Si eso se hubiera materializado, se habría cometido un Magnicidio, que significa ¨muerte de una persona que ocupa el poder¨, y en Venezuela, el poder máximo lo ocupa el presidente Nicolás Maduro, electo democráticamente por el pueblo venezolano.
Muchas denuncias se han hecho al respecto.
Esto no es nada nuevo en Venezuela , pues esa posibilidad quedó abierta desde que Chávez era candidato presidencial, y posteriormente se ha ido incrementando cada vez más con el correr del tiempo.
La derecha fascista venezolana, combinada con grupos terroristas nacionales e internacionales, dirigidos desde Washington, ligados estrechamente con la oligarquía colombiana ( en este caso con Juan Manuel Santos ) y los cubanos llamados ¨gusanos¨ Maimeros. Se les atribuye tal atentado.
En Latinoamérica recordaremos las diferentes intervenciones norteamericanas para derrocar y asesinar a sus dirigentes populares. Así tenemos la invasión norteamericana en Guatemala, para derrocar y asesinar su presidente (Jacobo Arbens); la invasión de Nicaragua para asesinar a César Augusto Sandino; la invasión a Santo Domingo para asesinar al coronel Francisco Camaño; el derrocamiento y asesinato de Allende en Chile; el asesinato de Torrijo en Panamá; el asesinato de ese gran líder revolucionario colombiano, que tenía grandes posibilidades de llegar a la Presidencia de la República, Eleazar Gaitán. Su muerte provocó una insurrección popular. El pueblo se echó a las calles e incendió a Bogotá (el Bogotazo) y se produjo una guerra civil; lo que querian ellos, pero el plan les falló por ahora. En la hermana república de Cuba, Fidel sufrió más mil atentados, durante su permanencia en el poder y todos dirigidos y financiados por EEUU.
El pueblo venezolano, ha tomado conciencia y sabe identificar su enemigo y a quien dirigirse en un momento determinado. PUEBLO Y EJERCITO BOLIVARIANO UNIDOS JAMAS SERAN VENCIDOS.