Resumen del libro de Alí Rodríguez. Antes que se me olvide. Capítulo III. La Guerrilla

Pregunta la periodista Rosa Miriam Elizalde Rodríguez Araque. ¿Qué estaba ocurriendo en 1965 en las filas revolucionarias? En 1965 se produjo una crisis muy profunda en el Partido Comunista de Venezuela. La mayoría de su dirección por no decir toda, proclamaba la necesidad de la Paz Democrática que consistía en cesar toda actividad armada, "realizar una retirada ordenada" e ir solo a la acción legal. Esto ocurría prácticamente sin mayor discusión con las bases del partido y con los que estaban agrupados en los destacamentos armados. Desde luego que, como siempre ocurre con este tipo de hechos, son muchas las opiniones que se vierten según los puntos de vista de cada quien tuviera en el momento de los acontecimientos. El caso es que tal situación provocó que la gran mayoría que estábamos envueltos en el proceso armado nos opusiéramos. Se produjo en 1966 una gran división y un grupo de compañeros nos organizamos en el Partido de la Revolución Venezolana PRV agrupación que encabezó Douglas Bravo y que aglutinó a la mayor parte de los que estábamos en armas pero también a muchos otros que no lo estaban. ¿EL TEXTO RECTOR DE ESTA ESTRATEGIA ES EL "DOCUMENTO DE LA MONTAÑA? Sí, y fue aprobado por el Comité Regional del PCV, así como el manifiesto de Iracara. Se redactaron en los días previos a la división de este partido. Pero para ese momento, yo no me había incorporado aún a las guerrillas rurales. Toda mi actividad se desplegaba en áreas urbanas o suburbanas. A mediados del año 1964, meses después de haber regresado de la Unión Soviética donde había realizado cursos militares junto con un pequeño grupos de los camaradas, yo había asumido la dirección del llamado Buró de Oriente que abarcaba la dirección del partido y también de la FALN en varios estados del oriente del país. Allí me acompañaban Nery Carrillo, Pancho, Toro, Pedro Muñoz y otros camaradas.

En tanto Alfredo Maneiro dirigía las guerrillas del frente Manuel Ponte Rodríguez en las montañas de Monagas y Sucre, en Comandancia lo acompañaban entre otros, Lucas Matheus, Rubén León, Ortiz Resplandor, Winston Bermúdez y el teniente Héctor Fleming Mendoza. ...) Como habíamos mantenido posiciones críticas hacia la dirección del partido yo me desplace a Caracas para tratar de precisar aspectos de la política y del plan que teníamos en oriente. Con ese propósito me reuní un par de veces con el camarada Alberto Lovera quien había sido designado responsable de asuntos militares del partido Comunista. Mientras esto hacía, sin yo saberlo, en oriente se desató una cadena desastrosa de delaciones que provocó la caída de valiosos camaradas, equipos y casas.

Una de ellas estuvo a punto de provocar también mi captura en Caracas. Me salvó la oportuna información de una extraordinaria camarada Mimina Rodríguez Lezama poeta y extraordinaria camarada quien logró escapar del allanamiento de una de mis casas, donde ella servía como cobertura, delatada por el único que la conocía Helímenes Chirino arias Pantaleón. ...) Buscando clarificar cuanto ocurría, logré reunirme con mi amigo Nery Carrillo, que había formado parte de nuestro Buró de Oriente. En esos mismo días tomé la decisión de subir definitivamente a la montaña, deseo que tardó unos meses en cumplirse.

En efecto, me incorporé a la principal columna guerrillera en los Andes. Guiado por un veterano guerrillero a quien por sus rasgos achinado los guerrilleros llamaban Ho Chi Minh me encaminé a tan importante encuentro en una zona del Estado Cojedes. Para mi infortunio tuve el desacierto de ir con zapatos de suela que, al rozar con los pajonales resecos recibieron tan grado de pulitura que apenas podía dar un paso sin resbalar. Luego de meses de inmovilidad en los escondites de la ciudad, los músculos y articulaciones pierden elasticidad por lo que caminar en el monte representa un esfuerzo grande. Pero si además, el zapato no te ayuda a afirmarte en lo que pisas, las marchas terminan en un tormento. ...) No dejó de provocarme emoción el ver la larga fila de combatientes, en cuya punta de vanguardia iba Mandolín, uno de los compañeros cubanos que habían llegado con Luben Petkoff y Antonio nombre de combate del comandante Arnaldo Ochoa, General cubano de la sierra maestra quien el 24/07/1966 ingresó a Venezuela por Chichiriviche en el Estado Falcón. Este fue condenado a la pena de muerte y ejecutado, después de un juicio por corrupción y narcotráfico en La Habana en 1989. A la mañana siguiente se realizó una reunión de la Comandancia. Allí mismo se tomó la decisión de mi retorno a la ciudad para participar en el proceso de restauración de la organización. ...) Yo debí quedarme emboscado mientras la columna proseguía su marcha hacia las montañas del estado Lara donde debía unirse con el frente Simón Bolivar que estaba bajo el mando de Freddy Carquez y Juan Carlos Parisca. Otra parte de ese frente se había plegado a la política de paz democrática. ...)

