El emperador al ver que su pueblo caía en las redes de la locura, decretó la pena de muerte a todos aquellos que consumieran o comercializaran el opio en territorio chino. Así que en la primavera de 1830, comisionó a uno de sus mejores políticos para combatir la plaga. Lin Hse Tsu cumpliendo su cometido envió una carta a la Reina Victoria:

“…existe una categoría de extranjeros malhechores que fabrican opio y lo traen a nuestro país para venderlo, incitando a los necios a destruirse a sí mismos, simplemente con el fin de sacar provecho. (...) ahora el vicio se ha extendido profundamente (...) Por este motivo, hemos decidido castigar con penas muy severas a los mercaderes y a los fumadores de opio (...) Todo opio que se descubra en China se echará en aceite hirviendo y se destruirá y todo barco que llegue a nuestro territorio con opio será incendiado (...)”1

Años antes de escribirse esas líneas el comercio con China era difícil, las naciones occidentales no poseían nada que le interesara a los chinos para el intercambio, así que los británicos empezaron a vender opio a la población sin consentimiento del gobierno. En diez años lograron que los campesinos y los obreros chinos gastaran 2/3 de su sueldo para costear su adicción. El opio del pueblo, obligó a su gobierno a ir a la guerra dos veces y a ser derrotados en ambas. Los chinos se vieron forzados a cambiar su producción de sedas, te y porcelanas por opio, y debieron entregar Hong Kong por nada menos que 155 años al Reino Unido y aceptar la apertura de sus puertos al comercio internacional.

Pero la maquila del mundo de hoy día, donde se albergan las mayores trasnacionales de la manufactura, se enfrenta al opio de los nuevos tiempos. El capitalismo mundial que les prometió crecimiento sostenido e infinito, está en dificultades. Si los europeos no consumen por la crisis, y los gringos comienzan a sentir los estragos de los recortes sociales por el déficit fiscal, entonces? Alguien debe consumir…los chinos.

Pero este inmenso grupo de 1.200 millones de seres humanos durante muchas generaciones se ha levantado en el sacrificio del trabajo asalariado esclavo, donde la precariedad ha estado marcada en la psiquis china. De manera que, inducirlos al consumo de las mercancías tal como lo hace el occidente requiere de una transformación social, cultural y política de gran escala. La promesa? Seguir creciendo y asegurar que el capitalismo mundial no se quiebre. Tal como en 1839 hoy en el 2013, las masas chinas serán obligadas a consumir hasta su última gota de sangre. A diferencia del emperador Daoguang, Xi Jinping no librará ninguna batalla, ni siquiera ofrecerá resistencia. Al contrario, ya comenzaron las reformas.

TERCERA SESIÓN PLENARIA DEL XVIII COMITÉ CENTRAL DEL PARTIDO COMUNISTA CHINO

Xi Jinping, Presidente de la Republica y secretario general del Comité Central del PCCh, explicó las decisiones tomadas en la plenaria realizada del 9 al 12 de noviembre de 2013, resaltaremos las de mayor impacto político y cultural por ser aquellas que entregaran las conquistas socialistas:

1.- Las tierras de uso rural y de propiedad colectiva cuya venta estaba prohibida por estar destinadas a la agricultura, comenzaran a ser adjudicadas como propiedad privada a los colectivos. Podrán ser vendidas a un valor conferido por el mercado unificado de tierras urbanas y rurales. Actualmente en algunos lugares los aldeanos alquilan sus viviendas o transfieren sus derechos a la tierra rural para la construcción de viviendas con fines de lucro, y luego usan el dinero para comprar viviendas en las zonas urbanas. Una vez despojado el campesino de sus tierras bien sea porque decidió venderla para irse a la ciudad o porque algún capitalista hizo una “muy buena oferta” a todos los pobladores para construir una ciudad industrial, que ocurrirá con esos campesinos y sus cultivos? Seguramente se observará el nacimiento de nuevos cordones de miseria alrededor de las principales ciudades y zonas económicas especiales.

2.- Se permitirá la inversión del capital privado en las industrias y activos de propiedad estatal La perspectiva es que la propiedad sea limitada y el acceso de los inversionistas extranjeros sea ampliado. El sistema de apertura será establecido tomando como base el ejemplo de la Zona Franca Shanghái, es decir, hacer de China una gran zona franca.

3.- La reestructuración del sistema de administración del estado persigue la descentralización a fin de que los particulares puedan efectuar gestiones directamente con los gobiernos locales.

4.- Se crearán impuestos ambientales para que aquellas compañías que contaminan paguen despojando así de culpa y responsabilidad a los ecocidas.

5.- Se instaurarán las elecciones directas o mejor dicho elecciones burguesas para elegir a los legisladores de los distritos como programa piloto para elegir posteriormente de manera directa a los legisladores de alto nivel del sistema del consejo nacional.

6.- Con la excusa de combatir la corrupción comenzara a diluirse el Estado a su mínima expresión argumentando que los corruptos son solo funcionarios que desvían fondos o hacen negocios ilícitos.

7.- Como parte de la transculturización occidental mucho más abierta en los medios de difusión chinos, comenzaran a disminuir la propaganda institucional y a transmitir con mayor frecuencia los logros culturales sobresalientes del capitalismo extranjero.
Como vemos, el viraje cultural, económico y político de China tendrá como lema un país, un sistema. Atrás quedaran los vestigios socialistas que conservaban a la sociedad en un muro de contención. Como consecuencia el crack del capitalismo quizás se postergará unos cuantos años, pero sin duda volverá, más cruento, con los efectos de un país inmenso con cientos de millones de excluidos por el capitalismo. Ese programa no es un ejemplo para ninguna revolución en el mundo.

19/11/2013
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Fuentes:
1 Lin Hse Tsu 1839 Carta a la reina Victoria, pre ambulo de la primera guerra del opio China - Imperio británico.
China Daily 14 de noviembre de 2013