El ministerio de cultura de los estados Unidos; es la herramienta que usan para sostener la agresión en el mundo, la punta del iceberg con el que se encarga de adoctrinar los pueblos y en Venezuela en uno llamado Chuao, fracaso.
Quien de esas lumbreras que construyen fantasía, iba a imaginar que ese negro guachamarón que andaba por la única calles de ese ancestral PUEBLO y que se veía orgulloso de sus valores, defendiendo su tradición con un patriotismo superior al de cualquier citadino y cuando como nos tocaba en semana Santa o vacaciones de carnaval ir por esos lugares; lo veíamos tocando el tambor con tal habilidad: íbamos a suponer que tenía en ese macuto lleno laures para cambiar cuando se rompan de tanto golpear el cumacu: tenía una ferea voluntad y organización con la comunidad, que le daba fuerza para deter la intención de cualquier imperio que tratara de infiltrar mercenarios para usurpar su terruño, conocido por tradición como PATRIA DE BOLIVAR.
El negro que uno creía que solamente bailaba con aquella magia de sus ancestros; tenía un secreto aparte de esa virtud para defender su tradición y era el amor por la PATRIA.
Con su valentía quedó en evidencia el fracaso de aventureros, que solo contaban la fantasía de direcciones cinematográfica para lanzar aventuras de mentiras, que solo eran creíbles en la debilidad.
En Chuao después de tan valiente hazaña, descubrimos que lo guiones cinematográficos eran entretenimiento para manipular: que el verdadero héroe de carne y hueso; el que no tomaron en cuenta cuando trataron de imponer su guiones; estaba escondido en la comunidad lejos de la contaminación: héroes que se permiten esperar el momento, para cuando lleguen con su sangriento plan: salir a mostrar, de que estamos hechos los hijos de Bolivar.
Entonces con un actos de valentía que va más allá del miedo; salir con el valor del héroe verdadero y someterlos con la responsabilidad y el compromiso que da la moral y que los mercenarios no supieron enseñar en sus películas.
El ministerio de cultura imperial fracasó, Hollywood fracasó y el imperio se dió cuenta, que la imagen de mercenarios de dos metros de altura y cuerpos formados a punta de esteroides: fueron sometidos por la verdad que construyó la revolución y cayeron amarrados con un bejuco artesanal y el valor que mostró aquel negro al enfrentar sin miédo la fantasía que durante siglos han impuesto.
En esta tierra de gracia se cayeron los pronósticos de imperio que asustaban solo con su nombre; le salió el fantasma de Vietnam y le derrumbó los planes de seguir atacando a una PATRIA que hace intentos por convertirse en socialista y tiene en la mente atravesado entre ceja y ceja; que PATRIA O MUERTE, VENCEREMOS Y HASTA LA VICTORIA SIEMPRE.
SIN PATRIA NO QUIERO VIDA.
HAZTE CONCIENCIA.