"Terribles fenómenos siguen siendo la burocratización, la ineficiencia y la corrupción que hacen tato daño como un cáncer en un cuerpo humano y que son amenazas verdaderas para nuestro pueblo, para nuestro futuro". Hugo Chávez. (*)
Las revoluciones socialistas siempre se han planteado como objetivos fundamentales la lucha contra el imperialismo, contra la sociedad clasista y sus formas de exclusión, el control social de los medios de producción y la lucha contra la corrupción como una expresión letal de la sociedad capitalista puesto que este fenómeno afecta la vida económica y social, contamina y va contra los valores propugnados por la nueva sociedad de Justicia, Equidad y Solidaridad.
En Venezuela, con Chávez se había avanzado mucho en esta lucha, a pesar de que se habían vivido episodios de corrupción muy grandes y que no se pueden obviar. Pero seguía siendo ejemplo la Revolución Bolivariana, como en otros temas la lucha contra la corrupción y el Comandante era el primero en dar el ejemplo exponiendo aquello de que "La mujer del César no sólo debe ser honesta sino parecerlo."
Con lo que hemos vivenciado en los últimos años (la era-Maduro) se constata un enorme retroceso respecto a los avances logrados en la era-Chávez. Y no sólo es la corrupción desatada en casi todas las esferas de la vida pública y privada de la dirigencia nuestra, sino el derroche, el desparpajo, la soberbia y hasta el desprecio hacia el qué dirán. No, no importa nada. Lo que importa es el Tener sobre el Ser. Mostrar el lujo, el ornato, el lucro sin importar de donde proviene.
Es inconcebible que en un proceso revolucionario como el nuestro se hayan repetido y magnificado (incluso hasta con mayor gravedad) los hechos que ahora presenciamos impávidos. Bolívar y Chávez deben estar revolcándose en su tumba al observar este presente ófrico.
Como dice Chávez: La corrupción es un cáncer que ha hecho metástasis en la sociedad casi toda. Los hechos demuestran que el comportamiento de la corrupción es semejante al del cáncer. Por contagio o metástasis se multiplican las células cancerígenas. Igualmente los hechos demuestran que este cáncer de la corrupción está instalado en nuestra sociedad y va contaminando imparablemente a más y más células, tejidos y órganos de nuestra sociedad. Casi todos los órganos del Estado, pero también del sector empresarial y de eso que llaman la "sociedad civil" donde pululan las ONGs están invadidos del carcinoma. Los tumores no dejaron de producir daños, sino que se diseminaron y la descomposición se aprecia hoy en distintas partes. Hay una suerte de tecnificación de la criminalidad, puesto que quienes la practican son personas muy inteligentes, pero inescrupulosas. Como decía el Padre Bolívar. "El talento sin probidad es un azote".
Entre tantas imágenes y videos que han proliferado podemos citar el de la señora Johana Torres un apartamento ultra lujoso mostrando una maleta llena de lingotes de oro en la emblemática ciudad de Dubai. https://aguacatetv.com/2023/03/29/video-en-dubai-que-incluye-maletin-con-lingotes-de-oro-lujos-de-johana-torres-imputada-por-trama-pdvsa-cripto/.
Eso es lo que le da más arrechera al pueblo venezolano todo. A eso que llama Enrique Dussel "el pueblo oprimido.
Ya antes lo habíamos expresado así: "Avionetas, helicópteros, centenas de máquinas de minar criptomonedas traídas de China cuando Hugbel Roa era ministro en un enorme galpón, https://twitter.com/i/status/1639671843907878916., cientos de camionetotas y vehículos "de alta gama" en varios galpones, pacas de billetes de dólares en una caja fuerte, 3 mil millones de dólares desaparecidos. Mansiones al estilo saudita, yates, vidas de lujos y viajes por todo el mundo. Es demasiado abrumador. Gerentes y presidentes de empresas públicas, un exministro de Educación Universitaria y varias veces diputado, un ex vicepresidente de la República, varias veces ministro y gobernador de estado, ahora convertido en vulgar delator ("soplón" en lenguaje carcelario, "bruja", también en el mismo lenguaje). A Hemann Escarrá supuestamente se le fue un lapsus mental y dijo que la cosa no eran "sólo" 3 mil millones. Ya la vaina va por los 23 mil millones de dólares".
