Camarada ministro: desde que culminó la fiesta culinaria que montaron los glotones e emperifollados niñitos manos blancas, estaba por dirigirme a usted. Lo hago dos semanas después del fin de dicha huelga, cargado de una tristeza que aún no se me quita, tan solo por la actitud dócil, complaciente y hasta peligrosa que usted tuvo con esos teatreros sin oficio, enemigos tanto de usted, como mios, como de la patria.

Ministro, yo no creo que usted sea tan inocente como para pensar que esos muchachos estaban de verdad en huelga de hambre. Estoy seguro que usted conoce que si una persona se mantiene veintitres días sin ingerir alimentos, ella pierde apróximadamente las tres cuartas partes de su peso y que ésta puede sufrir graves enfermedades que la pueden conducir a la muerte. Entonces señor ministro: ¿Por que usted se dejó engañar y cedió ante los pedidos inconstitucionales de estos sinverguenzas? ¿No les vio usted sus rostros rebosantes de salud? ¿No vió usted la felicidad que tenía para las cámaras de televisión ante su claudicación? ¿Notó usted, que algunos de ellos hayan perdido aunque sea cien gramos de peso? ¿Por que no llevó usted un medico para constatar el estado de salud de esa gente? No señor ministro. usted no hizo nada de eso, usted solamente vió el rostro de la OEA y su comisión de derechos humanos revoloteándole a su alrededor, y por lo tanto al gobierno y san se acabó, pá fuera Pillieri y compañía.

Usted y el gobierno no quieren problemas con con esos organismos imperiales, tienen miedo de que les vayan a aplicar alguna sanción por causa de estos muchachitos. Usted dirá que aunque falten dos años apara las elecciones quieren llegar en paz a ellas. Usted con su actitud, prácticamente reconoció que hay presos políticos. Tambien reconoció que el gobierno si tiene influencia en el sistema judicial ya que la pronta libertad de Piliere y cia, así lo demuestra. Usted señor ministro simplemente le abrió un poco más las puertas a la conspiración.

Claudicaciones como éstas, demuestran que el gobierno a veces le teme a la confrontación y que muchas veces se muestra débil ante una oposición que jamás nos dará tregua ya que su único fin es llegar al poder por cualquier vía menos por la electoral, aunque el gobierno no lo quiera ver así.

¿Habló usted y el Psuv con sus bases sobre esa decisión? ¿La ha conversado con sus aliados? Pienso que no, ya que aunque suene duro, pero es la realidad: el gobierno cuando va a tomar alguna decisión, no consulta ni a sus bases ni a sus aliados para nada.

Ministro, después de ese vergonzoso recule, muchos nos preguntamos: ¿será que los presos de la oposición (sea cual fuere su causa) tienen más derechos que los presos del resto de la sociedad? ¿Somos todos iguales ante la justicia? Si su repuesta es afirmativa, entonces usted también debiera estudiar caso por caso de miles de presos (detenidos por robarse un mango) para concederle su libertad o beneficios procesales.

Cosas veredes Sancho: las gallinas están asustando a los gallos. Señor ministro, si usted y el alto gobierno no tienen alguna duda de que ganaremos las próximas elecciones ¿entonces a que viene tanta concesión para el enemigo?. ¿A que se debe tanto llamado a diálogo con una gente que aunque ponga la torta en la AN detrás del telón están fraguando el zarpazo final que lo sacará a usted y a Chávez del gobierno? Porque si seguimos cediendo terreno conquistado, si seguimos complaciendo peticiones inconstitucionales de la canalla, si seguimos secándonos las lágrimas antes de que venga el dolor, no llegaremos al 2012 por culpa de actitudes como la suya y del alto gobierno.

Las próximas elecciones son muy importantes para nosotros (yo, si estoy seguro que las ganaremos) pero más importante es impedir que nuestros enemigos se salgan con la suya y no nos permitan llegar a ellas en sana paz. Y la paz solo se logra con firmeza revolucionaria, poniendo en alerta constante a todos los organismo de inteligencia del Estado, vigilando nuestras fronteras, chequeando constantemente el flujo de dólares que entren o salgan de nuestro territorio, vigilando cada paso que da un contra revolucionario así éste se arreche y tomando decisiones que complazcan al pueblo, no a los burgueses.

Recuerde ministro: Vacilar es perder. Saludos.

aponwuao@hotmail.com