7 de enero de 2017.- En un recorrido, realizado en esta primera semana de Enero 2017, en la populosa Parroquia Caricuao y que incluyó mercados populares y supermercados, se pudo constatar que el desabastecimiento, persistente con el que llegamos a finales del año pasado, se mantiene. Pero por otra parte, el aumento casi diario de los bienes de primera necesidad también persiste.
La queja y el descontento marcan la tónica de las conversaciones, donde resaltan expresiones como:
"Estamos ante precios disparados, desabastecimiento... y no hay gobierno que lo detenga"
"No hay ninguna autoridad que ponga límite a esta escalada de los precios"
"¿Hasta cuándo esta situación? ¿Es que no vamos a lograr hacer mercado como siempre se hacía sin pasar por este infierno?"
Pero también surgen reclamos más profundos y que son un llamado al gobierno:
"Este es un problema para no mirarlo de lado o solo dedicarse a su contemplación; requiere de una disposición y voluntad de resolverlo de manera urgente. Más allá de la simple retórica y buenas intenciones, el gobierno es quien posee las instituciones y los mecanismos para detener esta anarquía en los precios y el desabastecimiento ya insostenible"
Se pudo verificar que en los supermercados Unicasa y Supremo de la Parroquia Caricuao no hay alimentos de la cesta básica y los productos disponibles tienen precios exorbitantes. Diariamente suben los precios y la venta de productos regulados es ocasional e insuficiente. Para la compra de dichos productos regulados se realizan largas colas o filas de personas en espera de su turno (para el día 5 de enero, el único producto regulado vendido era el papel sanitario expedido a razón de tres (3) paquetes de cuatro rollos por persona, vendido por el número terminal de la cédula).
En cuanto al desabastecimiento que se nota no solo los supermercados mencionados, pero tambien en los mercados populares que rodean la parroquia tanto en la UD3, como en Ruíz Pineda, brillan por su ausencia los siguientes productos de la canasta alimentaria:
El aceite vegetal, el azúcar, la harina de maíz precocida, la leche en polvo, arroz, salsa mayonesa, margarina, harina de trigo, pasta espagueti, café y los siguientes útiles de aseo personal: papel sanitario, pasta de diente, jabón de baño, champú, desodorante, productos de limpieza, en especial, el detergente liquido o en polvo para lavar la ropa, y una larga lista adicional de productos de primera necesidad.
Resalta que los productos presentados en los estantes de los supermercados a precios no regulados son importados, con precios exorbitantes. Debido a lo anterior no se ve mucha afluencia de gente buscando en las estanterías, como normalmente sucede en un supermercado. La única cola que se ve, es aquella para comprar el único producto regulado ofrecido por el supermercado este día 5 de enero: el papel sanitario.
También brillan por su ausencia, en ambos supermercados, el pollo y la carne.
Entre los productos que se pueden comprar en los supermercados se encuentran: leche descremada de larga duración de 1 litro a Bs. 1.500 y mostrando baja existencia los granos, la presentación de 500 grs. de caraota en 3.250, las rojas en 2.230, las blancas en 2.330, los garbanzos en 3.750, los frijoles bayos en 2.738, frijoles pico negro 2.544 y arvejas en 2.114 todo ello expresado en bolívares. Atún en lata pequeña marca Atún Mar Bs. 1833,87, igual presentación lata pequeña marca Margarita Bs.1.160, Vinagre Bs. 880 un litro. Pasta de Tomate marca Heinz de 490 grs Bs. 1413,44, Huevos medio cartón 2.700, Jamón de Pierna Bs.10.700 el kilo, Queso blanco duro Bs. 11.200 el kilo, Mortadela 6.720 el kilo. También con precios no regulados se podían encontrar algunos escasos productos de limpieza, servilletas, toallines, entre otras menudencias, pero nada de alimentos.
