El insolente, criminal e irresponsable de Donald Trump y su obsesión con Venezuela

Miércoles, 22/04/2020 11:05 PM

Estamos claros que la política internacional de todos los presidentes de los EE.UU ha sido de saqueo, rapiña, aventurerismo e invasión de otros pueblos. De eso han vivido, pasando por encima de toda legislación internacional; ya que se creen los policías del mundo, predestinados por su "Doctrina del destino manifiesto" o política del garrote y la anacrónica "Doctrina Monroe" (América para los americanos). Los Presidentes en última instancia son parte de ese complejo industrial militar; el lobby judio, las trasnacionales y los think tanks (tanques pensantes). Bajo la excusa de una "doctrina de seguridad nacional" siempre habrá una justificación del imperio del norte para arremeter contra los pueblos del mundo. Hemos llegado al siglo XXI con un sistema capitalista agotado, inviable desde todo punto de vista; pero que se resiste a morir. Estamos en la etapa imperial USA del sistema basado en la explotación del hombre por el hombre. Como lo dice Néstor Kohan: "Una especie está en peligro de extinción: ¡La especie humana! El depredador se llama capitalismo. Cruel y senil, este asesino lleva cinco siglos infatigables de perversa faena. Antes de culminar su agonía y morir de una buena vez, pretende arrastrar a su tumba a toda la humanidad. No sé trata de un individuo en particular, sino de todo un sistema; un conjunto de relaciones sociales frías, anónimas y burocráticas; en el seno de las cuales las personas son solo medios de lucro, ganancias y acumulación".

Conceptualizado lo anterior podemos entender, que los dos últimos Presidentes de los estados unidos: Barack Obama (Demócrata) y Donald Trump (Republicano) representan la misma política de destrucción y muerte a los pueblos que no compartan su nefasta y genocida política. Nuestro recordado jurista y hombre de letras de Monagas camarada Dr. Jesus R. Zambrano (+), cuando se tocaba este tema decía de manera jocosa, que la diferencia entre demócratas y republicanos era que: "unos van a misa a las 7 de la mañana y los otros a las 8 am". Recordemos que Obama (2009 - 2017) nos dejó el historial de: Invasión a Siria, Libia y Yemen; todo esto a nombre de la libertad y la democracia y sin pararle a las instancias internacionales. Asesinó cobardemente al presidente Muamar el Gadafi, de Libia, mediante un falso positivo. Apoyó la llamada "primavera árabe" (que eran Golpes de Estado en Túnez, Egipto, etc.). Apoyó a organizaciones terroristas como ISIS (Daesh). Propició un Golpe de Estado contra el presidente Mel Zelaya en Honduras y Fernando Lugo en Paraguay; con la complicidad de la OEA. Fomentó el Virus Mers, Ébola, Virus H1N1. Apoyó el Golpe de Estado en Brasil, apoyó al usurpador de Michel Temer y encarcelamiento al presidente Lula Da Silva. Le dio la espalda al proceso de Paz en Colombia. Y como si fuera poco, antes de irse firmó el decreto que Venezuela era "una amenaza inusual y extraordinaria". Y el piromaníaco de Trump ya tiene en su prontuario: Golpe de Estado en Bolivia, con la complicidad de la OEA y la canalla mediática; asesinato de niños inmigrantes, apoyo a mercenarios y narcotraficantes de Colombia, guerra comercial contra China y Rusia, desprecio a sus aliados de la Unión Europea, guerra declarada a la República de Irán, apoyo a los terroristas que tratan de derrocar al gobierno de Siria. Hemos llegado a la actualidad con una pandemia (Coronavirus) que azota implacamente a toda la humanidad, y una expresión imperial (Trump) que en vez de dedicar todo el arsenal financiero y científico para atacar ese mal; lo que está pendiente es como destruir a Rusia, China, Irán, Nicaragua, Cuba y a nuestra querida Venezuela. Este presidente desde el mismo momento en que se habló del Covid-19, hizo caso omiso a las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y dijo que era una simple "gripe que se irá con el tiempo". Allí están las consecuencias: los EE.UU en el primer lugar de muertos y contagiados. Este señor (Trump) y su camarilla no descansa en su obsesión de aplastar a la Revolución Bolivariana, y cada día aprieta más su criminal e ilegal bloqueo contra el país; impidiendo que compremos alimentos, medicinas y otros bienes esenciales. Nos roban nuestros recursos y activos financieros como han hecho con la empresa Citgo (EE.UU), Monómeros en Colombia y nuestro Oro en Europa. Y como si fuera poco y en una vulgar provocación a nuestra soberanía, colocan todo su poderío militar naval frente a nuestras costas. Lo último que acaba de hacer el mal parido y psicópata de Donald Trump, es ordenarle al Citibank transferir los recursos que le pertenecen a Venezuela (342 millones de dólares) a una cuenta de la Reserva Federal de los EE.UU. Esto tiene un nombre: ROBO DESCARADO. Por supuesto, como se ha denunciado todo esto, se hace bajo la solicitud y anuencia de la mal llamada oposición venezolana presidida por ese personaje siniestro y traidor como lo es Juan Guaidó Márquez, quién se cogerá ese dinero para seguir su conspiración desde su "gobierno virtual".

