Miércoles, 03 de junio de 2020.- De diversas fuentes nos ha llegado información que en Acumuladores Duncan, que fabrica y vende baterías y que tiene una tradición de buenos productos y excelente atención al público, ha ido desmejorando y no está haciendo honor a la garantía que emite al vender sus productos.
Nos llaman, nos mandan mails y notas y siguen las denuncias y quejas.
A está redacción llegó la siguiente denuncia:
Recientemente adquirí en Acumuladores Duncan una batería nueva para mi automóvil, batería que ha presentado fallas ya que pierde constantemente la carga.
El lunes primero de junio, en horas de la mañana fui a la sede principal de Acumuladores Duncan ubicada en Los Ruices, Caracas.
Llevé la batería que tiene menos de un mes de adquirida, que está bajo la garantía que ofrece la compañía y a un dependiente que me atendió amablemente, le expliqué que la batería estaba mala, que se descargaba y que por favor la revisasen.
Así lo hizo y me explicó que de a cuerdo a su análisis la batería estaba buena y que mi automóvil era el que presentaba fallas, que lo llevará a un electroauto, para que lo revisaran.
Hasta ese momento todo el procedimiento fluyó sin contratiempos, incluso me ofreció sacarle una fotografía al resultado del tester, lo cual hicimos.
Pero llamó mi atención, que la situación se repetía, cuatro clientes mas que se encontraban allí en ese momento, en las mismas circunstancias y con automóviles en buen estado, se veían casi nuevos y que reportaron las mismas fallas en sus baterías recién adquiridas, la misma falla que tenía mi carro, las baterías se descargaban, el resultado, de acuerdo a lo que comentaron también fue el mismo, sus baterías estaban buenas, según la compañía Acumuladores Duncan, todos los carros tenían fallas eléctricas y tenían que ir a un electroauto.
Ante lo irregular de esta situación pedí hablar con el gerente o el supervisor para explicarle la situación y me solucionaran el problema, me informaron que debía ir a su oficina, lo cual hice.
Luego de una larga espera, mas de dos horas, finalmente me atendió y para mi sorpresa adoptó una actitud grosera, violenta y agresiva conmigo, se me aproximó, sin mantener la distancia social mínima y dijo textualmente que él no comía con canas, soy una persona de la tercera edad, y que ya me habían explicado la situación, que le desocupara la oficina, que me arrancara o que me iba a caer a coñazos, esas fueron sus palabras, delante de algunos clientes que se encontraban alrededor.
Yo le respondí, por supuesto, muy molesto y lo invité a que me tocara, lo cual no hizo y le dije a los clientes que allí se encontraban que comprasen las baterías que necesitaban pero que en el caso que les salieran malas, no esperaran soluciones, no hay reposición, que vieran lo que me estaba pasando.
La compañía Acumuladores Duncan está en el deber de revisar su política de atención al cliente y darle un entrenamiento mínimo a su personal para actuar con cortesía y además solucionarle los problemas a sus clientes y el gobierno nacional debe supervisar que se cumplan las garantías emitidas por los comercios.