Más enredados que chiva que para tres, se encuentran los gringos, que han agotado su arsenal de truculencias legales para justificar el robo a los bienes que son propiedad del pueblo venezolano. En artículo anterior, que titulamos "Fin de la Comedia", adelantábamos que la marioneta que habían escogido para tales fines, ya había caducado y que aunque había sido desahuciado por sus propios compinches de ultra derecha en Venezuela, en última instancia, había que esperar la decisión de la Casa Blanca, porque desde allí, es donde pagan la música que bailan los opositores venezolanos.
Y así está sucediendo. El gran problema que tienen los gringos, luego de la desacertada política internacional contra Venezuela, es que deben justificar ante el mundo, porque un país tan poderoso como los son, arremete contra un país débil, le secuestra y roba sus activos, les congela sus cuentas bancarias y da órdenes a su entorno, sobre todo europeos y los serviles de nuestro continente, para que se impida a Venezuela, vender petróleo, negociar con empresas internacionales e incluso, llegar al extremo inhumano, de impedir que durante la pandemia se pudiera traer libremente a Venezuela, vacuna contra esa letal enfermedad.
Allí está el meollo del problema, los gringos buscan desesperadamente la forma, de cómo justificar este atropello que ha puesto por el suelo al Derecho Internacional, pisoteado mil veces por ellos, cuando de defender sus intereses se trata.
En precisamente en esa tónica, que debe interpretarse las recientes declaraciones de Ned Price, vocero del Departamento de Estado, quien en Rueda de Prensa manifestó que "respetaban la decisión de la Asamblea Nacional de 2015, que ha tomado sus decisiones y que nosotros respetamos". Una de las decisiones de esa Asamblea que es ilegítima, fue prorrogar su propio mandato, ya caducado, y desconocer a la marioneta impuesta por la Casa Blanca, Juan Guaido.
En otras palabras, el preservativo usado, Juan Guido, ha sido desconocido por el gobierno de los Estados Unidos. Ya deben estar buscándole una nueva identidad y refugio en alguno de los estados del norte, típico de la conducta judicial de ese país, con los mafiosos y delincuentes que se han prestado al gobierno norteamericano para alguna de sus argucias políticas- legales, y que luego desechan, pero los protegen por los servicios prestados.
Pero ¡Ojo¡ esta nueva estrategia gringa, en el fondo, tiene el mismo propósito, que la designación de Juan Guaido, como presidente interino, desechar el preservativo, pero sustituirlo por otro, la Asamblea ilegítima, para que desde allí se continúe convalidado el robo cometido contra los activos del pueblo venezolano y justificando el sin fin de medidas, sanciones, congelamiento de cuentas, ordenes a otros países, para paralizar a Venezuela y deponer al gobierno legítimo, por uno, que en fin de cuentas, baile al son que le toquen desde la Casa Blanca. Recordar la célebre frase del ex presidente Obama: "A veces torcemos el brazo a otros países para que hagan lo que queremos".
El vocero oficial de la Casa Blanca, explicitó: "Nosotros y otras democracias de la región (léase marionetas), seguiremos apoyando los esfuerzos de la Asamblea Nacional de 2015 (léase ilegitima y caduca) para devolver la democracia a Venezuela (léase un gobierno títere que baile al ritmo de sus intereses"
Se observa en forma diáfana que los Estados Unidos, en el fondo, no han cambiado para nada sus intenciones y propósitos contra Venezuela. Continúan, enredados y tratando de justificar a nivel internacional, su conducta contraria al Derecho Internacional y atropelladora de la Autodeterminación de los Pueblos (Léase, un Derecho Humano, consagrado en la Carta que los contempla). Por eso, lanzan pancadas de ahogados, se aferran ahora a un mamotreto legislativo, cuyos integrantes, muchos de ellos, incluso se mantienen auto exilados, fuera de Venezuela, sin ningún arraigo nacional.
Esta nueva estrategia gringa, pondrá de nuevo de manifiesto, la doble moral de la ultra derecha opositora, venezolana, que probablemente, en esta etapa pre electoral, se vuelva a congraciar con sus amos del norte, para que estos le financien la Campaña Electoral y mantengan esta doble moral que asumen ante el pueblo venezolano: desconocer el gobierno legítimo en nuestro país, anunciar su participación en el próximo proceso electoral, pero, al mismo tiempo, tener un puñal escondido en la espalda, dispuestos a esgrimirlo, en la oportunidad que desde la Casa Blanca le den la orden, con el puño cerrado y el pulgar hacia abajo. ¡El que no los conozca que los compre¡