En Caracas inicié las primeras reuniones con Freddy Carquez responsable de lo que llamábamos el trabajo urbano y también con Nery Carillo y Félix Farías. Habíamos decidido que me ubicara en la ciudad de Maracay para iniciar el trabajo que se e había encomendado. Una nueva delación por parte de un aventurero que logró adquirir cierto rango en la fuerza que comenzaba a organizarse, Meinhardt Lares provocó la captura del Manuel Espinoza Díaz, cubano, arias Mandolín, quien había bajado de la montaña por problemas de salud. También fue asesinado Félix Farías un valioso comandante de las unidades urbanas, afortunadamente yo nunca permití que Meinhardt llegara hasta las casas que me servían de protección, él sabía que yo me encontraba en la ciudad de Maracay, por prudencia me incorporé a la guerrilla rural adquiriendo una gran experiencia en varias misiones que se me habían encomendado.

¿Cómo eran las relaciones entre los distintos grupos que realizaron la lucha armada? En el Partido Comunista se coordinaba todo lo relativo a la actividad armada a través de la Comisión Militar del Partido que dirigió mucho tiempo Guillermo García Ponce y después hasta el asesinato de Alberto Lovera. Como ya te comentaba antes, él fue capturado y sometido a torturas tan salvajes como salvajes toda vez que padecía de una afección física que limitaba sus movimientos. Luego de arrancarle la vida a golpes, trataron inútilmente de convertirlo en delator, murió como muchos otros revolucionarios, sin decir una palabra. Frustrados y acobardados sus verdugos lo lanzaron al mar, con unas cadenas atadas al cuello para que se hundiera. Pero el oleaje marino fue llevando el cadáver hasta recalar en la playa de Lecherías en el oriente del país ...)

¿Usted formó parte de la dirección política de la Comandancia de la FALN­? No yo llegue sin ningún grado, como soldado raso, hacer guardia, cargar leña, cocinar, explorar lo que hace un combatiente. Después de la división del Partido Comunista el Frente José Leonardo Chirino formó una columna bajo el mando de comandante Julio Chirino, nuestro querido y admirado Cabito. La misma que se desplazó hacia el estado Yaracuy. Allí se fortaleció con el importante refuerzo de la llegada de Luben Petkoff de la Habana con un grupo de 14 compañeros cubanos de mucha experiencia. Acto seguido la columna se desplazó hacia las montañas más altas del Estado. Allí se realizaron distintas reuniones en lugar que se bautizó como la Plaza Roja.

De esas reuniones surgió la decisión de abrir operaciones en un teatro que comprendía a los estados Lara, Portuguesa y Trujillo. Por cierto que hay un dato muy elocuente, durante ese desplazamiento en sentido contrario encontramos que muchos de los campesinos habían sido obligado a salir de zona urbanas o suburbanas por la represión que se desató por parte del gobierno. En el estado Lara por ejemplo, hay un lugar identificado como el camino de los fusilados porque allí las fuerzas represivas del gobierno asesinaron a un grupo de campesinos, en los días que Argimiro Gabaldón dirigía el Frente Simón Bolivar. Por eso la guerrilla venezolana nunca pudo adquirir un carácter campesino, arraigada en sus reivindicaciones.

En 1964 usted pasa a la clandestinidad y se integra a la guerrilla, pero continúa también sus actividades en la ciudad. ¿Es así? –Sí, en la ciudad y arriba. Creamos escuela de cuadros en la montaña. ¿Quiénes estuvieron en esas escuelas? Gabriel Puerta Aponte que participó junto con Pedro Muñoz y Doris Francia. Uno de los más distinguidos combatientes fue Rubén León arias David. ¿Y dónde tenían exactamente la escuela? Tuvimos varias. En las montañas del Turimiquire en Monagas y el Estado Portuguesa. En este último estado, logramos mantener una mucho tiempo ya que disfrutamos de mucho apoyo de los campesinos. Así que pudimos organizar varios cursos. Esta fue la más completa bajo mi dirección. Allí, además de las materias militares, instruimos sobre los asuntos políticos y organizativos. Incluso abordamos temas económicos como lo relativo a la cuestión petrolera, principalmente la naturaleza del ingreso petrolero como renta de la tierra. También se realizaba un entrenamiento bastante intenso y participamos en algunas actividades productivas con los campesinos. ¿Usted comenzó sus estudios del tema petrolero en la guerrilla?

En realidad fue antes. Cuando estudiaba derecho tuve muy buenos profesores de Legislación minera y petrolera, particularmente Rufino González Miranda quien escribió un libro bastante notable el régimen legal de los hidrocarburos que aún conservo en mi biblioteca como una especie de reliquia. Sin embargo, en ese momento en ese momento no estudie la cuestión petrolera en profundidad. Lo hice a partir de 1970 cuando conocí a Bernard Mommer quien hacía apenas unos días había llegado de Alemania. Después de varias reuniones con él en la dirección del PRV le encomendamos la tarea de realizar un análisis de la cuestión petrolera en Venezuela y preparar un informe. Desde entonces emprendió una larga y cada día más profunda investigación que arrojado numerosos libros y artículos muy esclarecedores sobre la cuestión histórica de la renta, asunto que también ha abordado muy exhaustivamente el profesor Asdrúbal Baptista con quien también he tenido la buena fortuna de intercambiar opiniones y leer varios de sus numerosas obras.

