El cerco epidemiológico es un alambrar en oposición a una situación fenoménica bacterial y fenoménica viral, llevado, el cerco, por la actividad real empalizada por la promoción regional nacional mundial en que el estado maniobra y conduce planes tácticos estratégicos de sostenidas movilizaciones unidas incendiarias ideológicas de ataques y contraataques, de ofensivas y defensivas, hacia y en oposición a lo bacterial y lo viral afectiva epipanen (epidemia pandemia endemia), en el terreno.
El cerco epidemiológico, producto de la agencia secreta suntzuiana, que acosa y acorrala, circundando y rodeando al enemigo, esto es, alambrar y desalambrar, la guerra contradictoria borrosa presente, en un movimiento real histórico ludovicosilvaiano de eterna noria notoria, ganancial guerra dialéctica venezolana bolivariana, en los ocasionales momentos coyunturales del coronavirus.
El cerco epidemiológico, que la guerra del coronavirus, sea una ocasión, que de ocasión y lugar, que enseñe a una salida inteligente bélica a cambio del cerco bloqueo amenazante del imperio gringo go home unilateral ilegal irracional criminal, esto es al cerco trumpianológico.
El cerco trumpianológico, deviene de la nefanda imprecación georgebushiana, del o estás conmigo o estás con mi enemigo, de la voladura de Las Torres Gemelas Neoyorquinas, el 11/09/2001, día de La Patrona de Venezuela, que con semejante barbaridad, el gobierno imperial de EEUU, invade con el fallido golpe de Estado para con Venezuela, el 11/04/2002, enfrente a un pueblo sabio guerrero empoderado con la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, recobra a su presidente comandante Chávez, y restituye la democracia, el 13/04/2002.
El cerco trumpianológico, deviene, endenantes, de la nefanda imprecación georgebushiana, tras la voladura de Las Torres Gemelas Neoyorquinas, y, que con semejante barbaridad, el gobierno imperial de EEUU, invade Irak, Libia, Siria Yemen. Endespués, con el decreto barakobamaiano, en perjuicio de Venezuela, de ser una amenaza inusual extraordinaria, en que surge el Derecho Inusual Extraordinario Norteamericano en oposición al Derecho Usual Ordinario Romano.
El cerco trumpianológico, deviene, del Derecho Inusual Extraordinario Barakobamaiano, en que cae en Venezuela la viral guerra declarada, ataques falsos positivos, la confundida propaganda ofertante engañosa, desatada propaganda criminal en contra de la paz, cerco bloqueo guerra económica comercial financiera, eléctrica hídrica petrolera gas gasolina transporte comida Clap medicina, y, las demandas del pueblo Venezuela, ante la Corte Penal Internacional por los crímenes de lesa humanidad, delitos atroces inhumanos a la salud y a la caja de pan de los venezolanos. Más guarimbas, autoproclamaciones, falsas ayudas humanitarias, falsos positivos uribeianos colombianos, atentados, magnicidios. El cerco trumpianológico, deviene de George Bush y de Barak Obama, hacia la de invadir y aplastar a Venezuela.
El cerco epidemiológico y el cerco trumpianológico, es contenido que contiene el continente de continentes suntzuiano, llevado, los cercos, por la maniobra tercio inclusiva aristotélica profunda, de los planos, conducciones, estrategias, disposiciones, energías, puntos débiles y puntos fuertes, las marchas, los terrenos, los flamígeros ataques ideológicos mentales y reales, en los terrenos de la consciencia y de la inconsciencia, las agencias secretas inevitables, visibles e invisibles. Sí, ahí, sí, en la maniobra, están los aspectos límbicos contradictorios. La paz y la guerra, y, esto está planteado en Venezuela. La paz cronológica y la guerra biológica, la paz eterna cíclica y la guerra sostenida maldita, la paz celestial teologal y la guerra mefistofélica infernal.
El cerco epidemiológico y el cerco trumpianológico. El ministro para la Salud, Carlos Alvarado, explicó que el cerco epidemiológico en Venezuela ante la amenaza por el brote de coronavirus inició en los aeropuertos, pues allí es donde son abordadas las personas que provienen de China, país donde se desarrolló el virus que ha cobrado la vida de al menos cuatro mil personas. Véase la página web, https://www.laiguana.tv/articulos/678617-ministro-salud-cerco-epidemiologico-coronavirus-venezuela/: "Ya tenemos seis semanas en este plan, haciéndole un seguimiento por 14 días (a las personas que arribaron al país) con llamadas o visitas diarias a ver si han desarrollado algún síntoma", dijo en entrevista al programa Cara a Cara, el cual es moderado por el periodista Clodovaldo Hernández. Alvarado detalló que en Venezuela ya se cuenta con el kit diagnóstico para determinar si alguna persona que tenga algún tipo de síntomas posee coronavirus. Incluso recalcó que desde la semana pasada, cuando se empezó a reportar casos en Suramérica, se ha ampliado el concepto de personas a vigilar. Entonces (hemos incluido) a todos los países, que ya son 20 donde está circulando. En este momento se le hace vigilancia a todas las personas que vienen no solamente de China, sino de Irán, Italia, Emiratos Árabes. No es solamente es en aeropuertos, sino en puertos. A partir de esta semana comenzamos en los pasos fronterizos".
