La especulación y arbitrariedad patronal de nuevo está matando el
aumento presidencial de sueldos y salarios dado por el presidente
Chávez, de nuevo se ve como el empresario, comerciante, patrono
especulador abusa del consumidor, del empleado y del obrero,
expresiones cómo ésta he escuchado a más de uno: “Allá manda Chávez,
aquí mando yo”, ejemplo; en la carnicería donde compro la carne, el
patrono no les cancela un carajo al empleado explotado, trabajadores y
obreros que labora hasta 12 horas cancelándole una miseria, sin ningún
beneficio laboral, y en la ferretería remarcando precios, allí es
donde yo me pregunto ¿Cuándo será el día en que en cada municipio del
país exista por lo menos una oficina de Indepabis, Ministerio del
Trabajo, Defensoría del Pueblo?
Al tener un Ente y un empleado público eficiente, trabajador, ético de
éstas dependencias del Estado en el municipio el ciudadano común
podría contraatacar a estos delincuentes que abusan y violan los
derechos adquiridos de todos los venezolanos y venezolanas, el
presidente Chávez lo ha dicho más de una vez, “hay que atacar la
especulación”, ha instruido y ordenado a sus ministros y ministras y
al pueblo todo a que lo hagan, pero ¿Cómo lo ataca el pueblo si las
herramientas legales a su alcance no están? Sería mucho más fácil y
eficiente si existiese una oficina y un personal activo y dispuesto a
perseguir y sancionar el delito las 24 horas, un personal que saliese
todos los días, no de vez en cuando, a inspeccionar y supervisar el
comercio, los precios, el pago de empleados y obreros, el pago de las
empresas al Seguro Social, al Seniat, o sea a atacar la especulación,
el acaparamiento, la explotación del empleado y el obrero por el
patrono explotador y el robo a la Nación, que bueno sería tener esa
herramienta en cada municipio, pero no, esa posibilidad en el
municipio Santa Rita del estado Zulia no la tenemos a mano, por lo
tanto esto es “un pueblo sin ley”, el comerciante hace lo que le da la
gana con el consumidor, paga lo que dice el comerciante o no lo
compra, el patrono paga lo que le da la gana al explotado trabajador,
sino te vas a trabajar a otro lado, esa es la realidad en el municipio
Santa Rita lamentablemente.
Ahora ¿Será que el Presidente no ha pensado que es así que se puede
atacar y derrotar la especulación, el acaparamiento y el trato injusto
al obrero? ¿Por qué no se impone de nuevo el PVMP, o sea, el Precio
de Venta Máximo al Público?, esa es otra herramienta legal que el
ciudadano tendría para defender su derecho de no ser especulado, o
mejo dicho, robado, solo basta la voluntad política y ejecutiva para
hacerlo a través de un Decreto Ley Habilitante, esa sería una forma
certera de acabar con la especulación en los productos alimenticios,
higiénicos, medicinales, ferretero, etc. Que chirreen Fedecámara,
Conindustria, la oligarquía y hasta la ¡Iglesia mesma!, eso no
importa, lo que importa es el pueblo, esa excusa de la oferta y la
demanda aquí no camina, de que el precio lo dicta la competencia entre
los fabricantes y distribuidores es falso, en Venezuela la competencia
leal no existe, lo que existe es un monopolio disfrazado con diferente
formas jurídicas seudo legales, ejemplo Empresas Polar que vuelven
“sal y agua” los aumentos presidenciales de sueldos y salarios.
Por eso digo…
¿Cuándo será el día que tengamos…
¡Patria socialista o muerte! ¡Venceremos!
27 de abril de 2011
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