Es como pedirle a una comadreja que cuide los huevos de la gallina.

He llegado a la conclusión que la televisión es maldita…

La metamorfosis que sufren los combatientes frente a las cámaras, les transforma la rebeldía en una extraña actitud que muchas veces se convierten en sumisión.

Muchos no quieren entenderlo, vivimos una guerra camuflada y a la menor oportunidad, ellos patearan la mesa y los pendejos lo pagaran…

Es tan simple como que la comadreja no dejara un solo huevo a la gallina.

Hoy tenemos una situación a punto de estallar y muchos no lo desean aceptar…

El pueblo a pesar de los múltiples desaciertos del gobierno, le dio su voto de confianza a nuestro comandante una vez más, como suplicándole, ¡Por favor no se equivoquen más!…

¿Y como va a estallar esto?

Si nuestros medios continúan con esa sumisión vergonzosa que nos dan la pauta que solo cuidan sus puestos de trabajo.

¡La maldita corrupción y la ineficiencia!, grita Chávez, pero los presos por delincuentes siguen sin aparecer, y nos convertimos en el calco perfecto de lo que criticamos todas las horas, los días y los años.

¡YA SABEMOS LO QUE SON TODOS ELLOS CARAJO!

Cambiemos el libreto y depuremos de corruptos la revolución o esto se irá pal´ carajo…

Hoy somos testigos que se ha agregado un nuevo ingrediente a la lucha de clases y cualquier ser humano medio pensante, lo ve claramente.

Con la derrota de Capriles están todos locos…

Quieren sangre, quieren venganza, y la mejor manera de saciar su ira es atacar por todos sus frentes disponibles, a los más pobres.

En Twitter colocan: “Pásalo, cero propina para nadie”

En las clínicas la atención a los pacientes que ellos saben que trabajan con el gobierno deja mucho que desear, demostrándonos su enojo, en los puestos de trabajo ponen de manifiesto su locura, donde encuentran a un chavista distraído se lo quieren comer, sino veámoslo en el espejo del potro Álvarez y el padre que quiso pegarle a su hija por pedirle un autógrafo al pelotero…

En el Seguro Social, los maltratos se multiplican con los empleados y obreros pacientes, porque un medico revolucionario nunca será partidario de un maltrato, y el majunche lo tenemos delante de nuestros ojos, en el banco parecido cuando los obreros van a cobrar las nominas, en cualquier ministerio se acentuará la famosa frase de: “Vete a quejar con Chávez”

Cuando la mayoría de los ministros, directores, jefes y adjuntos, saben que más del 60% de los empleados públicos son de la contra…

¿Cuántas veces lo denunciamos en Aporrea este hecho inusual?

Y al final tal vez debemos darle las gracias a Aristóbulo cuando nos dijo hace unos años de no leer Aporrea, por su honestidad, porque la mayoría de ellos no leen Aporrea. Tal vez piensan que es la trinchera de la chusma.

Y después nos dicen: “Como van a publicar eso”, en vez de activar los mecanismos de poner las cosas en su justo lugar, y por su majestad divina (la de ellos), nos convertimos los pendejos que denuncian en Aporrea su ineficiencia, en salta talanquera y contrarrevolucionarios.

Y volviendo a los majunches…

No es que nos adversen…

¡¡¡NOS ODIAN!!!

Se ha desatado una casería de brujas muy peligrosa, contra los que votaron por Chávez…

Y nuestro líder lo sabeo lo tiene que saber, y que mejor lugar que la trinchera de Aporrea…

Y si a ello le agregamos una ineficiencia que obligatoriamente tiene que desaparecer, acompañado de los bandidos que pretenden que aquí no ha pasado nada…

Del Caracazo pasaremos a un Venezolanazo que nadie desea…

Así que señores, cada uno en su puesto de lucha y a trabajar con conciencia revolucionaria, porque si no en diciembre nos darán la primera alarma, y si pretendemos que todo siga igual, esta revolución se irá pal´ carajo y los chavistas los contaremos en el futuro, como contamos hoy a los adecos y copeyanos…

LOS MONOS ANDAN POR LAS RAMAS, LOS COMBATIENTES HABLAN CLARO Y RASPADO