En el curso de nuestra relación con el doctor Mommer, lo que al comienzo fue para mí una especie de revelación sobre las claves teóricas para entender la cuestión petrolera, pronto se convertiría en uno de mis más queridos amigos. Guardo con él un gran afecto y mucha admiración, por su talento, su disciplina y una entrega absoluta al estudio y la investigación que lo han convertido en unas de las autoridades más sólidas en cuanto al problema petrolero se refiere, ya no solo en Venezuela, sino más allá de sus fronteras. ¿Qué otras clases impartía? Política todo lo relativo a la renta petrolera, por supuesto insistía en el proceso histórico venezolano, leímos y discutimos mucho sobre el pensamiento de Marx, Lenin, Trotsky incluso llegamos a discutir varios escritos de Bakunin, el pensamiento militar del Libertador, tenía un libro interesante de Vicente Lecuna sobre el tema. Las obras de Mao Tse Tung y por supuesto, las materias militares, topografía y orientación, armamento, organización y táctica de guerra de guerrillas, explosivos y demoliciones, sabotaje, además de charlas de seguridad. Todas las materias correspondían a la situación de esos días. Esto estaba acompañado de las lecturas que nos llegaban de la ciudad e incluso del exterior, principalmente de Italia y Francia, países donde contábamos con muy buenos amigos. -En su ensayo sobre las guerrillas latinoamericanas Regis Debray afirma que en Venezuela muchos militantes se habían ido a las montañas "convencidos de que bajarían a los seis meses para desfilar como héroes por las calles. Por eso, cuando algunos vieron desplomarse este cuento de hadas político, pidieron de buena fe su licencia. Así sucedió en algunos casos, pero no fue un hecho generalizado Se trataba de alguna gente sin mucha convicción movida por la fantasía de convertirse en héroes con tan solo llegar a la montaña. La dura vida del guerrillero lo colocaría muy pronto frente a la realidad y pedía que lo bajaran. En algunos casos hubo hasta deserciones.

¿Estuvo usted en peligro de muerte? Eso es siempre una posibilidad. Pero, uno cumple las normas de seguridad, cuando es disciplinado, resulta muy difícil que ocurra. Sin embargo, eso no basta, tiene que prever hasta las casualidades. En el combate es otra cosa. Todo depende en las condiciones en que ocurra. Generalmente la guerrilla, por su inferioridad numérica y de medios, tiene que combatir siempre con ventaja y con el factor sorpresa de su lado. En dos oportunidades, nuestros campamentos fueron atacados por sorpresa y siempre que se participe en un combate se asumen grandes riesgos. El peligro de la muerte siempre está pendiente, pero es en lo menos que se piensa. Quien esto hace puede inhibirse y quedar como un cobarde o cometer errores que aumentan el riesgo. ¿En qué combate usted participó? En varios, pero como te has dado cuenta, hablo poco de eso. Uno solo de ellos, de los más "incómodos" tuvo lugar casi recién llegado a una zona guerrillera de oriente que yo no conocía. Había llegado de noche dos días antes. Así que no tenía idea del terreno en la cual nos encontrábamos. Hasta allí había sido llevado por la logística del MIR. La dirección del PRV y de las FALN me había encomendado la tarea de trasladarme hasta allá desde Falcón. Me acompaño Diego Salazar. La misión encomendada era lograr la unidad con el MIR. El campamento estaba ubicado en el Estado Monagas. Allí estaba Gabriel Puerta Aponte comandaba el destacamento identificado como El Dante. Se trataba de uno de los destacamentos del Frente Antonio José de Sucre. También estaba allí mi amigo de muchos años Julio Escalona. Afortunadamente, Diego había bajado sin contratiempo hasta la ciudad la noche anterior. No imaginaba siquiera el asalto contra ese campamento que planificaron las unidades de cazadores del ejército. Los militares lograron tener información del destacamento porque un joven campesino que había decidido incorporarse a la guerrilla, violó una norma esencial, fue a despedirse de su familia e informó a donde iba. El muchacho tenía un hermano que era sargento del ejército. Poco después de su despedida familiar teníamos a los cazadores en las proximidades del campamento donde nos encontrábamos. Como es mi hábito desde niño, me había levantado temprano, creo que más de lo habitual. El día anterior había observado que los muchachos cortaban leña para hacer el café y hacían mucho ruido. Comenzaba a llover. Recogí mi morral cargué la pistola Browning, única arma que portaba y le dije Puerta Aponte que instruyera a los muchachos para que no hicieran tanto ruido. Puerta se levantó y ordenó silencio y reemplazó la guardia por el viejo Ruperto un campesino que conocí allí. El viejo Ruperto regreso para informar que había visto pasar unos hombres vestidos de verde pero no sabía quiénes eran. Vete allá y ponte mosca, apenas Ruperto salió empezaron los tiros. Al rato de estar allí echando tiros me dijo Puertas tu no crees que debemos retirarnos y yo le contesté sonriendo "no mejor nos quedamos aquí viviendo". ...)

¿QUÉ SABE DE LA PROPUESTA QUE LE HICIERON AL CHE EN ARGELIA, EN 1963 PARA QUE FUERA A VENEZUELA A PARTICIPAR EN LA GUERRILLA? ¿ES VERDAD QUE EL PARTIDO COMUNISTA DE VENEZUELA SE NEGÓ A SECUNDAR ESTA IDEA? Le escuché contar esta historia a Pedro Duno profesor de Filosofía en la Universidad Central de Venezuela, un camarada muy amigo que se mantuvo en nuestras filas hasta su muerte. Fue él quien encontrándose en Argelia, coincidió allí con el Che y le hizo la propuesta. No me consta cual fue la decisión del Partido Comunista entonces, pero muchos si queríamos que el Che estuviera con nosotros en Venezuela. Es difícil establecer que hubiera pasado de haberse dado tal hecho, dadas las circunstancias y factores que he mencionado hasta ahora. Pero no dudo que su contribución hubiera sido enorme. Decir algo en cuanto a lo que hubiese ocurrido en el curso de los acontecimientos sería simple especulación.

