"En corazones serviles raras veces
cupieron pensamientos reales"
Quevedo
Una amiga, a quien conocí por este medio a través de la lectura, y la solidaridad, que, al germinar en la conciencia de una persona, deja raíces muy profundas, difíciles de borrar por el tiempo, y las grandes tempestades. El día 6 del mes en curso me hizo llegar un correo, lleno de sentimientos de hermandad y preocupación por la situación de Venezuela, y a la vez de lo que está pasando en los Estados Unidos, donde reside hace muchos años, proveniente de Cuba, desde la época de la dictadura de Batista. De su mensaje extraigo lo relacionado con nuestro país, porque me parece muy valiosa su opinión: "Sigo con preocupación los acontecimientos de Apure, en mi opinión quieren dividir el territorio en parcelas, parecen que quieren evocar a Siria en Latinoamérica. Me preocupan también los grupos delincuenciales que es lo que ellos utilizan como guerrilla urbana".
Son tantos los ensayos del imperialismo, utilizando el territorio colombiano, y varios de sus gobiernos para atacar a Venezuela, pero de manera más incisiva los tres últimos presidentes: Juan Manuel Santos, Álvaro Uribe Vélez, e Iván Duque, que, es como decir: Obama, Trump y Biden, sin olvidar los anteriores; llegando al descaro de convertir su obsesivo deseo de acabar con el proceso bolivariano, en un laboratorio ambulante, semejante a los comerciantes, cuando quiebran o a las personas afectadas del estómago, que no consiguen, donde poner el trasero para evacuar; pero son tantas las imprudencias, provocaciones y metidas de pata, que en cada actuación quedan más indicios de la vileza de Duque, y la acción directa del gobierno de los Estados Unidos.
De Iván Duque, no se puede esperar una declaración seria y responsable, antes unos hechos peligrosos, por estar atado de pies y manos, como un perfecto monigote a cuanto gobierno se instale en Washington; y me atrevo a repetir la expresión del fallecido comentarista deportivo Carlitos González, cuando quería asegurar algo, como en este caso ¡sin que me quede nada por dentro!: Colombia es una colonia de los Estados Unidos; 8 bases militares ubicadas en tierra colombiana sin ninguna justificación, no es cualquier cosa; así, se encuentren jugando domino. La producción de cocaína y las masacres diarias, no les importa, porque forman parte de su usurpación a la libertad de un pueblo noble y generoso, pero con unos gobernantes totalmente entregados, a los más oscuros intereses de su país.
De parte del "nuevo" gobierno de los Estados Unidos, prácticamente no se ha escuchado nada; salvo una declaración muy escueta de un alto funcionario, quien parece, que le dijeron ¡Di algo! y salió con una de comiquita, como si el gobierno y el pueblo venezolano no los conociera ¡Seguimos con mucha atención los acontecimientos de Apure! No solamente siguen con atención, sino que los dirigen a través de su mandadero más inmediato y obediente; Iván Duque, a quien los conflictos en su tierra se le están multiplicando, y todavía no hemos visto en ninguna parte del mundo, al imperialismo formando parte de la soluciónes.
Por parte del gobierno venezolano, sabemos la actitud valiente del Comandante en jefe Nicolás Maduro, y el ministro de la defensa Padrino López, en resguardo del territorio nacional, antes la manera tan cobarde de un grupo de bandoleros, quienes se disfrazan para actuar en una frontera totalmente desguarnecida por parte del gobierno colombiano, llegando incluso a la perversa acción de colocar minas antipersonales, como recurso de guerra – prohibido por la ONU–para sacarle provecho a todas las incursiones, desde ese territorio, empezando por el contrabando, y a la vez seguir abriendo caminos para el cultivo y exportación de la droga –marihuana y cocaína– más en estos momentos, cuando en New York, le han dado luz verde, con el argumento de la recreación. A pesar de todas estas acciones, cada momento se levantan voces en defensa de la patria, como lo demuestra la coincidencia de opiniones, entre mi amiga en suelo estadounidense, y el ministro de la defensa, cuando expresan la intención del imperialismo por dividirnos en parcelas y de esta manera crear un conflicto permanente en contra de la paz.
¡LEALES SIEMPRE! ¡TRAIDORES NUNCA!