Pasar de una cultura política del tutelaje y la representación, a una de participación protagónica, amerita asumir que hay que cambiar los patrones, normas y códigos que rigieron el desarrollo de la sociedad de la Cuarta República, dónde la minoría política y politiquera se abrogaba el derecho de representación de la voluntad del pueblo, situación ésta que mantiene alejada a la mayoría de los ciudadanos y ciudadanas de los escenarios y esferas de dónde se toman las decisiones.
Es indispensable dar el salto adelante que contribuya a profundizar este proceso. Significa entonces, eliminar la brecha distintiva de dirigentes y dirigidos, parecido a la partidocracia. Todo los que nos hemos hipotecado por un mundo mejor y que defendemos los postulados de la constitución, somos militantes y dirigentes de este proceso revolucionario, somos impulsores y defensores del constituyente primario, es decir, el ciudadano común, el que construye su propia legitimidad político-social, donde se levantan las bases del poder popular.
Dar el verdadero salto adelante para construir el poder popular, es entender que estamos desarrollando la propuesta de la nueva sociedad socialista, y que, los materiales y herramientas para esa construcción están expresados en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, en sus artículos 62 y 70, en las leyes del poder popular, en la Ley Orgánica de Educación (mas específicamente en el capitulo II) y la más reciente Resolución 058, aprobada en Gaceta Oficial 40.029, que establece la conformación de los Consejos Educativos, como forma de organización de las comunidades educativas. No deben existir recetas, orientaciones, lineamientos institucionales que coarten el sagrado derecho de crear, de inventar las metodologías para la implementación y puesta en práctica de esta Resolución; hacerlo sería seguir en el tutelaje institucional; apostamos si, al acompañamiento constante y permanente de las instituciones al proceso de fortalecimiento y desarrollo del poder popular en la participación, elaboración y contraloría de las políticas públicas, atendiendo al concepto pueblo y gobierno mandando y obedeciendo
El poder popular como expresión del Socialismo del siglo XXI, demanda un nuevo orden organizacional, político e ideológico, que se manifiesta y se materializa cada día más en la organización social a través de las Comunas y Consejos Comunales; en lo laboral, en el impulso de las experiencias de los Consejos de Trabajadores; en lo político ideológico en la propuesta de conformar otras instancias políticas como el Gran Polo Patriótico, distinto al Partido Socialista Unido de Venezuela y así como varias iniciativas de escuelas de formación sociopolítica en instituciones y espacios comunitarios.
No hay dudas que la sustitución de un modelo de vida por otro, la concreción de nuestras utopías y la redención de nuestro pueblo, está en nuestras manos y en la actitud que asumamos ante las demandas de la patria.
Acompañemos el discurso del Comandante Chávez, cuando dice: “…Hemos recibido sin duda el mandato del pueblo para apretar el acelerador, para avanzar sin descanso en la vía hacia una Venezuela socialista…”
¡¡¡A organizar Poder Popular!!!
¡¡Contra el burocratismo y la corrupción, organización!!.
¡¡No queremos ser gobierno, queremos gobernar!!.
¡¡¡ Para la conspiración, no hay conciliación!!!