I.
El cuerpo humano, por naturaleza, está dotado de un sistema compuesto por órganos, tejidos, células, sustancias, energía y memoria, cuya función estratégica es mantener el equilibrio de la materia corporal para garantizar la salud (reparar, rejuvenecer, eliminar y limpiar son sus metas).
Es el Sistema Inmunológico (SIN) que defiende la soberanía corporal (la salud). Su eficacia y calidad dependen de dos condiciones. Una, que esté completo y sincronizado. Dos, que nosotros (administradores del cuerpo) lo cuidemos siempre y no sometamos al cuerpo a condiciones extremas que pudieran superar la potencia del sistema.
Hay síntomas como tos, fiebre alta, mucosidad, diarrea, vómitos y dolores, que nos dicen que el SIN está funcionando y tratando de sanar en forma natural. Cuando un examen de laboratorio identifica infección pero la persona está asintomática, hay que preocuparse, porque el SIN ha fallado y también hay que evitar los medicamentos para eliminar los síntomas, ya que eso daña el SIN.
También existe una serie de señales en nuestro cuerpo que nos dicen que algo está poniendo en riesgo nuestra salud por baja inmunidad: fatiga, apatía, infecciones recurrentes, inflamaciones, reacciones alérgicas, cicatrización lenta, diarreas crónicas, infecciones micóticas como las aftas y furúnculos o "nacidos", que son producto de grandes desequilibrios que, no han podido ser controlados por el SIN ó porque éste se desconfiguró y está eliminando los elementos sanos y/o incumpliendo la función estratégica. Esto último, la medicina occidental o alopática, lo denomina Enfermedad Autoinmune, condición que, por ser mal interpretada y mal atendida, está afectando unos 355 millones de personas en el mundo con la sentencia de incurable y la tendencia creciente.
Las Enfermedades Autoinmunes, según son como 100 y las clasifican en dos grandes grupos. El primero, Enfermedades Autoinmunitarias Sistémicas (EAS) que comprende 16 nombres (lupus eritematoso sistémico, artritis reumatoide, esclerosis sistémica, espondilitis anquilosante, artritis reactiva, polimiosistis/dermatomiositis, síndrome de Sjögren, síndrome de Behçet, síndromes vasculíticos, poliarteritis nodosa, arteritis temporal, arteritis de Takayasu, enfermedad de Kawasaki, granulomatosis de Wegener, síndrome de Churg-Strauss y sarcoidosis). Y el segundo, denominado Enfermedades Autoinmunitarias órgano-específicas (EAOE) con 12 órganos afectados (Tiroides: tiroiditis de Hashimoto, enfermedad de Graves; Sistema nervioso: esclerosis múltiple, síndrome de Guillain-Barré; Músculo: miastenia gravis; Corazón: fiebre reumática; Estómago: anemia perniciosa; Intestino: enfermedad de Crohn, colitis ulcerativa, enfermedad celiaca; Glándula suprarrenal: enfermedad de Addison; Páncreas: diabetes tipo 1 autoinmunitaria; Piel: pénfigo, psoriasis, vitíligo; Hígado: hepatitis autoinmunitaria y Hematológicas: anemias hemolíticas, púrpura trombocitopénica autoinmunitaria. Los grupos de medicamentos y protocolos pasan de 500 y su eficacia está en entredicho.
Para la Naturopatía, la solución está en un sistema inmunológico robusto que se logra con protección y producción en base a las leyes de la naturaleza humana.
II.
Desde la tribuna de la Naturopatía siempre llamamos a proteger el sistema inmunológico y a producir inmunidad, de manera simple y suficiente.
1) Para proteger debemos conocer lo que es nocivo para la inmunidad, situaciones que debemos aprender a evitar y manejar:
a) Insomnio porque evita la limpieza y reparación de los tejidos, así como la producción de sustancias e incrementa la acidez en el organismo.
b) Dieta desequilibrada, tanto en la higiene y la biodisponibilidad, como en su composición. Vacía en nutrientes pero llena de toxinas.
c) Sobrecarga de Estrés que obliga a las glándulas suprarrenales a producir un exceso de Hidrocortisona que anula la respuesta inmune.
d) Abuso de antibióticos que matan la flora intestinal, la base de la inmunidad.
e) Exceso de toxinas que absorben la atención y energía del SIN.
f) Trastornos emocionales que bajan las defensas: depresión, infelicidad, ansiedad, actitud negativa (con razón, ahora le dicen tóxicos a los amargaitos).
2) Las acciones para Producir Inmunidad, la Naturopatía las recoge en un Protocolo Básico de seis líneas gruesas:
a) Dieta: Debe ser saludable y evitar azúcar blanca, ya que disminuye la capacidad de los glóbulos blancos. Consuma frutas y verduras de colores por su alto contenido de antioxidantes. Ingiera vitaminas A, C y E, Selenio y Zinc. Consuma Prebióticos para fortalecer la flora intestinal. Tome Omega 3 para fortalecer los glóbulos blancos.
b) Consumo de Líquidos: Tome agua en su estado natural, ya que es el mejor transporte de nutrientes y lo que mejor arrastra las toxinas. Refuerce con agua tibia en ayunas.
c) Suplementos: Complejo B, 25 mg de cada una; Vitamina C, 1000 mg; Antioxidantes (Vitamina A 2500 UI, Vitamina E 400 UI, Zinc 15 mg, Selenio 0,1 mg); Ácidos Grasos (Omega 3, 1000 mg); Probióticos como el Yogurt Natural Ecológico y los Prebióticos a partir de ajo, cebollas, lentejas, avena y plátanos.
d) Plantas Medicinales: Astrálago (Astragalus membramaceus) una cucharadita de tintura o 900 mg; Echinacea (Echinacea Angustifolia), 390 mg; Anamú (Petiveria Alliacea), 400 mg; Uña de Gato (Uncaria Tormentosa), 430 mg; Ajo (Alliumsativum), 1000 mg; el super jarabe Estín que contiene Zanahoria (Daucus carota), Apio España (Apium graveolens), Propóleo (Gr propolis), Miel de abejas y por último, el INMUNO-Batido de Jugo de naranja orgánica recién exprimido, Zanahoria, Apio España, Jengibre, Miel y Pizca de Pimienta Negra.
e) Terapias Complementarias. Homeopatía con potencial de 30 CH. Arsenicum Album; Nux Vómica o Pulsatilla, según sea la situación emocional. Acupuntura para equilibrar el meridiano del estómago para equilibrar la función de inmunidad y el meridiano de vesícula biliar ante resfriados y gripes. Auto hemoterapia durante 3 días consecutivos.
f) Autoayuda. Practicar ejercicios físicos. Divertirse para impulsar la inmunidad por la actitud positiva y la felicidad.
III.
A fin de contribuir con la inmunidad colectiva, recomendamos varias cosas:
1) Desarrollar la temática del Sistema Inmunológico como un proyecto transversal en la educación primaria.
2) Foros sobre el Sistema Inmunológico cada mes en las Asambleas de ASIC.
3) Colgar en el Portal del Ministerio del Poder Popular para la Salud, un Protocolo Naturista para reforzar la Inmunidad.
4) Que en el XI Congreso Nacional de Medicinas Naturales y Terapias Complementarias y III Congreso Internacional de Naturopatía, a realizarse en el estado Miranda-Venezuela, asuma como tema de todas la presentaciones a la Naturopatía para Reforzar la Inmunidad Humana.