En breve: la gira presidencial ha proporcionado elementos para trabajar en la estabilización de los precios petroleros.
Primero, se ha develado el empleo del petróleo como arma geopolítica por el Imperialismo para derrotar a Rusia, Irán y Venezuela.
Segundo, se ha precisado los volúmenes adicionales que provienen de la explotación de esquistos y la crisis económica capitalista.
Tercero, se ha conversado el impacto que los precios bajos tienen para los nuevos proyectos en aguas profundas y crudos extrapesados.
Finalmente, se ha conversado con los países no OPEP como Rusia Noruega y México, entre otros, sobre los puntos 1), 2) y 3.
Producto de este escenario se espera que los equipos técnicos de los países OPEP y No OPEP se reunan para establecer acciones conjuntas que favorezcan a todos los países. Es difícil saber si los precios petroleros suban en seis meses, en un año, o dos años, debido a que dependerá de de estas reuniones y de los acontecimientos geopolíticos con las negociaciones por el plan nuclear de Irán, el conflicto en Ucrania, La guerra civil en Siria, la producción petrolera en Irak y Libia. Además, otros factores que impactan el precio del petróleo son:
1) La crisis estructural del capitalismo en Europa, Japón y EE.UU.
2) La caida de la previsiones del ritmo de crecimiento de la impresionante economía China.