Imagino que la mayoría se conoce el cuento: Le preguntaron a una persona ¿cuál es la capital de Francia? Y la persona contestó: “Ni sé, ni me interesa”. Es decir, entre la ignorancia y la indiferencia.
Así pasa en algunos medios de Venezuela ante temas que no por no ser visibilizados dejan de ser de alta sensibilidad. Hace apenas cuatro días, (el jueves, a las 11:20 am para ser exacta) por obra y gracia del Espíritu Santo el diario El Universal publicó en su web: El carnaval de El Callao NO será Patrimonio de la Unesco este año”. http://www.eluniversal.com/noticias/cultura/carnaval-callao-sera-patrimonio-unesco-este-ano_627545. Un mal 'profeta' se metió a periodista, parece.
Lo de la ignorancia y la indiferencia viene a cuento porque se estaba en presencia de una nota escrita desde la agencia de noticias EFE, que no hablaba de Venezuela. Es decir, se cortó, se pegó… y se tituló. Proyección del odio, le llaman.
Más allá de la indiferencia está la mala intención, la líbido en baja y, claro, el resentimiento en alta. En verdad que recomendamos la lectura del libro “Los cuatro Gigantes del alma” de Emilio Mira y López, (miedo, ira, amor y deber).
“Profetizar” que El Carnaval de El Callao no será patrimonio de la humanidad este 2016 es como (en este caso) proferir un mal mantra. Malazo.
Las Madamas callaoenses, los relatores, y los defensores que irán a ratificar lo patrimonial que es en Venezuela el Carnaval de El Callao ya están listos para viajar, gracias, justo es decirlo, a PDVSA.
Venezuela va a la Madre África (a Etiopía) a ratificarlo, pues la Unesco ya tiene dos años con el expediente enviado por el Centro de la Diversidad Cultural.
Desde el 28 de noviembre comenzaremos a pujar.
Tal vez en los medios que viven entre la ignorancia y la indiferencia no sepan que el pueblo venezolano tiene un mantra más poderoso, mucho más poderoso que el odio.
Ya saben...¡pujemos, pues!