¿POR QUÉ SE DECIDE LA PARTICIPACIÓN DE COMBATIENTES CUBANOS EN LA GUERRILLA VENEZOLANA? Ustedes mejor que yo saben cuán consecuente ha sido la Revolución cubana con el principio del internacionalismo y la idea martiana de la unidad de América Latina. Y si alguien ha encarnado esos valores ha sido Fidel. Pero, además de una cuestión de principios hay que tomar en cuenta otro factor. En ese momento la decisión del imperialismo era aislar a Cuba a toda costa. La expulsaron de la OEA, se decretó el bloqueo norteamericano llevaron adelante la invasión a Playa Girón, realizaron toda clase de sabotaje y planificaron decenas de atentados contra Fidel. El ejemplo de la Revolución Cubana, la agresiva política norteamericana que originó una gran solidaridad y los lazos que existían entre cubanos y venezolanos desde que se combatía en la Sierra Maestra, fueron factores que propiciaron una relación muy intensa entre los revolucionarios de los dos países De ahí surgió el enviar no una tropa, sino un pequeño grupo de oficiales que ayudaran al entrenamiento de nuestra guerrilla y transmitieran lo que fue su rica experiencia.

En el frente que operó en la montaña del Bachiller en oriente, estuvieron siete cubanos, entre ellos Raúl Menéndez Tomassevich, Ulises Rosales, Silvio García Planas y Harley Borges. En el frente José Leonardo Chirinos se incorporaron Arnaldo Ochoa y otros 14 compañeros. El objetivo era asimilar toda su experiencia combativa. Lamentablemente, hubo una gran diferencia entre la guerrilla cubana y la venezolana. La cubana contó con una estrategia muy coherente, acompañada de un gran espíritu ofensivo, mantenía siempre la iniciativa, todo bajo el mando único de Fidel Castro, algo que no ocurrió en Venezuela. En el orden sustantivo la guerrilla cubana contó con un decisivo apoyo campesino que en Venezuela no tuvo un carácter masivo, porque nuestros campos desde que apareció el petróleo los campesinos emigraron a las ciudades.

En una reunión que tuvimos en Sicoporo una zona del Estado Portuguesa, Ochoa y yo coincidimos en la idea de llevar adelante unas series de operaciones defensivas. Se trataba de tomar algunas pequeñas poblaciones como Barinitas, atraer el enemigo hacia una zona favorable a nosotros y allí combatir. Pero, teníamos algunos compañeros que se opusieron y defendieron a capa y espada seguir montaña arriba y combatir en el Estado Trujillo. Le dije, "Mira la gente no tiene calzado y no tenemos suficientes víveres. Parte de la tropa está mal vestida para ir a zonas frías. No quiso oír e insistía en lo mismo. El plan fue entonces desarticular una patrulla para montar una emboscada en la carretera entre las poblaciones de Acarigua y Guanare y desplazar las fuerzas principales hacia la montaña de los Andes. La patrulla dislocada, al mando de Alfredo Carquez realizó la emboscada provocó algunas bajas en la unidad del ejército y se retiró sin retirar ni un cartucho.

Así con la columna principal emprendimos una marcha desde Portuguesa hacia la montaña de los Andes trujillanos acompañado todo el tiempo de una lluvia incesante. En una exploración nocturna que hacia una pequeña patrulla a uno de los caseríos, se encontró sorpresivamente con otra patrulla de cazadores intercambiando disparos y revelando nuestra presencia en la zona. Se anuló el factor sorpresa para cualquier operación. Convencidos de que eso provocaría un movimiento de tropas, ordené una emboscada en la carretera de acceso al pequeño poblado.

En esos paramos, esa misma noche viví una situación personal muy dolorosa. Me enteré que había ocurrido un terremoto en Caracas y estaban entrevistando una muchacha que trabajaba en la casa de mi esposa. Contaba que se había desplomado totalmente el edificio donde vivía mi familia y como consecuencia habían muertos todos sus habitantes, mi hijo, dos sobrinitas que yo adoraba mi cuñada y su esposo. No decía nada de mi esposa Maruja. ,,.) De allí decidimos realizar otra marcha hacia otra zona conocida como El Huequito nuevamente en Portuguesa. Allí al hacer contacto con los campesinos nos encontramos con que un muchacho que había pedido la baja meses atrás había sido capturado y había delatado a campesinos que fueron nuestro apoyo por muchos años. Esto provocó el reclamo lógico con gran pesar para nosotros. El viejo Andrés el más respetado entre los campesinos, para gran vergüenza nuestra parte, espetó al jefe. "nosotros que somos campesinos no delatamos. Ustedes que deben dar el ejemplo, lo hacen, ¿Cómo es esa vaina?. Nuestro jefe al regresar al campamento convocó una asamblea donde narró lo ocurrido y planteó que hasta la seis de la tarde de ese día daba plazo para que pidiera la baja quien no tuviera dispuesto a continuar la lucha.

Quien lo hiciera después de esa hora sería fusilado. Acto seguido pidieron la baja 14 compañeros. Uno con la idea de incorporarse a la lucha en la ciudad otros con la idea de retornar a su familia pero todos convertidos en una pesada carga para la columna. Luego de lograr su salida segura por distintas zonas, Se destacó a Carquéz y a mí para quedarnos en la misma zona. Yo tenía la tarea de bajar para hacer contacto con la organización en la ciudad y atender a mi esposa Maruja que por casualidad se había salvado de la tragedia del terremoto. Ella había salido con su madre para visitar un tío que estaba gravemente enfermo, al regresar se encontró con el horror de ver lo más querido de la familia bajo toneladas de escombros. ...) ¿Dónde se encontró usted por primera vez con los combatientes cubanos?

