Las luchas populares y revolucionarias, en la Venezuela Contemporánea, tuvo su máxima expresión y sentido, entre la década de los años 60 y70, particularmente voy a referirme a quienes nos incorporamos en la lucha política a partir de los años 1970, en plena adolescencia entre los 15 y 17 años de edad, sacrificamos nuestra juventud, novia, estudios, familias y todas aquellas comodidades, que la alienación pequeña burguesa brinda a esa edad rebelde, llenas de ilusiones, esperanzas y sueños en la gran utopía creadora y poética por un mundo mejor y de bienestar para los pobres de la tierra.
Quienes tomamos ese camino de vida política, vivimos en carne propia, los desmanes represivos del estado burgués, signados por la persecución, encarcelamiento, torturas y asesinatos de luchadores sociales revolucionarios, y quienes hoy aun estamos vivos físicamente, moralmente, pero; a lo mejor muertos en vida, en la indigencia, en la miseria, enfermos, rumbo hacia una muerte lenta y silenciosa, que al parecer a nadie le importa lo que podamos padecer, los hombres y mujeres, que en esa época arriesgamos nuestras vidas quijotescamente, en la lucha por una patria digna y de justicia para los mas necesitados del bravo pueblo venezolano.
Hoy; después de un largo peregrinar por estos caminos, a muchos de nosotros nos embarga una profunda mezcla de alegrías y tristezas, pero; a la vez sentimos una fuerte dosis de rabia, impotencia y hasta decepción por el maltrato e indiferencia, que hemos sido sometidos algunos de nosotros, por quienes hoy desde posiciones de poder político y económico, se Jactan de ser "revolucionarios" pero su práctica y actitud personal hacia los demás camaradas, dista mucho de lo que dicen pregonar, se enfermaron de arrogancia, prepotencia, soberbia insensibilidad humana etc. Y con esa conducta humillan y se burlan de los demás, no nos valoran ni como seres humanos, mucho menos por nuestra modesta trayectoria en las luchas revolucionarias. Aun así; con todo y el desprecio que hemos sentido, nosotros seguimos aportando desde nuestras precarias posibilidades, nuestro granito de arena en la construcción de esta maravillosa patria.
Es lamentable y vergonzante, tener que escribir sobre esto, pero es una de las maneras de drenar sanamente nuestra desesperante preocupación, la impotencia y la indignación que toda esta situación existencial nos genera.
Queremos destacar; que el Comandante Hugo Chávez en vida, nos quiso ayudar y dio instrucciones a algunos de sus ministros, que por cierto algunos venían de esa generación de revolucionarios, para que nos agruparan, y nos ayudaran a mejorar nuestras condiciones de vida, ya que muchos de nosotros estábamos desempleados, enfermos y sin un techo donde vivir etc.
Esta orden que dio el Comandante Chávez, lamentablemente fue cumplida a medias de manera muy selectiva, ya que aun quedamos luchadores sociales sin un techo propio y sin empleo vagando por estas calles a la buena de dios.
En muchos casos, en vez de ayudarnos se hizo todo lo contrario, nos han votado de algunas instituciones, a otros nos han obligado a renunciar, en fin nos han condenado a la miseria y al abandono, solo por el simple hecho de mantener posiciones divergentes, criticas y autocriticas sobre diferentes aspectos de la vida política venezolana, particularmente en ciertas distorsiones relacionadas con la burocracia, sectarismo, la ineficiencia y la degradante corrupción administrativa, que evidencia un bajo perfil ético y moral, no consonó con los principios elementales, que deben albergar quienes se dicen ser "Socialista, Bolivariano, o revolucionario".
Hemos escuchado discursos del Presidente y Camarada Nicolás Maduro y de algunos ministros, llamando a combatir todas estas desviaciones y conductas irregulares, que aun persisten en todas las instituciones del estado.
Ojala; estas intensiones no se queden solo en acalorados discursos y un simple saludo a la Bandera, sino que de verdad se vaya a fondo a un adecentamiento profundo de los organismos públicos involucrados en graves irregularidades.
Nosotros; humildemente estamos dispuestos a acompañar una jornada con estas características, de saneamiento de la función pública, convóquenos Camarada Maduro, en esta generación de luchadores sociales, hay hombres y mujeres dispuestos, capaces y honestos para emprender y asumir cualquier responsabilidad que tenga que ver con la depuración en dichas instituciones.
Queda esta modesta reflexión, como evidencia para la historia, de quienes hoy venimos emborronando papel en función sana y constructiva, para una mejor convivencia entre revolucionarios, ya que la situación país del momento, exige la participación de todos, sin exclusión ni sectarismo de ningún tipo, hagamos realidad el sentido de pertenencia patria y de solidaridad humana con los más necesitados de la tierra.
"El verdadero revolucionario esta guiado por grandes sentimientos de amor a la humanidad, pero;. Para tal fin,. Se debe ser: Humilde, honesto y sobre todo tener una alta dosis de sensibilidad humana,. Cualidades vitales en todo aquel que se diga ser revolucionario"