El cerco epidemiológico y el cerco trumpianológico. El atento ministro venezolano, alambrando y desalambrando, componiendo y descomponiendo, construyendo y destruyendo, planeando y desplaneando, peinando y despeinando, y, el final teleológico sintético del golpe feroz cesarvallejoiano, de los casos límite contradictorios borrosos, tesis y antítesis, el coronavirus llegará, inevitablemente, a Venezuela, pues, la corona del virus es la tierra terrenal del brillo brillante oro y del opaco ósculo oscuro oro, cosa causal conocida bélica, a lo que las criminales manos del gringo go home, de ponerle garra atracadora interesada a todos los activos tajada CITGO petrolera venezolana, opaco ósculo oscuro oro. La guerra biológica, es un hecho real, el imperio criminal EEUU, niégase a perder su poder, ante la ruta de la tela pequinesa, y, a cambio de su desprestigio y del que dirán mundial, ha de acabar con la humanidad terrena, coño, si ya no tiene el pasaje para el planetario Planeta Rojo Marte, como lo planteara ahora sanseacabó siquiera, el imperial ultra millonario, Elon Musk, la guerra biológica, la guerra viral es buena la excusa para escapar, y, que jódase la humanidad.
El cerco epidemiológico y el cerco trumpianológico. A mas y más, que con esta guerra viral, el Gobierno venezolano publicó un encartado para informar sobre todo lo relacionado con el coronavirus, padecimiento conocido científicamente como el Covid-19. La publicación realizada por el Ministerio para la Comunicación y la Información describe en su portada que "la clave contra el coronavirus es la prevención" y así colocan una serie de contenidos necesarios para que el pueblo venezolano conozca con precisión sobre esta enfermedad que ya tiene presencia en varios países. El texto impreso en papel periódico explica qué es el coronavirus, cuáles son sus síntomas, cómo se propaga, las formas de contagio, qué medicamentos se pueden utilizar o no, entre otros detalles. También el impreso expone una serie de medidas que aconsejan tomar en cuenta para prevenir contagios, sobre todo evitar saludar de mano, beso y/o abrazo. ¡Vergo! Sorpresa: Si de los tiempos del cólera del corona tripas, surgió, la gran novela mágica de Gabriel García Márquez, la historia de bacterias enséñanos, que ha de salir a la luz pública la novela del corona virus, antes que el hombre transfiérase al planetario Planeta Rojo Marte.
El cerco epidemiológico y el cerco trumpianológico. Mas y más, de la página web, https://www.laiguana.tv/articulos/678536-trump-test-respondio-coronavirus/, lléganos la información, en que el presidente estadounidense afirmó que no ve razón para realizarse una prueba por el coronavirus, de que no tiene ningún síntoma de la enfermedad, por lo que afirmo categórico: "Me siento extremadamente bien, y, que el coronavirus iráse pronto, por lo que insto a los estadounidenses a mantenerse tranquilos".
El cerco epidemiológico y el cerco trumpianológico. Quizás y sin quizás, y a buen seguro, que tanto un gran laboratorio corporativo internacional como una farmacéutica transnacional zamuro, han de tener el remedio puro para el mal creado y el malcriado virus de turno. Pues, la guerra es la política seguida de otros medio. La política es la guerra seguida de otros medios. La guerra son los negocios seguidos de otros medios. Los negocios es la guerra seguida de otros medios. La guerra es el comercio, seguido de otros medios. El comercio es la guerra, seguida de otros medios. El gobierno imperial EEUU, ha perdido la guerra, la política, los negocios, y, los comercios en la ruta de la ceda pequinesa. Helo ahí, tanto la evasiva trumpiana como la del ultra millonario, Elon Musk, la guerra biológica y la guerra viral es buena excusa para escapar al planetario Planeta Rojo Marte, y, que la inadvertida humanidad vuélvase a joder en la terráquea nave espacial giratoria dossier waltermartíneziana, en todas las noches similaricadentes tautológicas repetitivas platónicas, una y una y otra vez, acontecimientos históricos sinusoidales ludovicosilvaianos en pleno desarrollo, y, en cíclica eterna noria notoria.
Si el cerco epidemiológico y el cerco trumpianológico, han de ser la guerra. Entonces sea dicho que la política es la guerra seguida de otros medios. Ergo vergo sea dicho que los negocios es la guerra seguida de otros medios. Ergo vergo sea dicho que el comercio es la guerra, seguida de otros medios. Ergo vergo sea dicho que el gobierno imperial EEUU, ha perdido la guerra, la política, los negocios, y, los comercios en la ruta de la ceda pequinesa. Ergo vergo sea dicho que con la guerra biológica bactericida viral, asina asín así, reacciona el gobierno imperial EEUU a las circunstancias pequinesas tanto a la tecnología comercial 5G como a la nugatoria utilitarista comercial del punto G femenino contradictorio borroso 69 cojedeño de los aspectos límbicos antagónicos difusos, de lo cóncavo y de lo convexo. Ergo vergo sea dicho que el sexo pequinés whitmaniano lo contiene todo en respetado derecho, en los casos límite contradictorios borrosos, el corona virus y en el corona tripas. Ergo vergo sea dicho, que el amor en los tiempos del cólera es el amor en los tiempos del coronavirus. Ergo vergo sea dicho que Fermina Daza y Florentino Ariza, marcaron los personajes para una nueva mágica novela borrosa del amor en los tiempos del coronavirus, en el cerco epidemiológico y en el cerco trumpianológico, antes que el hombre transfiérase al planetario Planeta Rojo Marte.
Otrosí: A Radio Nacional de Venezuela en San Carlos-Cojedes, cayóle, en brusco inesperado impulso, el coronavirus, óyese gangosa fañosa defectuosa, interrúmpese a cada instante, eso es desesperante, en inteligible confusión, punto débil revolucionario y punto fuerte adversario, del contradictorio borroso 69 cojedeño.