Ciudadanos y ciudadanas participantes en el IV Congreso del PSUV:
Para quienes creemos que el desfalco al patrimonio público realizado entre el 2013 y el 2018 constituye un elemento estructural de la actual situación venezolana, esto es, que Venezuela no se explica si no se incorpora el hecho de que en cinco años, desde el aparato del gobierno bajo la responsabilidad del presidente Nicolás Maduro Moros, desaparecieron recursos en divisas por un monto que siendo todavía objeto de controversia, dada la imposibilidad de acceder a la información oficial, tiene la magnitud como para haber dejado a adecos y copeyanos de la cuarta República reducidos a la condición de niños de pecho, a insignificantes aprendices de los verdaderos grandes ligas de la corrupción que exhibieron sus dotes en el último lustro, dejando al país en el estado de desgracia en el que hoy se encuentra y, lo que es peor, imposibilitando las rutas hacia la recuperación primero moral y después económica de la nación. Este desfalco sin precedentes en la historia republicana fuerza a definiciones obligatorias. ¿Qué posición se asume? ¿Qué actitud se toma?
La disyuntiva que le da título a esta carta abierta no es una tontería. Le queremos decir al IV Congreso del PSUV que estamos en conocimiento de que él, el PSUV, como partido, como dirección política de una organización nacional de millones de militantes, está en conocimiento desde el 14 de febrero de 2013, faltando 19 días para el fallecimiento del Presidente Hugo Chávez Frías, de la piñata de dólares preferenciales que se estaba llevando a cabo en CENCOEX, siguiendo la inercia de la extinta CADIVI. El ponente de esa información, dada a la instancia reconocida como Dirección Nacional del PSUV, fue Jorge Giordani, el superministro de la planificación económica y las finanzas del presidente Hugo Chávez Frías, y para ese histórico momento, fuente oficial, en tanto que ministro esencial de la Economía. Es desde esa fecha que el PSUV no puede alegar ignorancia. Es desde esa fecha que cualquier ciudadano o ciudadana podría acusar a la Dirección Nacional del PSUV de complicidad. El que sabe de un robo y no lo denuncia es cómplice de silencio.
Pocos meses después, Edmée Betancourt, recién nombrada Presidenta del Banco Central de Venezuela por el Presidente Nicolás Maduro, arranca su gestión denunciando la entrega irregular de 22.5000 millones de dólares a empresas de maletín. Edmée Betancurt es públicamente reconvenida en duros términos por el Presidente Maduro y depuesta de su cargo de Presidenta del BCV. Encubiertos los recipiendarios de los 22.500 millones de dólares, a Edmée Betancourt nadie la llamó mentirosa. Nadie dijo que lo que había denunciado era mentira.
Un año después, en junio de 2014, la carta de Jorge Giordani ("Testimonio y responsabilidad ante la historia") estremece a la opinión pública en tanto en cuanto profundiza y confirma lo denunciado un año antes por Edmée Betancourt. Hay una verdadera piñata de millones de dólares en la entrega de divisas preferenciales para importaciones. Las descalificaciones contra Jorge Giordani, uno de los poquísimos a quienes Chávez llamaba "maestro", corrieron a cargo del propio Presidente Maduro, del entonces diputado Presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello y del entonces alcalde del Municipio Libertador, Jorge Rodríguez. Le dijeron de todo menos mentiroso y corrupto.
Después, en el 2015, apareció el llamado bachaqueo, la comercialización masiva de alimentos y productos de primera necesidad, aseo y limpieza, tanto en toneladas de productos mercadeados, como en los centenares de miles de personas, hombres y mujeres, involucradas en esa práctica. Se tiene la convicción de que el bachaqueo manó de la red de Abastos Bicentenario, al punto tal de que el Presidente Maduro, en alocución pública, al desestimar la posibilidad de rehabilitar la red de Abastos inaugurada por el fallecido Presidente Chávez, dijo textualmente que esa red estaba "…podrida, eso está todo podrido…". Eso dejaba demasiadas cosas sin explicar, y nunca se supo si a los pocos que resultaron privados de libertad como responsables del que podríamos llamar "el desfalco alimentario" les incautaron, para el Tesoro Nacional, los capitales mal habidos.
Pero el último espectáculo, el que viene observando el pueblo de Venezuela desde hace más de un año por los medios de comunicación social convencionales, prensa, radio y TV, pero sobre todo por el periodismo digital y las redes sociales, la confrontación entre el Presidente Maduro, intermediado por el Fiscal Dr. Tarek William Saab, y el ex Vicepresidente de la República Bolivariana de Venezuela para el Área Económica (nombrado por el Presidente Nicolás Maduro), ex Presidente de PDVSA, ex Ministro de Energía y Petróleo, ex Embajador de Venezuela ante la ONU y ante su Consejo de Seguridad, Rafael Ramírez; es el que de una manera más contundente coloca en jaque moral a su IV Congreso, en la medida en que lo confronta con la más crítica de las realidades : El Presidente Maduro, a través del Fiscal Dr. Tarek William Saab, le dice a Rafael Ramírez: ladrón, te robaste el petróleo. Y Rafael Ramírez le contesta, directamente a él, al Presidente Maduro: y tú más, ladrón, que te robaste las divisas preferenciales para importaciones. Por favor, que nadie me pregunte si dijeron eso con esas palabras. Dijeron eso del modo como lo dijeron, y lo que nadie puede negar es que lo dijeron. Que eso fue lo que todo el mundo vio, escuchó y entendió. Es más, en uno de los últimos artículos de Rafael Ramírez, en los que muy cuidadosamente va mostrando sus barajas, llegó a precisar la compra fraudulenta de "Ultimas Noticias" a la familia Capriles y "El Universal" a la familia Mata, como algo que ellos, los del Presidente Maduro, saben que él sabe, que tiene pruebas.
Ciudadanas y ciudadanos participantes del IV Congreso del PSUV:
Ustedes podrían, una vez más, hacerse los locos, barrer bajo la alfombra ese dato estruendoso de la realidad, esa "corrupción corporativizada" que denunció Elías Jaua, y salir diciendo, como dice el hoy Vicepresidente para el Área Económica, Tareck El Aissami , que el 20 de agosto, con la incorporación del nuevo cono monetario, se acaban nuestros problemas de hiperinflación, pero lo que no podrán hacer es negar lo que con nuestros ojos hemos visto y con nuestros oídos escuchado.
¿Estamos en el país en el que el pran de las divisas preferenciales le dijo al pran del petróleo que se quedaba con su plaza? ¿Es eso todo?
Ustedes tienen dos alternativas: O nos llaman mentirosos, y nos prueban que no hubo corrupción ni en PDVSA, ni en el otorgamiento de las divisas preferenciales, ni en la importación y distribución de alimentos, ni en la emisión ilegítima de bonos de la deuda pública, ni en los contratos con la empresa ODEBRECHT , o el desfalco, como también lo llama el Fiscal Dr. Tareck William Saab, los convierte en el partido cómplice necesario para el descuartizamiento del legado del Presidente Hugo Chávez Frías.
Ojalá nos respondieran, porque el asunto no es solamente ideológico. El desfalco divide al pueblo venezolano en dos grupos. Los que pensamos que hay que salir a buscar, hasta debajo de las piedras, la fortuna que nos robaron, y de la que depende nuestra subsistencia inmediata, que no haya más discapacitados por daño cerebral a causa de desnutrición, y los que piensan que "por lealtad" eso hay que dejarlo así. ¿En qué grupo se encuentra el IV Congreso del PSUV?
Caracas 27 de julio de 2018