En escrito llamado "Cuando los perros ladran….", ver https://www.aporrea.org/energia/a283105.html, el Sr. Joussef Kan comenta una nota personal que yo le enviara, sin comprender lo que le digo y abundando en agresiones verbales en mi contra, comenzando por el título de su escrito: "Cuando los perros ladran….".
El tema sobre el cual habla el Sr. Kan es el petrolero, sector en el cual he tenido una experiencia de largas décadas y del cual creo conocer lo suficiente para rebatir las absurdas apreciaciones que el Sr. Kan, graduado en filosofía y letras en la Universidad de La Habana, pretende hacer pasar por verdades petroleras venezolanas.
Lo primero que debo decir es que el Sr. Kan es deshonesto cuando dice lo siguiente, refiriéndose a mí opinión sobre las reservas petroleras de Venezuela:
"Negar que Venezuela cuenta con una de las mayores reservas de petróleo del mundo, sería como negar el color del mar, del cielo, del sol, es vidente (sic), nadie lo puede negar".
Y cita mi comunicación de seguidas, cuando digo:
"las reservas de petróleo de Venezuela no son las mayores del mundo. Esta es una creencia impuesta a la gente por el chavismo, cuando decidió certificar de manera fraudulenta reservas en base a doblar el factor de recobro del petróleo "in situ".
Como se podrá leer digo que Venezuela no cuenta con las mayores reservas petroleras del mundo, ciertamente no digo que Venezuela no cuenta con una de las mayores reservas petroleras del mundo. El Sr. Kan interpreta incorrectamente lo que le he dicho, no sé si por descuido o por ignorancia. Lo cierto es que las cifras de reservas probadas de petróleo de Venezuela dadas por el chavismo son fraudulentas, no se ajustan a la definición de reservas probadas internacionalmente aceptada y están basadas en una decisión política al establecer, de manera arbitraria, que el factor de recobro de petróleo in situ en la Faja del Orinoco es del 20%, en lugar del 10-12% establecido por los técnicos en base a lo conocido sobre la naturaleza de los yacimientos, su extensión, su comportamiento y sobre los aspectos comerciales de la explotación. Sobre esto se han manifestado de manera rotunda organizaciones como la Sociedad Venezolana de Ingenieros de petróleo, SVIP, y prestigiosos expertos en reservas como el recientemente fallecido colega nuestro, geólogo Aníbal Martínez. El Sr. Kan me llama ignorante cuando le digo esto, pero demuestra, el sí, una gran ignorancia.
Prosigue Kan con un párrafo que demuestra un total desconocimiento del tema:
"De tal manera que [Coronel] al manifestar que las reservas venezolanas no son las mayores del mundo, le diremos que no estamos considerando las que se encuentran al Norte del Golfo de Venezuela, ni tampoco las del Norte de la Zona en reclamación del Esequibo, en donde según la Exxon Mobile, superan los 1500 millones de barriles de petróleo"….
Para comenzar, Sr. Kan, dígame usted cuales son las reservas petroleras probadas venezolanas al norte del Golfo de Venezuela. Lo que queda al norte del Golfo de Venezuela no es ya de Venezuela pero hay algo más grave. Lo que usted quiere decir tiene que ver con las reservas petroleras probadas en el Golfo de Venezuela. Estas reservas son muy modestas. Solo han sido establecidas reservas probadas de gas y reservas asociadas de condensado de relativo modesto tamaño y ellas ya están contabilizadas en el monto oficial de las reservas probadas de petróleo venezolano. Por cierto, Sr. Kan, el primer informe publicado sobre el petróleo del Golfo de Venezuela, en 1967, cuando usted posiblemente aún no había nacido, fue de mi autoría, en el VII Congreso Mundial de petróleo. De manera que guárdese la lengua en el paltó.
Kan alega que hay que botar a Arabia Saudita y a los Emiratos Árabes de la OPEP para que esta organización pueda readquirir su fuerza. Y yo le decía que estos dos países son de los más poderosos de la organización. Si los botan, queda un cascarón. Ahora me dice que Arabia Saudita se va a poner del lado de "nosotros". Que ignorancia, Sr. Kan. Que de cantinfladas.
Luego repite el manido cliché, de "los perros ladran, quiere decir que estamos caminando". A eso de llamarnos perros le digo que, literalmente hablando, el único perro en este asunto es él. Por algo se llama Kan.
Finalmente, para tratar de desagraviar a su alma mater, dice que la Universidad de La Habana:
"rebate conceptos ya desgastados de Adam Smith, John Maynard Keynes, Nolan Rigan, Margaret Teacher, Emil Friedman y tantos otros egresados de la Escuela de Chicago, Los Chicago Boys. Representantes del Neoliberalismo decadente, que ya ha demostrado su inoperatividad en todos estos países del Sur".
Alguien debe decirle a Kan que Margaret es Thatcher, no Teacher. Los demás que lista son gente ilustre, a quien Kan debería mencionar con respeto. Confieso que a Nolan Rigan nunca lo hemos oído nombrar. ¿Será que quiso decir Ronald Reagan? ¿Si un graduado en filosofía y letras no sabe deletrear el nombre de un personaje famoso, que queda para sus opiniones sobre petróleo?
¿Si estos son los expertos petroleros del chavismo, podremos extrañarnos de que la industria petrolera venezolana haya colapsado?
Jau, jau, Kan