TENEMOS UN GOBIERNO REACCIONARIO, en el sentido que reacciona mucho tiempo después de ocurridos los hechos. Cuando los daños son prácticamente irreversibles en el tejido social venezolano. Ahora salen con una nueva ley hecha a toda carrera en la Asamblea Nacional para que veamos que sí están actuando contra la corrupción y todos sus derivados. (Se trata de la Ley Orgánica de Extinción de Dominio) Pero sabemos que, en el fondo, no es problema de leyes. No es por falta de leyes que en Venezuela hay para tirar para el techo, como se dice coloquialmente. En el artículo 50 de la Ley contra la corrupción aprobada en el año 2014, http://www.venceremos.com.ve/sites/default/files/LeyContraCorrupcion.pdf. se establece que "Los bienes que constituyen el enriquecimiento ilícito...pasarán a ser propiedad de la entidad afectada cuando se le produjere un perjuicio económico e ingresarán a la Hacienda Nacional". En el artículo 98 de la citada Ley se establece también que el juez en la sentencia definitiva puede ordenar la confiscación de los bienes de quienes hayan incurrido en los delitos tipificados en la Leu o que hayan incurrido en enriquecimiento ilícito. Adicionalmente, en la disposición transitoria segunda se pauta que "El Estado creará un cuerpo nacional de prevención, análisis e investigación contra la corrupción dependiente jerárquicamente de la presidencia de le República para prevenir, precisar, combatir y neutralizar los delitos derivados y conexos al fenómeno de la corrupción y otros en detrimento del tesoro nacional". Ese cuerpo se creó y se le denominó PNCC (Policía nacional Contra la Corrupción creada el 25 de noviembre de 2014). No hizo nada durante 8 años y de repente, los hechos tan escabrosos y escandalosos la hicieron despertar de un sueño letárgico.
Adicionalmente en la Ley se establece en su disposición final segunda que "La comisión de los delitos contemplados en esta Ley se tendrán como de lesa patria"Mas draconiana imposible. Sin embargo, durante 8 años se quedó en el papel y epilépticamente despertaba por poco tiempo y a seguir durmiendo "el sueño de los injustos".
Adicionalmente, el Estado cuenta con órganos de seguridad, investigación e inteligencia como el CICPC, el SEBIN, la DIGCIM, la propia Fiscalía del Ministerio Público, la Contraloría General de la Nación (esta sí que es otra entelequia, absolutamente fútil). También la Presidencia cuenta con un cuerpo de inspectores de la nación, muy eficientes en un tiempo, pero imaginamos que cuando tropezaban con las grandes cabezas, se volvió ineficiente. En fin, hay todo un cuerpo de leyes y de órganos públicos que deben investigar y sancionar los hechos de corrupción. Sobre todo, porque eran "vox populi" que estaban ocurriendo, es decir, a la vista de todos y todas y con sobradas denuncias ante las diferentes instancias realizadas por la Contraloría Social Ciudadana.
No es con gritos destemplados, con posiciones de "mano de hierro", de seres humanos con súper poderes convertidos en muñequitos al más puro estilo del peor cine gringo, o con escatologías al estilo de: "yo estoy arrecho" y/o "cuidado con una vaina".
Con eso no se ha logrado nada.
¿QUÉ HACER? Como decía Lenin:
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Hace falta una política pública integral de combate a la corrupción y a todas sus secuelas.
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Generar conciencia en el cuerpo social venezolano acerca de los valores socialistas de verdad-verdad.
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Aplicar la ley sin contemplaciones para no generar impunidad.
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Una decidida acción colectiva, una toma de conciencia y de un rearme ético-moral que permita volver a pensar en lo "malo" que es aprovecharse privadamente de lo que es público o de la sociedad toda.
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En lo particular detener y enjuiciar a Guaidó y a su séquito de seguidores corruptos también. Basta de amenazas genéricas.
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Hacen falta acciones concretas en este sentido.
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Generar las formas de comportamiento donde se practique con el ejemplo, axiológicamente, con ética, con mística en el servicio público.
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¿Es una utopía? Bueno, Galeano decía que las utopías sirven para avanzar.
(*) Hugo Chávez. Discurso de presentación del mensaje anual ante la Asamblea Nacional. 11 de enero de 2008