Durante 25 años me desempeñé como profesor a dedicación exclusiva en la Universidad de Oriente, y tenga ya tres años jubilados sin percibir, hasta hoy dos de enero de 2020, ni un centavo por concepto de prestaciones sociales ni intereses de pasivos laborales; a pesar de tantas quejas expuestas por los canales de aporrea.org sobre esta gran injusticia material y moral, contra un trabajador más, cuyo único pecado ha sido darlo todo por su país, apoyar la revolución bolivariana y rechazar la diáspora para quedarse en Venezuela, mi país tu país, pasando hambre y necesidades, en espera de que se me cancele lo que por derecho me corresponde. Incluso, me he dirigido públicamente al Presidente Maduro, a ver si alguien cercano a él le sopla en los oídos mis demandas, y la de tantos trabajadores universitarios jubilados, y nada!!!
Esta vez debo sumar una palomita más a nuestra tristeza material y económica.
No sabemos si por falta de operatividad del sistema patria.org, o por dilación o distracción, tampoco me ha correspondido el medio Petroaguinaldo. He consultado con otros colegas activos y jubilados, y no han recibido nada!!!
Hablé con unas amigas que trabajan en el ministerio público, y a ellas tampoco le ha caído el medio Petro. Al parecer, no se nos considera "empleados públicos". Entonces, me pregunto, ¿qué carajo somos?
Espero alguna respuesta sensata, camarada Presidente, de usted directamente, como papá del Petro, líder del Petro, promotor del Petro, Presidente Constitucional del Petro y mandamás del Petro.
Al menos aclárenos si nos toca o no ese fulano, para no seguir mirando las nubes como unos bobos.
Por la verdad murió Cristo. Díganos la verdad. Por ello no vamos a vender nuestra dignidad ni nuestra conciencia; tampoco le vamos a echar la burra para el monte, pero ya estamos mayorcitos como para creer cuentos de caminos.
Se lo dice un venezolano de a pie, camarada!!!