La organización AIPO se solidariza y comparte la lucha que están llevando los trabajadores en Venezuela. Nos adherimos a las peticiones hechas por los trabajadores de la planta transnacional Mitsubishi en el estado Anzoátegui, los trabajadores de Fundimeca en Valencia, los de Alpina en Villa de Cura, los empleados de la Asamblea Nacional en Caracas, los obreros de Sidor en Puerto Ordaz, los petroleros al frente de las oficinas de la Corporación Venezolana de Petróleos en Lecherías (Anzoátegui), trabajadores de SIDOR, y a todo trabajador que lucha por conquistar lo que les pertenece simplemente por estar y existir.

No es posible hablar con ecuanimidad y sindéresis, cuando vemos con estupor a trabajadores, campesinos, indígenas, asesinados bajo una presunta construcción al socialismo y lo más grave que la IMPUNIDAD REINE, estamos llegando a los limites de la desesperación, nos están llevando a una crisis profunda, donde sí hay que hablar de culpables y responsables, todos sabemos que son los que están contra este proceso, los FALSOS REVOLUCIONARIOS y sus aliados CHACALES OPOSITORES.

Es hora de que el presidente de la República demarque públicamente el territorio de la falsa moral de sus presuntos aliados, porque la gente va votar por el "si", pero para que usted defina ¿cuál es el verdadero rumbo que va a tomar este proceso?

Presidente usted no necesita pruebas, ni nosotros tampoco, veamos todos el video que se publicó hoy en aporrea.org es elocuente y demoledor, así como PEDIMOS QUE APAREZCA EL VERDADERO VIDEO DEL CASO DE MARACAY DONDE esta el verdadero sicario que asesinó a Richard Gallardo, Carlos Requena y Luís Hernández. Están acusando a un tercero que NO FUE EL EJECUTOR.
Estamos cansados de seguir agendas, y más agendas que no son las del pueblo, los movimientos, los trabajadores, los luchadores.

El Gobernador de Anzoátegui debe renunciar al cargo y sus despóticos e ineptos funcionarios de gobierno también, lo increíble es que este "gobernador" bufonea cuando dice ser poeta (y participa en eventos internacionales de poesía), que descarado, lo inaudito es cuándo se auto- proclama como defensor de derechos humanos" es vergonzoso como se burlan de la gente.
La DEM debe destituir de inmediato las juezas Diana Vásquez y Lourdes Villarroel, presuntas responsables intelectuales de los hechos, y abrírseles el procedimiento correspondiente para establecer responsabilidades.

Repudiamos todo acto de abuso de poder e intimidante que ejecuten los "poderosos" y sobre todo que se ajusticie con la pena de muerte, contra los que luchamos, protestamos, construimos, soñamos en nombre de la revolución y la verdad. Por lo que elevamos nuestra protesta contra los que manejan las instituciones como feudos e intereses oscuros. Venezuela es otra.

AIPO como organización que trabajamos en Venezuela, Bolivia, Argentina, República de Chad, Camerún, Burkina Faso, Ruanda, Alemania y Francia, solicitamos que las denuncias de los trabajadores no sean sumergidas en fango, para ocultar los asesinatos de los trabajadores, campesinos, indígenas; les acompañaremos a las instancias internacionales pertinentes de no encontrar justicia en Venezuela.

Para terminar, les enviamos sentido pésame a los familiares y amigo de los trabajadores asesinados, les acompañaremos en lo que sea necesario para que se haga justicia en este país, y obliguemos a las instituciones a que asuman sus responsabilidades pertinentes y dejen la complicidad y la omisión para defender a los que aman el poder para oprimir y acallar.

¡ Ave, salve la unidad veloz de los que luchan por construir patria!
¡ Ave, salve por los que creen en las ideas revolucionarias sin subordinaciones atávicas e implícitas de los burgueses!
¡ Ave, salve por los que se levantan temprano para construir patria y cultivan hormigueros de conciencia certera!
¡ Ave, salve por aquellos que todos los días van por el mismo camino a las fabricas y no se arrodillan ante las maquinas, ni patronos.
¡ Ave, salve Dios a los que masacran con balas a las puertas de sus trabajos por tener propósitos disconformes, dejándonos huecas saciedad de las tragedias de sangre!