A 689 días del inicio de la contingencia en la República Bolivariana de Venezuela producto de la pandemia global de la Covid 19, en el inicio de la semana 99 de esta contingencia, y siendo el miércoles 02 de febrero de 2022, en esta oportunidad quiero formular un conjunto de alertas acerca de algunas declaraciones que pude ver por allí.
Me refiero a declaraciones dadas ayer por las federaciones y sindicatos que conforman la denominada Coalición Sindical Nacional, la cual agrupa a trabajadores del sector público y privado de diversas regiones del país, se pronunciaron en rueda de prensa la mañana de este lunes 31 de enero, para anunciar la ejecución de un plegó de conflicto en toda Venezuela, al mismo tiempo que desarrollaran acciones de calle de los trabajadores y agremiados en respaldo a la propuesta de su diligencia.
Carlos Salazar dirigente de la Coalición Sindical Nacional anunció que luego a las protestas de las organizaciones gremiales han decidido establecer un pliego petitorio nacional de conflictos por la grave problemática que viven los trabajadores venezolanos "Debido a las protesta del 29 de enero, se acordó con el patrón en su despacho, de que las bases del movimiento sindical y gremial venezolano, así como, las asociaciones jubilados vamos a ingresar un petitorio nacional sobre resolución de conflicto, no para que lo engaveten y lo metan por debajo de la mesa, es un petitorio nacional para que solucionen los conflictos laborales, sindicales y gremiales en el país".
Salazar, indico que las pensiones, el salario y la libertad sindical serían los principales puntos de exigencia del pliego petitorio que le realizará la coalición sindical nacional al gobierno del presidente Nicolás Maduro. "La pensión en primer lugar, el salario y por qué desde hace 23 años tanto este gobierno como el anterior no han concertado un salario de acuerdo al artículo 91 de la constitución lo hacen unilateralmente; hoy con la comprensión que quieren hacer el salario queda en 2 bolívares diarios".
Si bien convengo en que hay que restituir el estado de bienestar y la calidad de vida que vivimos durante la gestión de Chávez, y que, en estos momentos de mejorías económicas, y la estabilización del tipo de cambio, no es menos cierto también que los precios de los productos siguen incrementándose a pesar de que se ha desacelerado la inflación y que el dólar no sube tanto como en otros tiempos.
Estoy al lado de los justos reclamos de la clase trabajadora de mi país y de la recuperación y protección del ingreso de nuestras familias. Pero no es menos cierto también que ciertos y determinados actores gremiales y políticos, pretenden "pescar en río revuelto", ante esta situación que sin duda reconozco en el país.
Indudablemente que hay que emplazar al Gobierno de Maduro a realizar mayores esfuerzos por recuperar el nivel de vida y de que los trabajadores y las trabajadoras del país cuenten con un salario acorde que permita cubrir sus necesidades básicas elementales, sobre todo los que laboramos en la Administración Pública. Pero no podemos permitir que los justos reclamos y las justas luchas de la clase trabajadora de mi país sea manipulada políticamente para aviesos intereses de los politiqueros de turno.
Cuidado con los sindicatos que ahora se manejan como ONG y con reedición de movimientos tipo "Solidaridad" como en la Polonia de la década de los 80 del siglo pasado, y que surjan los Lech Walesa por ahí. No podemos obviar que la batalla también es semiótica y que destruir la imagen del Presidente Obrero que ostenta Nicolás Maduro, mostrando que los trabajadores de Venezuela serían los que propiciarían su salida de la Presidencia de la República busca asestar un golpe terrible que contribuya a la desmoralización y desmovilización del chavismo ahora en este tiempo histórico que nos corresponde vivir.
En ese sentido, hay que estar muy atentos y atentas y con los ojos bien abiertos.
¡Bolívar y Chávez Viven! ¡Y sus luchas y la patria que nos legaron siguen!
¡Independencia y Patria Socialista!
¡Viviremos y Venceremos!