En una zona de Cojedes, yo subí a hacer contacto con Douglas con la idea de quedarme en la guerrilla rural. ¿En qué año fue eso? En 1966 Douglas iba al mando de una potente columna, muy bien equipada y que me impresionó por su poder de fuego. Me topé con la columna que estaba en un desplazamiento hacia occidente cuando yo iba a su encuentro. La idea era incorporarme pues la situación en la ciudad se hacía crítica. Ochoa, Luben y los demás compañeros cubanos, ya se habían agrupado en esa columna. ¿A Ochoa lo conoció por su nombre o por el seudónimo? Lo conocí como Antonio el pseudónimo que utilizó siempre mientras estuvo con nosotros. Llego en el desembarco de Chichiriviche, estado Falcón en 1966, y junto con Luben y los otros compañeros, estuvo casi hasta final de 1968. La última vez que lo vi fue en una nueva división que sufrimos en una zona conocida como El Altar, en Cojedes. Allí no correspondió la tarea de hacer la lista de las dos fuerzas que se separaban. Convinimos también las contraseñas para evitar cualquier choque entre ambas partes. Las contraseñas fueron "agua" la de nosotros y "tierra" para los de Luben. Antonio me dijo, "Pero oye, el agua se lleva la tierra". Yo le respondí. "A veces, pero siempre calma la sed". Sonreímos, nos dimos un abrazo y nos despedimos con cierto inevitable pesar.

¿Estuvo usted al tanto de la expedición que desembarcó en Chichiriviche? Me enteré por radio. El gobierno se enteró porque hubo problemas uno de los botes cargados con las mochilas, comidas y proyectiles se les hundió. El otro bote si llegó bien, pero lo detectaron y la subida hacia la montaña buscando el encuentro con la columna de El Cabito se produjo en medio de un fuerte bombardeo. El Cabito era el jefe del Frente en aquel momento. El embarque se había decidido en Chichiriviche que estaba cerca del campamento en un lugar llamado el Barrial. Allí ocurrió una inundación que cubrió toda el agua. Lo que quedó después fue un lodazal. Para colmo tuvieron un percance pues un compañero conocido como Fabricio, portaba una metralleta ZK de fabricación Checa. Esta era un arma muy peligrosa, si se dejaba caer se montaba sola y disparaba ráfagas sin control. Fabricio la había colocado apoyada en un pequeño árbol. Por alguna razón resbaló, cayo y comenzó a disparar y uno de los proyectiles le dio al mismo Fabricio y de otro compañero. Esto ocasionó un desplazamiento de la columna hacia el Estado Yaracuy y tuvieron que cargar con dos heridos haciendo el recorrido más lento y dejando una pica más ancha de lo normal. Así la posibilidades de ser descubiertos eran mayores. Pero esta vez, por casualidad facilitó que los otros compañeros ubicaran la dirección de desplazamiento aunque por momentos sospecharan que podía ser del ejército. Finalmente, pudieron encontrarse por la habilidad de Luben y de El Cabito desplazándose después hacia un sitio que llamaba la Plaza Roja en el Estado Yaracuy.

¿QUE DECIDIÓ LA PARTIDA DE LOS CUBANOS? Una situación que para mí nunca se terminó de aclarar del todo los cubanos estaban con nosotros en las montañas de Venezuela y Douglas según sus palabras decidió tener un contacto personal con Fidel. Dijo que se iba a Cuba. De acuerdo con su versión de los hechos, salió en una lancha por el oriente de Venezuela y tuvo un intercambio de disparos con la Guardia Nacional. También dijo que el sitio convenido para recogerlo no apareció nadie a buscarlo. Posteriormente, le envió una carta a Fidel. Nosotros nos estábamos desplazando de la zona de Lara hacia Yaracuy. Luben recibió una carta de Douglas. Según la versión de este, le instruía para que se reuniera con los demás comandantes y les diera leer aquella carta. Asimismo se lo decía en una breve nota enviada a Freddy Carquez. Éste no quiso entregar la carta, creándose una confusión generalizada. ¿ERA ACASO LA COMUNICACIÓN DE DOUGLAS BRAVO EN LA QUE LE EXIGÍA A CUBA "ROMPER CON LA IGLESIA SOVÍETICA? No puedo confirmarlo pues, como expliqué, no tuve acceso a dicha correspondencia. Pero en cierta forma es coherente con algunas de las exposiciones en las cuales sostenía que el rol de la revolución cubana debía ser el de promover la revolución continental que él llamaba "guevarismo". Pero como comentaba, en ese momento no teníamos ni la más remota idea de lo que pasaba pues carecíamos de toda información. Nosotros comenzamos a exigir que nos dieran la dichosa carta. Se armó tal conflicto interno que en plena marcha hacia un lugar al cual llegaría Douglas a fin de esclarecer la situación, Luben detuvo la marcha. Convocó una asamblea en la cual planteó la separación. Fue entonces cuando se nos encomendó a Ochoa y a mí tomar nota de quienes se iban con Luben y quienes con nosotros. Desde luego que narrar estas cosas es rememorar momentos muy duros sobre los cuales cada una de las partes que se separaron tendrá versiones diferentes. Lo importante es que años después de nuevo nos encontramos todos juntos. Por lo menos, los que hemos mantenido nuestro compromiso como revolucionarios. ¿Cómo era la relación entre cubanos y venezolanos? En cuanto a conocimientos militares, creo que era lo mejor que tenía Cuba en ese momento. Una vez El Cabito viajó a Cuba y habló con Fidel para que nos mandara otro combatiente como Antonio. Fidel le respondió. "Mira en Cuba hay un solo Antonio". Militarmente era brillante y en la guerrilla uno sentía que era como una muralla, alto, muy fuerte, el primero rompiendo monte. Lo que ocurrió después con él fue muy lamentable para quienes compartimos aquellas experiencias. Son esos dramas de los cuales hay tantos casos en la historia y que demuestran que la consecuencia con los principios es algo que debe mantenerse hasta la muerte.

