“…el trabajador medio porta en sí mismo la contradicción, que ni es netamente revolucionario, ni netamente tradicionalista, que se encuentra en una situación de conflicto: su estructura psíquica deriva, por un lado, de su situación social, preludio de actitudes revolucionarias; de otro, de la atmósfera general de la sociedad autoritaria; ambas influencias son antagónicas…”*
De esta forma Wilhem Reich intentaría comenzar a explicar lo ocurrido en las tiendas de electrodomésticos en Venezuela en estos días. Un llamado del Presidente Maduro a vender los productos sin re marcaje hasta que se agotara la existencia 1, desató una poblada que mostró algunos conatos de violencia. La población acudió a las tiendas con el desespero, de quien va a buscar un objeto que garantizara su vida. La inmediata congregación de la masa no era por alimentos, ni por medicinas, ni por útiles escolares, era por electrodomésticos. Altos mandos de la Fuerza Armada Nacional debieron movilizarse para contener la avidez desaforada 2. De manera sorprendente observamos algunos funcionarios policiales incorporados a la vorágine humana, para asegurar temprano, su pequeño botín. Un día después de la primera orden, el Presidente se vio en la necesidad de llamar a la calma 3. De igual forma lo hizo el Ministro de Interior y Justicia y la Paz el Mayor General del Ejército Rodríguez Torres 4.
Estamos seguros de que el Gobierno Nacional no esperaba esa respuesta desproporcionada de la población ante artículos que no son de primera necesidad.
Pero intentemos explicar ese demonio colectivo en las palabras de uno de los discípulos más destacados de Sigmund Freud: “…no pueden explicarse las catástrofes sociales invocando la "psicosis de guerra" o la "ceguera de las masas". Sería tener una triste opinión de las masas si las creyéramos capaces de dejarse "cegar" simplemente. En realidad todo orden social produce en la masa los componentes y las estructuras que necesita para alcanzar sus fines principales. Sin estas estructuras, que pertenecen al campo de la psicología de masas, las guerras no existirían. Tiene que haber una correlación importante entre la estructura de la sociedad y la estructura psicológica de sus miembros. Esto no significa que la ideología dominante sea únicamente la ideología de la clase dominante, sino —lo que es más importante para la solución práctica de los problemas de orden político— que las contradicciones de la estructura económica de una sociedad, tienen su raíz en las estructuras psicológicas de los oprimidos. De otro modo, sería inconcebible que las leyes económicas de una sociedad fuesen tan eficientes a través de la acción de las masas que se someten a sus leyes…”
Ahora bien, ¿a cuáles leyes obedecieron los oprimidos de nuestro país, llevándolos a involucrarse en estos hechos vergonzosos a las puertas de los comercios? ¿Qué instinto poderoso logró quebrar el instinto de conservación de una madre que lleva a su hijo pequeño recién nacido exponiéndolo al arrollamiento o la asfixia para obtener un televisor?
El consumo irracional instalado durante décadas por el capitalismo en nuestras almas, solo necesita un mínimo estimulo, para desatarse con una fuerza inusitada.
Las necesidades básicas son relativamente estables y limitadas, es decir nuestro consumo individual de alimentos o medicinas siempre tendrá un coto. Pero coexisten en nuestro interior junto a esas necesidades básicas finitas, “los deseos” que son múltiples, cambiantes, mutables, continuamente influenciados, no por el ser humano individual, sino por el ser humano gregario, por el grupo, la sociedad, la cultura y el marketing. Se estima que una persona en una sociedad capitalista recibe unos 3 mil estímulos diarios “de deseos”. Por ejemplo cada vez que observamos un comercial de un televisor LG pantalla plana, donde la protagonista experimenta algún tipo de placer, podemos llegar a experimentarlo como nuestro, gracias a nuestro espíritu gregario, grupal 5. Incluso neurológicamente los procesos de recompensa sensorial a través de la publicidad, están estrechamente vinculados con los instintos y por lo tanto con lo irracional.
