3 de septiembre de 2016.- La empresa textil Noemy, una fábrica de telas ubicada en una zona industrial de Caracas, fue abandonada por sus propietarios luego de haber recibido al menos 138 millones de dólares a tasa preferencial entre los años 2004 y 2012, de acuerdo con los datos de la extinta Comisión de Administración de Divisas (Cadivi).
Su principal accionista ya estuvo involucrado en 2014 en un caso de acaparamiento de insumos médicos, detectado tras la intervención de unos galpones de su propiedad donde se localizaron más 100 millones de unidades de equipos y productos de uso hospitalario.
El complejo industrial ha sido ocupado por el Gobierno venezolano y los trabajadores, como parte de las acciones dirigidas a enfrentar la ofensiva económica que grupos empresariales han emprendido contra la actividad productiva en la nación suramericana, según lo han reportado en sus cuentas Twitter la REDI Capital, la instancia de defensa integral del área de la Gran Caracas.
La tarea ha estado a cargo del general José Ornelas, jefe de la REDI y del jefe del Gobierno del Distrito Capital, Daniel Aponte, en el contexto de la ejecución de la Gran Misión Abastecimiento Solidario (GMAS), dirigida por el ministro de Defensa, general en jefe Vladimir Padrino López.
Las inspecciones realizadas indican que la empresa fue "abandonada" y que los accionistas huyeron del país, luego de decirle a los trabajadores que se fueran a su casa porque iban a suspender la producción.
La textilera, paradójicamente, cuenta con materia prima y maquinaria de primera línea, que desde ahora será puesta "al servicio de la Revolución".
Asimismo hay elementos que indican que el grupo empresarial se apoderó de buena parte de las divisas adjudicadas por el Estado a la fábrica de tejido de punto instalada en la zona industrial de La Yaguara, situada al suroeste de la capital venezolana.
Guerra económica, segundo round
La industria fue fundada por los empresarios Aquiba y Jacob Benarroch Benarroch hace más de 50 años.
En los datos del Servicio Nacional de Contrataciones también aparece como director Fortunato Benarroch, quien a su vez es socio de otras compañías del sector textil ubicadas en Caracas
Un dato llamativo es que Aquiba Benarroch es socio de la compañía E-Rosh, domiciliada en la ciudad de Aventura, en el estado de Florida, EEUU.
En dicha firma figura como directivo otro venezolano, Jacob Serfati, propietario de un conjunto de empresas dedicadas al comercio de insumos médicos que están involucradas en delitos acaparamiento, tal como fue detectado por las autoridades hace dos años.
En octubre de 2014, un galpón ubicado en la ciudad de Tejerías, estado Aragua, fue intervenido por el Gobierno venezolano y se localizaron más de 100 millones de unidades de 56 tipos de materiales médicos, incluyendo 14 millones de jeringas y cinco mil sillas de ruedas.
El depósito pertenecía a las compañías Servicios Médicos Jayor y Suplidora Hospimed 2004, a las cuales se les entregaron desde el 2004 (vía Cadivi y Cencoex) 236 millones de dólares. En ambas firmas figuran como directivos Aquiba Benarroch y Jacobo Serfati.
En esa oportunidad, el presidente Nicolás Maduro ordenó la captura y enjuiciamiento de los accionistas de las empresas involucradas, pero ya estos habían escapado al sur de los EEUU.
Ros-Lehtinen y el Mossad
Serfati está casado con Ori Daysi Benarroch (hija de Aquiba Benarroch) y ambos son residentes del condado Aventura en el sur de la Florida, y están registrados como electores según el registro público de votantes.
Asimismo, sus nombres aparecen repetidamente como contribuyentes de campañas políticas de candidatos al Senado y la Cámara de Representantes del Congreso estadounidense.
La principal receptora de sus aportes ha sido desde 2008 la representante republicana Ileana Ros-Lehtinen, que mantiene constantes campañas contra el Gobierno de Venezuela.
En el sur de la Florida, donde se encuentra la base de operaciones del grupo, Jacob Serfati tiene intereses en unas 25 empresas según el registro mercantil de esa entidad de Estados Unidos. Eso incluye firmas como Sensi Medical, Vive Investments, E-Rosh Corp. Igualmente su presencia en Orange Air, una firma de aviación.
Sin embargo una de las más llamativas es LipoMedix Pharmaceutical Inc., en cuyo junta directiva aparece Serfati,
Se trata de una firma de investigación que trabaja en el desarrollo de "un innovador, seguro y eficaz tratamiento contra el cáncer basado en el suministro de liposomas".
En esta firma junto a un par de investigadores y de inversionistas destaca el mayor general de Ejército israelí, Meir Dagan, exjefe del Mossad, servicio de inteligencia y operaciones especiales del estado de Israel.
En su síntesis curricular, Serfati expone que su organización obtuvo 140 millones de dólares de ganancia durante 2010 por sus actividades de producción en Venezuela, México y El Salvador, pero con cobertura comercial del resto de Centroamérica, el Caribe y Suramérica.
El empresario destaca el hecho de que su grupo pasó de tener ganancias de 500 mil dólares en 1991, cuando fue fundado en Caracas como firma local, hasta lograr utilidades millonarias tras su transformación en transnacional y su mudanza a Miami en 2000.
Las operaciones del grupo incluyen empresas como Suministros Jayor, Centro de Diálisis Jayor, Cosméticos Jayor, Suplidora Hospimed, Laboratorio Biogalenic y Dinavica en Venezuela.
En México opera Laboratorios Jayor, en El Salvador Laboratorios Biogalenic, y en Argentina anunció un centro de producción tras invertir 50 millones de dólares.