En cuanto a la relación, se subordinaron al comando de Douglas Bravo. El problema es que Douglas Bravo pasó poco tiempo en la montaña. Tenía una afección en la rodilla que le dificultaba caminar y necesitaba un tratamiento. Entre los guerrilleros cubanos y venezolanos se percibía la solidaridad como algo natural. Nosotros también teníamos la idea de irnos a combatir fuera de Venezuela cuando triunfara nuestra Revolución. Muchos años después algunos de nosotros pudimos contribuir con la guerrilla salvadoreña, pero sin tener la oportunidad de combatir. Pero eso es otra historia. ¿Cuándo Douglas no estaba quien lo sustituía? Luben era el segundo. En ese momento yo era solo un combatiente. Tiempo después me incorporaron a la Comandancia.

¿Los cubanos solo entrenaban a los guerrilleros o también combatían? En las condiciones en que vivíamos el entrenamiento se hacía solo en las marchas y en el combate. Los cubanos se distinguieron entre los más combativos. No se me olvida Salvador. Fue casi suicida su participación en unos de los combates más largos que hubo en las Cortaderas en Trujillo. Murió recientemente, por cierto. Lo queríamos mucho. Le decían que retrocediera y seguía adelante para rescatar unos fusiles FAL que habían quedado abandonados en un lugar muy peligroso. Los cubanos eran muy valientes con solo una excepción, uno que se pegó un tiro en un pie para que lo sacaran. ¿Dónde lo sorprende la muerte del Che? En Lara. Fue un golpe muy duro, pero la guerrilla reaccionó con mucha mística. ¿Cómo se produce la salida del grupo de cubanos que estaba con ustedes? Por contradicciones con Douglas Bravo. Como ya lo comenté en una zona conocida como El Altar se dividió el movimiento guerrillero en tres pedazos. En un grupo quedó Luben Petkoff con los cubanos y algunos venezolanos. Ya anteriormente, después de la experiencia de los Andes, el Comandante Elégido Sibada o el comandante Magoya se fue el estado Falcón con un grupo de hombre de su mayor confianza. Luben según nos enteramos después, se destrazó hasta una zona del estado Yaracuy, y desde allí, decidieron salir del país hacia Cuba. Los detalles de esa operación no los conozco.

¿Luego de la división que ocurrió? Luego de la división nos retiramos hacia la zona de San Rafael de Onoto donde al fin pudimos reunirnos con Douglas quien nos dio la versión que le he comentado. De las reuniones sostenidas se tomó la decisión de volver a la vieja zona guerrillera de Falcón. Marcamos un trayecto y yo comandaba la columna. Pero como la marcha se hacía muy lenta, Douglas me encomendó la misión de localizar a Magoya en Falcón con una pequeña unidad conformada por quince camaradas muy bien entrenados y conocedores del terreno emprendimos la marcha. Teníamos, además la tarea de atraer al enemigo mediante algunas operaciones de distracción y, de ese modo, facilitar el desplazamiento de la columna principal al mando de Douglas. Así que marche con mi pequeña unidad, tomamos varios caseríos, hicimos todo lo que pudimos para atraer a las fuerzas, hasta montamos algunos bailes mientras que Douglas dirigía la columna principal. La idea era concentrarnos de nuevo en el Estado Falcón en la zona de los mosquitos.

Pero cometieron un gran error en el cruce de la carretera que va de San Felipe a Morón. Entraron de improviso en un poblado cuando ya estaba amaneciendo, según lo que me refirieron después algunos compañeros. Para empeorar la situación, cargaron con mucho peso al abastecerse en algunas bodegas del poblado. De allí que subieron por una zona muy visible y luego avanzaron por una quebrada. Habiendo sido detectada la columna, fue fácil montar a tiempo una emboscada sobre la quebrada en la cual la guerrilla intentaba ocultar su movimiento. La peor de las situaciones que puede sufrir cualquier fuerza. Al caer en la emboscada la columna quedó fracturada en dos grupos. Allí la guerrilla sufrió el más severo golpe del que yo tenga conocimiento.

Esa noticia nos sorprendió cuando íbamos camino al estado Falcón, ya nos encontrábamos al sur de este estado, aun día de camino del rio Tocuyo que cruzamos sin mayores problemas, pese a encontrarse bastante crecido. Tal noticia hablaba de mi muerte en ese combate, lo que nos hizo abrigar la esperanza de que pudiera ser falsa para provocar confusión. Pero las informaciones posteriores nos indicaban que algo serio había ocurrido. Esto trastornaba los planes que habíamos trazado. Así que decidimos esperar cierto tiempo para lograr si lográbamos hacer contacto con el resto de la columna. Después de un tiempo prudencial sin resultados, decidí marchar rápidamente para hacer contacto con Magoya y abrir las operaciones en Falcón. De esa forma podíamos atraer la atención sobre nosotros y aliviar la situación de la columna.

