Como por azar en medio del desconcierto no solo por la muerte de la bella actriz y compatriota Mónica Spear, sino también por las diferentes interpretaciones oídas de los voceros de la fatalidad y la reacción, como el de la activista y militante de la rancia derecha, que creo se llama Amanda Gutiérrez quien dirigió el discurso en las exequias de la infortunada joven, recordé el contenido de 2 películas Norteamericanas:
El Gringo(protagonizada por Mel Gibbson) y la Cortina de Humo(Robert de Niro y Dustyn Hoffman) y de algunos seriados Colombianos, brasileros, mexicanos y “Criollos”, presentados en la pantalla chica Venezolana, la primera de las películas presenta a un delincuente que tras un robo a otros mafiosos cae en una prisión Mexicana denominada el Pueblito donde ¡¡¡oh, coincidencia!!! se presentan situaciones en extremo parecidas a las observadas en las cárceles Venezolanas, en la segunda película La Cortina de Humo, se plantea una situación creada por un artífice de la Guerra quien manejando el poder de los medios y de la Industria Cinematográfica Gringa monta una guerra inexistente para catapultar a un candidato a la Presidencia caído en desgracia, obteniendo un rotundo éxito, otra coincidencia con la imagen que vende tanto la oposición apátrida como los enemigos del proceso revolucionario extra-fronteras. Refiriéndome a la producción Apologética de la violencia en nuestro país(culto a la violencia de los medios Nacionales), no casualmente durante estos últimos años se han proyectado seriados extranjeros y Nacionales como: El Capo, El Don, Sin tetas no hay paraíso, e incluso telenovelas cargadas de violencia y exageración de situaciones cotidianas, incluso una protagonizada por la Compatriota fallecida y por El Compatriota Sosa, tanto las novelas Nacionales, como las extranjeras, programas infantiles noticieros, discursos políticos, programas de opinión, etc., casi todo lo que se proyecta en nuestras pantallas(Tv Nacional y cableras) pese a las regulaciones en esta materia presentan una dosis altísima de violencia, agresión, sexo, pérdida de valores, deformación del lenguaje, malandreo, explotación, etc. Las televisoras y similares se remiten a cumplir con el preámbulo a la programación en cuanto al contenido y a la responsabilidad de los padres y se pasan por...el #*¿?!... la verdadera responsabilidad social de los medios de comunicación. Ahora viene la pregunta de rigor:
¿Entonces de donde carajo se alimenta la delincuencia y los códigos y prácticas delincuenciales que se han proyectado desde EEUU, México, Colombia y Brasil en nuestro país?
Prácticas como esa de desmembrar a otro ser humano, el pranato, el secuestro, el narcotráfico, la prostitución y hasta la supuestamente ingenua modalidad en nuestras féminas de alimentar la factura del macho haciéndose tetas y culos de silicón , no son originarias, vienen de afuera.
Otra pregunta de rigor: ¿tienen o no tienen los histriones de la TV Venezolana responsabilidad en la apología del delito?. Yo voy a esperar sentado que los diferentes personeros de la fatalidad que utilizaron el infortunado caso de la Compatriota Mónica reconozcan públicamente su responsabilidad y coparticipación en la apología del delito, o que sencillamente publiquen un comunicado con el que yo aclare mi quizás confundida percepción, evidentemente reitero como lo he dicho en otras oportunidades, la responsabilidad del auge de la delincuencia, de la violencia, del latrocinio y la corrupción la tenemos todos, la familia, la paternidad irresponsable, el Estado inerte, los funcionarios corruptos, el adequismo como modo de vida(cultura vigente e imperante en Venezuela desde el pacto de punto fijo), la distribución desigual y poco equitativa de la riqueza, pero, hay un poder omnímodo, omnisciente y omnipresente, que capitaliza todos estos meta mensajes y anti-valores para fortalecerse:
"EL MONSTRUO DE LOS MEDIOS DE DIFUSIÓN Y COMUNICACIÓN"
Un pueblo ignorante es instrumento ciego de su destrucción
Simón Bolívar
¡¡¡Hasta la victoria siempre!!!
