte en todo el mundo.
- Cerca de 334 millones de personas sufren de asma, la enfermedad crónica más común de la niñez que afecta al 14% de todos los niños en todo el mundo.
- La neumonía mata a millones de personas anualmente y es una de las principales causas de muerte entre los niños menores de 5 años.
- Más de 10 millones de personas desarrollan tuberculosis (TB) y 1,4 millones mueren cada año, por lo que es la enfermedad infecciosa letal más común.
- El cáncer de pulmón mata a 1,6 millones de personas cada año y es el cáncer más letal en todo el mundo,
- Más de cuatro millones de personas mueren prematuramente de enfermedades respiratorias crónicas.
Esta tragedia se debe a varios factores: a) los exógenos, entre los que destacan: i) mas de 2.000 millones de personas están expuestas al humo tóxico en interiores; ii) mas de 1.000 millones inhalan aire contaminante al aire libre; iii) cerca de 1.000 millones están expuestas al humo del tabaco y iv) los millones que consumen fármacos que debilitan el sistema respiratorio, y b) el factor endógeno representado por el pulmón débil.
II.
Indudablemente que necesitamos un pulmón saludable.
Para ello debemos estar conscientes de varias realidades.
La primera es que no podemos vivir ni un minuto sin respirar.
Segunda, el pulmón es el órgano más vulnerable a las infecciones y a las lesiones, debido a su exposición constante a partículas, productos químicos y organismos infecciosos presentes en el aire.
La tercera, el pulmón es una zona muy sensible de intercambio gaseoso: oxígeno desde el aire a la sangre y dióxido de carbono desde la sangre al aire. Por lo cual debe estar limpia, sana y a máxima capacidad (4.000–6.000 cm³). Cualquier alteración nos enferma.
Cuarta, que el ritmo de trabajo del pulmón es de unas 20.000 respiraciones por día.
La quinta, el pulmón es el órgano mas importante del sistema respiratorio.
Otra cosa importante es asumir un Protocolo de Salud Pulmonar que aborde varios aspectos: a) la higiene para mantener limpias las vías respiratorias superiores (agua de mar) y el interior de los pulmones (expectorantes naturales); b) garantizar que estamos usando toda la capacidad del pulmón (respiración profunda); c) consumir alimentos (Flavonoides) que se ha comprobado son fortificantes del pulmón; d) mantener un nivel de ejercicios físicos exigentes según la edad y la salud y e) evaluaciones periódicas de la función pulmonar (Capacidad Vital, Capacidad Pulmonar Total, Resistencia de las Vías Aéreas y Contenido de Oxigena Arterial), algo muy sencillo si utilizamos Analizadores Bioescaner Cuánticos.
III.
Se plantea:
- La creación de Comités comunales y escolares por la Salud Pulmonar.
- Apertura de Unidades de Salud Pulmonar en los centros de atención primaria.
- Elaboración de Cartillas sobre Salud Pulmonar.