Así lo hicimos. Logramos localizar a Magoya y, luego de la aclaratoria de nuestra misión, Magoya asumió el mando debido a su antigüedad, conocimiento y experiencia de la zona le correspondía. Acto seguido se planificó una operación en la que yo no pude participar por un fuerte quebranto que me obligó permanecer en el campamento con un pequeño número de combatientes. La operación resultó un éxito con la captura de armas y municiones que permitieron reforzar nuestra unidad. Poco después logramos reunirnos con Douglas Bravo quien estaba acompañado por un pequeño número de compañeros que habían sobrevivido a la emboscada tendida por los cazadores en Sabana Larga. Luego de hacer el triste balance de lo ocurrido se me instruyó desplazarme hacia una zona próxima al Estado Yaracuy donde había quedado El Catire, viejo camarada a quien siempre me ha unido una muy estrecha amistad. Se trataba de organizar la recepción de un cargamento de armas que presuntamente traería el entonces comandante Prada Barazarte desde el exterior. Luego de varios días de marcha, acompañado por dos guerrilleros llegamos hasta el lugar indicado. Allí me encontré con el catire Larralde quien había logrado organizar varios depósitos de víveres y lo necesario para concentrar la tropa que habrían de recibir el armamento acompañado del guerrillero Delio a quien yo le había tomado mucha estima.

El Catire recibió la instrucción de desplazarse pues debía estar a la hora del desembarco con el armamento. Yo tenía las instrucciones de permanecer en el mismo lugar con el pequeño número de combatientes a la espera del armamento y los refuerzos que nunca llegaron. ...) Perdido todo contacto decidimos retornar a Falcón para reencontrarme con Magoya y elaborar un nuevo plan, además de tratar de rehacer las comunicaciones con Douglas. Rápidamente nos desplazamos hacia la zona de El Mosquito. Tratamos de localizar a Mogoya pero sin resultados. En esta misión me acompañaron solo tres combatientes. Instalados me encontraba leyendo cien años de soledad de García Márquez y disfrutando de un cafecito sabroso. Un campesino y extraordinario guerrillero Emilio, con los sentidos del olfato y con oído muy agudo, me advirtió. "Oigo un ruido en el pozo, voy a explorar". El pozo estaba a unos 100 metros de nuestro campamento. Como Emilio se tardó más de lo que yo esperaba, decidí ir hasta el borde del pozo para verificar la situación. Cuando avancé ví a Emilio en posición de combate y me hizo una señal de silencio. "hay una gran cantidad de tropa ahí en la casa de Maluquito. Sin las camisas tratando de refrescarse. Ni se dieron cuenta que nosotros estábamos ahí.

Nos retiramos, tomamos los morrales y borramos las huellas de nuestro pequeño campamento. Para despistar hicimos un truco guerrillero en aquella región, donde abunda una planta de bordes espinosos conocido como teco, parecido a una planta de zábila y de espinas fuertes. Con una horqueta se puede levantar para borrar las huellas. Así avanzamos hasta un enorme árbol que sobresalía sobre otros de menor talla, muy frondosa y conocida como "matapalo". Nos pasamos seis días montados sobre ese árbol como los monos, viendo cómo iban y venían las tropas y dos tanquetas que utilizaron en una ofensiva exagerada para el número total de combatientes que teníamos en la zona. ...) El oficial que comandaba la tropa no tuvo la precaución de dejar guardias resguardando un pozo de agua, incluso en una oportunidad nos llevamos unas camisas y unas boinas que habían lavado y dejado junto al pozo para que se secaran. ¿Cómo se alimentaban? Llevamos en los morrales sardinas en latas junto con avena con leche y azúcar. Cuando cesó la ofensiva bajamos de aquel refugio que nos sirvió también de puesto de observación. De allí emprendimos una nueva marcha hacia un lugar llamado la Vieja Carola, una señora que era jefa de familia con mucho carácter y que siempre nos brindó apoyo. Al llegar, nos encontramos con que una unidad de cazadores había pasado por allí, interrogando a las gentes que habían brindado apoyo a la guerrilla. Razón por la cual había cierto nerviosismo. Ya habíamos agotado nuestras reservas de alimentos para las marchas y queríamos abastecernos en una bodega que allí se hallaba. El propietario se mostró muy reticente a vendernos unos papelones y quesos que allí tenía. Así que tuve que apelar a un argumento extremo. Si me colocas el queso y el papelón en el mostrador te los pago, si cruzo el mostrador y lo tomo yo como estoy dispuesto hacerlo, no te pago". El truco surtió el efecto y logramos emprender nuestra marcha. Después de muchas dificultades, logramos concentrar las fuerzas dispersas, hasta reunirnos con el Comandante Magoya en enero de 1969, en un lugar de ambiente paradisíaco, en el rio Araurima.

