I.
El peso corporal es un buen indicador de la condición de salud humana. Así que debe hablarse de peso saludable y peso indeseable. Debemos tener presente que el peso corporal depende de varias masas (ósea, muscular, grasa, sangre y otras sustancias) que constituyen la masa corporal. Además, debemos considerar que existen porciones y proporciones de esas masas que indican la normalidad de la masa corporal. En consecuencia, debemos vigilar y controlar la composición del peso corporal para garantizar el peso saludable.
De todas las masas, la que representa un gran riesgo para la salud, en caso de aumentar desproporcionadamente al punto de generar un peso indeseable, es la grasa corporal, ya que favorece muchas complicaciones de salud: diabetes, hipertensión, enfermedad arterial coronaria, ACV, cáncer, apnea obstructiva del sueño, osteoartritis, entre otras.
El peso indeseable por influencia de la grasa corporal se denomina Obesidad, considerada una Enfermedad Crónica No Transmisible (ECNT) y caracterizada como una pandemia incontrolable, ya que es un problema global de salud (1400 millones de obesos, según la OMS) que está acabando con la humanidad, puesto que, en el año 2000 afectaba un 15% de la población y en 2024 afecta el 22% con tendencia a afectar el 53% para el año 2044.
La obesidad puede asociarse a la mala alimentación por ingerir productos no saludables que alteran el metabolismo o generan déficit nutricional y desequilibrio hormonal; a la falta de actividad física; a los fármacos y a la predisposición genética.
La obesidad es una responsabilidad del afectado, su familia, la sociedad y los gobiernos.
Es un panorama preocupante en una realidad caótica por pensamiento capitalista, ya que por un lado, las prácticas convencionales (régimen hipocalórico, medicación para perder peso, intervenciones quirúrgicas), a las luz de los números, han sido derrotadas en lo clínico (seguro que no lo han sido en lo económico); y por el otro, se ha enraizado "la sociedad chatarra" modelada por los EEUU con 75% de su población enferma de Obesidad Inducida.
Sin embargo, la Naturopática sigue siendo la propuesta para derrotar a la Obesidad y sus promotores con un enfoque sistémico de la estrategia saludable que conjugue las políticas públicas anti-obesidad con el Arte de ser saludable que promovemos los naturópatas.
II.
Es un consenso en la comunidad mundial que luchamos por una humanidad saludable con Naturopatía, un PROTOCOLO NATURISTA PARA EL PESO ADECUADO con cinco líneas de acción para atender las necesidades individuales:
1) DIETA: Consumir alimentos saludables como carbohidratos no refinados, grasas no saturadas, hidratos simples como frutas, proteínas reales (pescado, huevos orgánicos y frutos secos) y todas las acciones para equilibrar la glucemia (evitar el azúcar, los edulcorantes artificiales), evitar niveles elevados de glucosa que se convierta en grasa
2) SUPLEMENTOS: Complejo vitamínico B para producir energía, controlar la glucemia y equilibrar las hormonas. Cromo para regular la insulina, la glucemia y los lípidos. Citrato de magnesio y manganeso para equilibrar la glucemia y producir energía. Zinc para el equilibrio hormonal y el control del apetito y Q10 que es un excelente antioxidante para la producción de energía.
3) PLANTAS MEDICINALES: Diente de León para estimular el funcionamiento del hígado y estimular la pérdida de líquidos.
4) TERAPIAS COMPLEMENTARIAS: Homeopatía con (Argentum Nitricum y Calcarea Carbonica, según el índice de emoción y Graphites cuando es consecuencia de la menopausia) todas en potencia de 30 CH. Acupuntura para impulsar la liberación de Endorfina. Masajes para estimular la circulación y eliminación de toxinas. Aromaterapia fundamentalmente con Pomelo para reducir el apetito.
5) AUTOAYUDA: Masticar bien los alimentos, hacer ejercicios físicos y cumplir con la planificación acordada.
III.
Derrotar a la Pandemia Obesidad requiere acciones de impacto colectivo como la formación de la población para elevar el nivel de conciencia saludable, asumir el protocolo naturista para el peso adecuado y desarrollar las políticas públicas anti-obesidad, en tal sentido recomendamos:
1) Adoptar el PLAN MUNDIAL DE LA OMS PARA FRENAR A LA OBESIDAD aprobado por la Asamblea Mundial de la Salud celebrada en 2022.
2) Asumir los acuerdos del Congreso Internacional sobre Obesidad (ICO) de 2024, realizado en São Paulo - Brasil del 26 al 29 de junio de 2024 por convocatoria de la Federación Mundial de Obesidad.
3) Promover el PROTOCOLO NATURISTA PARA EL PESO ADECUADO.
4) Desarrollar un Plan Urgente para el tratamiento de los obesos y la prevención del sobrepeso en todos los grupos etarios.
El lema es "Hablemos de Obesidad y …"