En los estantes de los supermercados se presentan las legumbres, vegetales y verduras, aunque no son visitados por los clientes del establecimiento de manera asidua, ya que estos prefieren buscar precios más bajos en los mercados populares adyacentes del sector UD3 de Caricuao o en Ruíz Pineda. Se pudo constatar que en los mercados populares también persiste la insuficiencia de productos y entre los existentes los precios siguen causando estragos, hasta tal punto, que la defensa de un vendedor ante los reclamos fue lapidaria:
"Estos precios varían en aumento todos los días"
A continuación pasamos a resumir los precios encontrados en los mercados "populares":
Precios de verduras, hortalizas y legumbres (expresados los montos en bolívares por cada kilo):
Ají dulce 2.000 Ajo 6.000
Aliños aproximadamente a un promedio de 4.000 (celerí, cilantro, cebollín, ajo porro, perejil, etc.), varían un poco de uno a otro
Auyama 500 Berenjena 1.000 Calabacín 1.000
Café 1/4 kilo 3.500
Cebolla 3.000 Chayota 500 Lechoza 590
Lechuga 2.500 Ocumo 1.500 Papa 1.500
Pepino 800 Pimentón 4.000 Plátano 3 por 1.000
Remolacha 1.000 Repollo 800 Tomate 3.000
Ñame 1.500 Yuca 700 a 1000 Zanahoria 1.800
Los precios de las legumbres, hortalizas y vegetales fluctúan de un lugar a otro con variaciones de 200 o 300 aproximadamente, por encima o por debajo.
En cuanto la proteína animal, encontramos en los mercados "populares" de Caricuao los siguientes precios (expresados los montos en bolívares por cada kilo):
Carne lomito 7.890 Ganso o pulpa negra 6.490
Muchacho redondo 6.890, para guisar o desmechar 5.990
Lagarto con hueso 4.499 Chuleta de cochino 6.990
Pollo entro 4.900, muslos 5.590, pechuga 5.290, alas 4.690
Huevos medio cartón 2.950 a 3.000
Queso duro, Palmito, Cuajada 5.500 a 6.000, Guayanés 5.000, Amarillo 11.000, Requesón 4.800, Paisa 8.400, Mozarela 8.000.
Salchicha 7.000 Chorizo 3.500
Jamón de pierna 8.900 Jamón de espalda 6.300
Atún 7.500 Sardina 1.200
Curvina 8.000 Cazón 4.300
Y los enlatados que solo se conseguían en su presentación más pequeña, tanto en los supermercados como en los mercados "populares".
Atún de lata 170 gr Bs. 1.520 (no hay más grande)
Sardina en lata 170 gr Bs. 1.000
También se ubicaron los precios de los siguientes productos en los mercados "populares" de Caricuao:
Pasta 1/2 kilo Bs. 3.000 (en poca cantidad)
Salsa de tomate kétchup presentación pequeña Bs. 1.550
Sal 300 gr Bs. 1.000 (también se consiguió en el supermercado)
Vinagre Bs. 950 un litro
Mayonesa de soya 300 gr Bs.5.500
Mantequilla de soya 250 gr Bs. 2.500
1 litro de Cloro Bs. 950
Con esta muestra del nivel de precios de algunos productos de la canasta alimentaria del venezolano, se puede apreciar lo difícil que es para una familia promedio de cinco miembros, lograr la normalización de su vida cotidiana.
De esta realidad, que requiere sincerarse de manera cruda, surgen también preguntas que fueron recogidas en este recorrido y que son una foto de la rutina diaria con la que todos en el país se topan y, que por supuesto, se nos hace imposible conformarnos:
¿Cómo hace una familia con uno o dos ingresos mínimos para sobrevivir?
¿Hasta dónde pueden llegar los límites de deterioro y retroceso en la calidad de vida?
¿Cuál es el ingreso o poder adquisitivo que se requiere para poder soportar estos precios tan exorbitantes?
O expresiones como estas:
"Es terrible la incertidumbre que viven los venezolanos ante la posibilidad de no encontrar más un producto, de no tener con qué sustituirlo, no poder comprarlo o conseguir un sustituto más económico"
"Es ya la depresión crónica que sufre la familia trabajadora al no poder subsanar las necesidades básicas de alimentación de su familia, y no tener ninguna opción de obtener ingresos adicionales para poder subsistir. Sobre todo si se trata de un trabajador, cuyo salario se aleja cada vez más de unos precios que se hacen inalcanzables".
"Mija y solo estamos hablando de comida y productos de aseo, pero... ¿y las otras necesidades básicas como transporte, vestido, calzado, tarifas de luz, agua, teléfono y gas, útiles escolares, y el largo etcétera de gastos para mantener una familia? Dime: ¿Quién aguanta esta locura?"