Nosotros como país hemos tenido la imagen de dignidad dentro del continente americano, la cual heredamos a punta de sangre derramada por nuestro ejército libertador, dirigido por el ser más universal: Simón Bolívar.
Después de tener unas de las mejores economías, hemos destapado la válvula migratoria, con dimensiones que paso a narrar con dolor e indignación. En un programa deportivo por internet, los animadores peruanos estaban leyendo mensajes de los televidentes. Quienes comentaban sobre el partido de fútbol entre la selección de Venezuela y Perú, el cual se celebra este próximo martes. El mensaje en cuestión fue: Si Venezuela gana, ¿las chamas suben o bajan sus precios? Este comentario, malsano e inmoral fue tomado con humor por parte de los participantes en el programa. Carlos Galván quien narró el mensaje y lo calificó como "pregunta importante" burlándose de esta forma de las mujeres de Venezuela. Posteriormente, y tras escucharlo, el conductor Peter Arévalo y los otros panelistas: Bruno Avassa, Gonzalo Núñez, Marko Ciurlizza y Gustavo Roverano empezaron a reírse y a realizar diversas bromas al respecto durante la transmisión en directo. Llegaron a mencionar que el precio de las venezolanas se había mantenido en 50 soles, desde hace más de tres años. Inclusive que dependiendo de la localidad tenían otros precios. Ese comentario de muy mal gusto no representa la esencia de la mujer venezolana digna, luchadora, cuidadora de sus hijos, guerrilleras, hermosas y sacrificadas en las luchas recientes o en la epopeya libertadora, que le dio patria al Perú y a medio continente. Sin pedir nada a cambio, solo por ideales.
La situación que les narre me produjo la necesidad de indagar, a raíz de ese despreciable y xenofóbico comentario. Mi sorpresa…..le invito a entrar en google y usar la palabra clave venezolanas prostitutas en Perú. La situación es alarmante, vergonzosa como la crisis económica de nuestra población es sometida a esclavas sexuales por mafias involucradas en el comercio sexual. Existen evidencias del rescate de más de quinientas compatriotas sometidas a esa situación.
Urge, que el Estado Venezolano a través de los órganos competentes del Perú, desarrollen un plan de atención, a todos los compatriotas vulnerables. Como país no podemos permitir más degradación humana.
Mientras tantos se decretan navidades felices, con la herida más profunda en la moral de nuestra nación.