Las operaciones en desarrollo.
A cinco (5) meses y tres días de las elecciones por su reelección, el supremacista del imperio luce "de capa caída", seis (6) razones participan para esa condición;
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Razón economía: La recesión que vive el país imperial es alarmante, los datos que arrojan organismo y analistas en ese campo aseveran de una economía que los más conservadores dicen, se contrae mínimo en un 3,5%, con un desempleo que aumenta en una escalada turbulenta, con déficit fiscal por encima del 15% y una deuda pública en más del 125% del Producto Interno Bruto, multiplicándose la pobreza que ya la tenía elevada en algo más de 40 millones de personas. Donde gozaba de cierto optimismo entre los electores norteamericanos, se vino a menos y hoy tiene esta razón en contra.
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Razón China. El proyecto chino es el de mayor fortaleza de operatividad y triunfos en la geopolítica mundial, es un proyecto cuyo aliento también es histórico y milenario, que contextualiza con Xi Jinping al anunciar en 2013, la propuesta de la Nueva Ruta de la Seda (NRS) aludiendo a la antigua ruta del puente oriente-occidente con el Asia central y el llamado por la historia de mirada europea, como medio oriente, que va reconfigurando todas sus escalas espaciales, haciéndose multiescalar, esto es, sin exclusividad de territorio de origen, trascendiendo entonces la idea de zona/ territorio, por territorio/red, desmontando la contigüidad como principio geográfico por distancia interconectada, todo ello en un gran desafío financiero/comercial, tecnológico/técnico y militar dirigido desde una instancia de buró o despacho en la estructura de Partido, del partido comunista, en un par intersistema, que de producción sigue siendo exitoso y que a modo de dato; en Producto Interno Bruto y en capacidad de compra la colocan en el primer lugar en la economía del planeta. Todo esto no ha podido ser disminuido por las transnacionales de la comunicación de los Estados Unidos, La tecnología 5G marcha al paso marcado por la planificación del Partido Comunista, donde la pandemia no pudo paralizarla, quedando la gestión de Trump derrotada, a pesar de todas las iniciativas de sanciones en su guerra comercial y financiera.
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Razón Venezuela. La derrota que Estados Unidos está teniendo de Venezuela, supone una gran herida, muy difícil que más dolorosa pueda serle, a pesar de todo el esfuerzo en los órdenes económicos, financieros, militares, diplomáticos, conspirativo, de contrainteligencia que los Estados Unidos han hecho, no ha menoscabado la dignidad, moral y el apresto de un pueblo que solicita radicalizar para seguir consolidando su revolución. Demuestra que es un proyecto histórico de socialismo bolivariano y que en consecuencia la gestión de Trump no podrá mostrar ningún éxito en este sentido, que no sea el de que ha hecho sufrir a un pueblo en su economía y servicios, pero que con la dignidad que se expresa como extirpe de un Guaicaipuro colectivo, le responde con más bolivarianismo y más socialismo. A pesar de la persecución financiera y los bloqueos, Venezuela en estudio comparativo ha sido exitosa con el caso pandemia, como el gran punto de la agenda mundial, eso parece que no tendrá perdón por sus enemigos. Tiene así como con China los Estados Unidos con Venezuela, una costosísima derrota geopolítica, un descalabro si entendemos que es en su mismo continente y con un país del tamaño y la población de Venezuela.
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Razón Irán. Este país como república islámica del golfo pérsico, confrontando y en tensión permanente desde 1979 con los Estados Unidos, vivieron hace unos meses, lo que pareció ser una ofensiva de la política de asedio de los Estados Unidos, cuando, según la Casa Blanca, el presidente Trump autorizó el asesinato del General Qasem Soleimani, no obstante, la respuesta de Irán se dio con ataques misilísticos a dos bases militares norteamericanas en Iraq, que dio como resultados un grupo de militares heridos y destrozos a la base. Estos tres días, Irán le acaba de dar metafóricamente, una "cachetada geopolítica" a su archienemigo, al traer cinco (5) buques cargados de gasolina con otros pedidos a su enemigo bolivariano, que está en su área que ellos han denominado como su "patio trasero", en alegoría a la "doctrina Monroe". Semejante situación contribuye con gran peso a definir una gestión de Trump debilitada, que con declaraciones grandilocuentes y movimientos de militares al Caribe y al gobierno servil, entregado, manso, obediente, sumiso, humillado de Colombia intentan dar algún susto.
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Razón pandemia. El supremacista no fue capaz de un manejo medianamente aceptable del virus, el imperio quedó como "tigre de papel", con una multiplicidad de incoherencias en el manejo de la pandemia, que de "una gripe", en febrero, como la señalaba, iba a desaparecer por obra de la dinámica inercial o algún milagro, pasando a ser una virosis de exponencial contagio que hoy, 30 de noviembre, suma un millón setecientos mil personas, con una letalidad que supera los 103 mil fallecidos, una demostración que para el que sabe leer de gestión, es un presidente que desvaría; en una oportunidad solicitó que había que inyectarse desinfectante, de modo que ante sus monumentales errores suspende la financiación que le corresponde como país perteneciente a la Organización Mundial de la Salud (OMS). Esto es una razón para que el supremacista tenga su capa caída faltando algunos días más y cinco meses para las elecciones presidenciales.
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Razón por prácticas racistas. Cómo que no fueran razones suficientes, se le agregan las actuales manifestaciones y protestas ante el asesinato de un afroamericano por parte de un policía, no hubiese sido un problema mayor si la orientación supremacista no fuera una práctica en ese país aunado a las, otra vez, destempladas declaraciones del inquilino de la casa blanca, en este momento en desarrollo, esperaremos un poco al respecto.
Todas estas razones desesperan, se entiende que se le va la posibilidad de materializar su aspiración de repetir como presidente, pareciera que pasa a depender de una acción foquista y efectista y para ello en un "cara o sello", así tiene propuesto desplegar en el país del gobierno más entregado y arrastrado sin pizca de dignidad, que es el de Duque, la Misión de 800 tropas de experiencias en fuerzas de tareas o fuerzas operativas en Siria, Libia y Afganistán como fuerza de élite de la SFAB.
Ante esa situación, el grupo de Lima está desdibujado y los aliados europeos concentrados en la pandemia, los gringos solos con unas Fuerzas Armadas de Colombia al ser tratados como rebaños y tutelados por los norteamericanos, tendrían poca moral, así que, entendiendo que una violación a la soberanía venezolana, significaría aventurarse a lo cruel y a una guerra larga de proporciones que podría poner a Colombia como un territorio, que pudiese quedar con otro nombre y otro(s) gobierno(s), el de Venezuela, quizás estaría a la orden, porque tendrían en la fuerza y furia bolivariana la fortalecida moral y el apresto operacional de una unidad cívico militar policial, que por todo lo alto está a lo largo y ancho de Venezuela, prevenido, dispuesto y preparado.
Conocido esto, es posible que el supremacista siga el consejo del "gobierno de continuidad" que hay en Estados Unidos desde el 1ero de febrero, a propósito de la pandemia a la orden del General Mark Esper y decidan, por la necesidad de lo rápido, ante unas elecciones en noviembre, llevarse a Iván Duque o su jefe narco, por sus evidentes condiciones de narcotraficantes y el Presidente Donald Trump pudiese revertir en algo, su desastrosa gestión al frente del imperio y su opción de reelegirse, de "espada caída", quizás se revierta.