En este contexto estamos. Un capitalismo y sus expresiones concretas demostrando que el camino de la humanidad no puede ser el egoísmo, la mezquindad y la apropiación capitalista. Y que la salud es un derecho universal y no una mercancía. El desastre en los Estados Unidos, Italia, España, Brasil, Ecuador; demuestran que el camino no es el neoliberalismo. El Dr. Anthony Fauci, primera autoridad en los EE.UU en materia de Alergias y Enfermedades infecciosas, al ser interpelado recientemente por el Congreso de esa nación dijo de manera tajante: "EL SISTEMA FRACASÓ". Como recordó recientemente el presidente Nicolás Maduro, al señalar que estamos en presencia del "DEMONIO CAPITALISTA".Por supuesto, los defensores del viejo orden capitalista no aceptan ni aceptarán estas verdades, de allí el desespero del gobierno de los estados unidos de echarle la culpa a China, a la OMS, para esconder de esa manera la naturaleza del desastre sanitario en esa nación dónde todo está privatizado; ya que la salud es una mercancía y dónde la vida de los trabajadores poco importa, si no hay dinero de por medio. De nuevo han apelado a una narrativa guerrerista para confundir a la opinión pública (teoría de la conspiracion y el terrorismo). En un acto de politiquería barata y de prepotencia imperial, hemos visto en los últimos días a un Donald Trump incitando a sus fanáticos seguidores a que salgan a la calle a desafiar el confinamiento; en clara oposición a la OMS, a los científicos del mundo y a la mayoría de la población del norte que coincide en que no hay condiciones para poner fin tan rápido a la Cuarentena. Locura total de este sátrapa de la casa blanca. El mundo al revés. En este momento nos tocó a los hijos de Bolívar luchar contra la pandemia Covic-19, a la vez resistir ante el bestial asedio del imperio, asesino de los EE.UU representado por un loco virulento llamado Donald Trump. El debate ya está en la calle. Debate para poner las cosas en su sitio. Le toca a los pueblos reflexionar al respecto y asumir los grandes desafíos de esta nueva época por demás compleja. Como lo dice el Editorial del "Washington Post" del pasado 25 de Marzo: "O MUERE EL CAPITALISMO O MUERE LA CIVILIZACIÓN HUMANA", para luego sintetizar lo siguiente: "... No podemos seguir viviendo en un planeta donde más del 80% de la riqueza, está concentrada en un 1% de la población. Me resisto a defender con mi silencio un indefendible y despiadado statu quo que concentra la riqueza de nuestros recursos naturales, y medios de producción en pocas manos, capaces de derramar sangre inocente por mantener intacto ese statu quo. Yo no puedo defender este statu quo que privatiza el agua, la salud, la educación, el viento, el sol; Derechos Humanos Universales que se han convertido en mercancías, que se encuentran solo al alcance de una minoría rapaz, voraz e insaciable; mientras las grandes mayorías invisibles; solo son visibles en los procesos electorales, disfrazados de Democracia. Una gran realidad de todo lo que pasa a nivel mundial que nos quieren tener controlados a losas vulnerables del planeta tierra porque la avaricia y la ambición y ancias de poder los tiene enfermos".

De nuevo la confrontación histórica: ¡Monroísmo o Bolivarianismo! El camino es duro. Está lleno de tropiezos y tempestades. Como decía el Comandante Argimiro Gabaldón: "El camino es difícil... pero ese es el camino". Sigamos resistiendo y venciendo. ¡Viva la unión Cívico Militar! ¡Independencia y Patria Socialista! ¡LEALES SÍEMPRE... TRAIDORES NUNCA! #QuédateEnCasa.

( * ) Diputado a la Asamblea Nacional (PSUV)

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