Aquellos que piensan, que amarrando el bolívar y el Petro y al Dólar…
Aquellos que creen que conviniendo con el capitalismo financiero internacional…
Aquellos que aseguran que el sistema Swift, les va a servir para continuar haciendo operaciones financieras con los EEUU y sus aliados…
Aquellos que aseguran, que evitarán los bloqueos y las medidas coercitivas…
Posiblemente lo logren, solamente una vez que les demuestren a los norteamericanos, que están dispuestos a obedecer, sin reparos, incluso perdiendo hasta el derecho de auto determinarse y hasta la dignidad, las ordenes que vengan de allá, tal cual como lo hizo Carlos Andrés, por el año de 1989, cuando se doblegó ante el FMI y al BM.
Ahora los tiempos han cambiado, este pueblo ha demostrado con creces, que es capaz de resistir hasta lo indecible, con tal de conservar con dignidad el mejor bien que recibimos de nuestros libertadores: La Independencia Nacional. Es que ya aquel monstruo imperialista, que en otrora nos doblegaba, ahora se está derrumbando inexorablemente, hasta convertirse en un insignificante tigre de papel, que aunque aún conserva sus garras y colmillos, no tardará el día, que ni siquiera les sirvan para seguir amedrentando a los pueblos que decidieran ser libres.
Es bueno que sepan, que el imperialismo y el capital internacional, pretenden, que no nos dejaran en paz, hasta que hayan logrado apoderarse de nuestros recursos y destruir el Estado Nación, tal cual como lo hicieron en el pasado, cuando destruyeron y fragmentaron a la otrora inmensa nación latinoamericana: La Gran Colombia. Creada por el libertador Simón Bolívar. Sin embargo nosotros estamos hechos del temple de los próceres, dispuestos a dar la vida, si fuere necesario, con tal de preservar la libertad y ya los lacayos de ahora no lograrán debilitar nuestro temple.
De tal manera, que aquellos que decidan, cuan lacayos seguir sumisos al imperio Norteamericano, les puede pasar igual que al pintor, que al caerse de la escalera, no se le ocurrió otra cosa, que agarrarse de la brocha.