Eso respondería someramente al comportamiento casi instintivo de los buscadores de electrodomésticos por estos días. Después de acumular tantos deseos alcanzables e inalcanzables monetariamente, los venezolanos salieron a buscar su cuota de placer en los objetos que el gran capital nos induce forzosamente a obtener. En ese comportamiento instintivo encontramos el asidero de la teoría de Marx que nos dice que “…las ideas de las clases dominantes son también las ideas dominantes en cada época; o, dicho de otro modo, la clase que tiene el poder material dominante en la sociedad tiene también el poder ideológico dominante…Las ideas dominantes no son otra cosa que la expresión ideal de las relaciones materiales dominantes, son esas mismas relaciones materiales bajo la forma de ideas, es decir son las ideas de su dominación.."
Ante las medidas del Gobierno esas ideas dominantes del gran capital mundial, quedaron intactas. Más aun, se fortalecieron, demostraron su absoluta eficacia en la psiquis de los venezolanos. Podemos imaginar a Koo Bon-Joon cuyo patrimonio personal asciende a unos 800 millones de dólares, uno de los hombres más ricos de Corea del Sur y jefe de LG Electronics, complacido de ver las fotos de los humildes venezolanos forcejeándose por un pantalla plana modelo Smart TV Cinema 3D. Igual deben estar con una sonrisa tipo mona lisa Jeff Immelt presidente del conglomerado General Electric (GE) al ver las señoras venezolanas comprando las licuadoras que financiaran aunque sea en una millonésima parte, artefactos más sofisticados como la ametralladora más grande del mundo la General Electric GAU-8/A Avenger.
Pero otros, los desclasados de las maquilas mexicanas de la Sony en Tijuana Oeste, o de las maquilas brasileñas de la Samsun, quizás no les lleguen las fuerzas para prender la tele en la noche después de 16 horas de trabajo sub asalariado y enterarse de cómo los venezolanos se sometieron a tamaña odisea por los productos que ellos fabrican y que nunca podrán utilizar.
Unos cuantos capitalistas de vieja data en el país intermediarios y dueños de esos comercios importadores de electrodomésticos, seguramente pagarán lo que deban pagar, perderán algún dinero de acuerdo a sus expectativas infinitas de ganancia, pero el capital, el verdadero capital, no fue tocado en lo mas mínimo, ni en sus ganancias, ni tampoco perdieron un milímetro en nuestra psiquis.
12/11/2013
Escuche Trinchera de Rosas por Makunaima Kariña todos los martes a las 8 a.m.
Escribanos a trincheraderosas@gmail.com
Fuentes y pie de página:
*Reich Wilhem Psicología de masas del fascismo. Versión al español de Raimundo Martínez Ruiz, de la edición alemana de Sex-Pol Verlag, Zurich, 1933. http://asinyco2.files.wordpress.com/2013/02/xxx-psicologia-de-masas-del-fascismo.pdf
1http://www.venprensa.com.ve/maduro-llama-a-que-no-quede-nada-en-los-anaqueles-de-daka-al-anunciar-ventas-a-precios-justos/
2http://www.elsoldemargarita.com.ve/site/318889/fotos-venezolanos-cazan-gangas-tras-toma-de-tiendas
3http://www.venprensa.com.ve/presidente-maduro-llama-a-la-calma-ante-saqueo-de-daka-valencia/
4http://www.noticias24.com/venezuela/noticia/205741/rodriguez-torres-llama-a-la-calma-no-es-necesario-hacer-colas-interminables-en-daka/
5 Recientemente se ha demostrado que el comportamiento social de los seres humanos también obedece a unas neuronas llamadas neuronas espejo, capaces de hacer propias las acciones, sensaciones y emociones de los demás. Lea entrevista al neurobiólogo: Giacomo Rizzolatti "Las neuronas espejo te ponen en el lugar del otro" http://elpais.com/diario/2005/10/19/futuro/1129672806_850215.html
Esta nota ha sido leída aproximadamente 3035 veces.