Hoy 3 de Noviembre se está celebrando la elección número 59 de la historia de los Estados Unidos de Norteamérica, están midiendo fuerza Donald Trump y Joe Biden, en representación de los tradicionales partidos, Conservador y Demócrata respectivamente, quien resulte favorecido de dicha confrontación en los Colegios Electorales, dirigirá desde la Casa Blanca los destinos de la primera potencia del mundo hasta el año 2024, la elección presidencial estadounidense se produce en condiciones coyunturales sumamente complejas, la mayor polarización de las ultimas cinco décadas, en el ínterin de una pandemia que está afectando gravemente la salud de buena parte de su población como lo es el Coronavirus, con efectos desbastadores de su economía, y una severa confrontación, algunas veces soterradas y otras declaradamente abiertamente con otras potencias del planeta, como lo son China, Rusia e Irán, la situación geo política yanqui luce comprometida, el descuido de tantos años de su área de influencia, en el Sur, en Centro América y el Caribe (patio trasero, como peyorativamente llaman), ahora es cuando está sintiendo el efecto de ese descuido, la penetracion silenciosa de Rusia y China, y recientemente de Irán, ha ganado terreno, le han robado el tiempo y el espacio en el propio Continente Americano, a pesar de la centenaria ley Monroe, América para los Americanos, los esfuerzos de la administración de Donald Trump para deponer al Presidente Nicolás Maduro en Venezuela, que se ha constituido como una especie de un "gran dolor de cabeza ", en los últimos dos presidente de EEUU, no ha terminado de cuajar, y con respecto a Cuba y Nicaragua, la pretendida desestabilización tampoco ha avanzado, según sus planes y deseos, por otro lado, la situación de orden social interno, con explosiones racistas violentas en varias ciudades norteamericana, y con un desempleo en pleno desarrollo, configuran un cuadro por demás complejo, las propuestas para superar dicho cuadro expresadas por ambos candidatos presidenciales no se perciben con claridad, no ofrecen salida en el corto y mediano plazo, y pareciera que la primera potencia del mundo inicia un marcado periodo de decadencia como país e imperial.
En lo que respecta al resultado que dicha confrontación y en su impacto en la Republica de Venezuela manejamos los siguientes criterios; obviamente que ambos personajes poseen estilos diferentes, lo cual se expresaría en el relacionamiento de los EEUU con la administración de Nicolás Maduro, y por supuesto en el manejo del bloqueo económico-financiero, las llamadas Sanciones, y en las amenazas de intervención militar desde la flota del Comando Sur, en todo caso esas circunstancias tendría que ver con estilos y formas particulares de Trump y de Biden, pero en cuanto al propósito, es invariable, ese sí es invariable, allí hay coincidencia total, la decisión de la salida del chavismo del Poder, es una decisión que compromete a la totalidad de las instancias que conforman los poderes fácticos norteamericano, estamos hablando del Pentágono, del Departamento del Tesoro, de la CÍA y por supuesto del Dapartamento de Estado, pero más allá de dichas instancias, están las grandes Corporaciones trasnacionales propietarias de las empresas, bancos y plataformas de la ciencia y Tecnologías, ductoras del capitalismo mundial, estamos hablando, del verdadero poder tras bastidores del poder aparente, el diseño del llamado "nuevo orden mundial", pasa por la subordinacion de las economías de todos los países a ese gran poder, que llamamos, el supra poder "tras bastidores", y más aún, la subordinacion de las economías pequeñas y proveedora de las materias primas, que conforman los países integrantes del llamado tercer mundo, o las economías de los países periféricos , la administración de Nicolás Maduro y del chavismo, están absolutamente conscientes de ello, optaron por la pelea frontal contra el monstruo de mil cabezas del capitalismo mundial, El Presidente venezolano para tal pelea escogió un menú de aliados como son los chinos, los rusos y los iraníes, pero ahora resulta que de los aliados mencionados es que depende el éxito o el fracaso de dicha pelea para mantenerse en el poder, es decir dependen fundamentalmente de factores externos, aún cuando en lo interno disponen de un aparato policial, militar represivo que han venido perfeccionando, pero repetimos, la dependencia de lo externo como complica el cuadro venezolano, y en particular de la vigencia o no de lo que el chavismo ha definido como el modelo de la revolución bolivariana, o el socialismo del siglo XXI.
La confrontación Donald Trump VS Joe Biden impacta en lo aparente el devenir político venezolano, pero no en lo sustancial, en cuanto al relacionamiento que se pueda generar de la Victoria de uno o otro, puesto que solo implicaría cambios de forma, pero no de fondo, por lo que los cambios son de naturaleza Gatopardiana, lo cual nos recuerda el proceso KAFKIANO, que al final son "cambios para que todo continúe igual", los EEUU y sus países satélites en América y Europa, (en el marco del capitalismo mundial), seguirán empeñados en salir de gobierno de Maduro y el chavismo, mientras tanto, el pueblo venezolano es el que paga "los platos rotos" en esa lucha opcionada exclusivamente por el Chavismo.
La elección norteamericana de hoy. ¿Y Venezuela qué?
Por: Mariano Crespo Colina
Martes, 03/11/2020 01:02 PM