¿Qué evidencias existieron de la presencia del gobierno estadounidense y particularmente de la CIA en la lucha antiguerrillera en Venezuela? La primera evidencia es política. Todos gobiernos de los Estados Unidos siempre acompañaron a los gobiernos más represivos de Venezuela y en el mundo. Incluso el del General Juan Vicente Gómez y el Coronel Marcos Perez Jiménez. Es conocido que Eisenhower llegó a decir que el de Perez Jiménez era el modelo de gobierno que más se identificaba con los intereses de los Estados Unidos. No olvidemos que los norteamericanos estuvieron presentes en la alianza que tuvieron en Nueva York los partidos Acción Democrática concretamente Rómulo Betancourt y Copei alianza que traicionó a quienes arriesgaban la vida en territorio venezolano al enfrentar esa dictadura de Perez Jiménez. La presencia en Venezuela de los cubanos anticomunistas para dirigir la estrategia antisubversiva pasó por previo entrenamiento e instrucción de la CIA. Es difícil imaginar cuántos crímenes horribles le encomendaron a Luis Posada Carriles. ¿Escuchó hablar del comisario Basilio? No, pero sabíamos que esos tipos de agentes estaban aquí y que dirigían equipos encargados de cada uno de nosotros. Por ejemplo en la Digepol tenían un perfil completo sobre mí, además de la información sobre mis familiares y amigos. ¿Cómo lo sabe? Una de las principales tareas es la utilización de la inteligencia. Es conocida la sentencia de Sun Tzu. Conócete a ti mismo y conoce a tu enemigo y podrás realizar cien batalla sin una derrota". ¿Sabía usted que su nombre aparece en una lista de enemigos que debían ser ejecutados y que le encontraron a Luis Posada Carriles en la celda, después de su última fuga de la cárcel en Venezuela en 1985? Sí. Después de una operación que realizamos conjuntamente con gente del grupo de Bandera Roja, delataron y capturaron a un grupo de compañeros. Posada Carriles colocó mi nombre entre la gente que debías ser busca y aniquilada. Por suerte y gracias a la disciplina en la aplicación de las normas de seguridad, nunca dieron conmigo, pese a haber sido delatado en varias ocasiones. ¿Ustedes conocían que todo el entrenamiento y equipamiento del ejército venezolano que operaba contra la guerrilla se realizaba casi exclusivamente con el apoyo norteamericano? Esto no era secreto para nadie. Tampoco el gobierno norteamericano se cuidaba mucho de guardar el secreto. Las operaciones para el equipamiento y el entrenamiento de todos los militares venezolanos fueron planificadas desde la Misión Militar Estadounidense en Fuerte Tuina, Caracas. Eso era público y notorio, incluso algunos oficiales que se alzaron con nosotros en las montañas habían pasado por las escuelas norteamericanas. Algunos analistas consideran que Venezuela se libró de un gobierno como el de Pinochet o como la Junta Argentina, porque la doctrina militar norteamericana de las contrainsurgencia triunfó y no fue necesario llegar a esos extremos. ¿Está usted de Acuerdo?

Eso es verdad solo en parte. No fue el factor determinante. El factor determinante insisto, fue el factor petrolero. Como diría Mao, la guerrilla tiene que moverse como pez en el agua, y el agua son las masas Venezuela tiene una característica resaltante que consiste en que sus campos han quedado despoblados. Para resolver esto inventamos, lo invento Douglas realmente la idea de lo que llamó "la insurgencia combinada", esto es, mantener un núcleo guerrillero en las áreas rurales cooperando y trabajando en la ciudad para preparar la insurrección armada con la participación masiva del pueblo y de sectores de la fuerza armada regular. A mí me correspondió realizar un estudio comparado en esa época, sobre las experiencias de las insurrecciones urbanas en China y Alemania. ¿A QUÉ CONCLUSIÓN LLEGÓ? El elemento principal de la derrota de la vía armada en Venezuela no fue necesariamente la injerencia norteamericana, aunque influyó sin lugar a duda. Mira la experiencia de Vietnam triunfó en condiciones muy difíciles, gracias a la resistencia organizada según los principios de la guerra de todo el pueblo frente al ejército más moderno y entrenado del mundo. En Venezuela fueron determinante otros factores de carácter económico y político a los cuales se les agregan las sociales. ¿HAY OTRAS EXPERIENCIAS EN EL MUNDO SEMEJANTE A LA VENEZOLANA? Pregunta la periodista Rosa Miriam Elizalde. LAS CONDICIONES DE VENEZUELA ERAN Y SON INÉDITAS EN EL MUNDO. En una entrevista en la década del 1970, Teodoro Petkoff dijo que "mientras la lucha guerrillera se llevaba a cabo derrochando heroísmo en Venezuela, la burguesía y el capitalismo venezolano siguieron tan tranquilos. La lucha no lo perturbaba en lo más mínimo". Eso tiene su explicación. Quien analice la formación de los capitales en Venezuela, descubrirá que han sido producto de la distribución de la renta petrolera desde el Estado. Son hijos del llamado "paternalismo estatal". A pesar de la baja productividad de las empresas, siempre obtuvieron altas ganancias por el financiamiento estatal a través de la distribución de la renta. Es un capitalismo parasitario y la burguesía, salvo en momentos en que protestaba por alguna decisión del gobierno, ha estado muy atada a las decisiones financieras y económicas del Estado.

No protestaron entonces porque recibían la tajada más gruesa de la distribución de la renta, sobre todo en la época de los gobiernos de Acción Democrática y parte del último de Rafael Caldera donde, por cierto, Teodoro Petkoff fue la figura más importante como ministro de Planificación. Algunos reaccionaron contra el gobierno de Marcos Pérez Jiménez porque este promovía la formación de nuevos sectores que se enriquecían gracias a la fidelidad que le profesaban. Hubo excepciones, por supuesto, pero la mayoría de los empresarios estaban encantados con sus gobiernos. En fin, prácticamente en todos los países capitalistas, donde ha surgido una burguesía enfrentada con los regímenes feudales, los derrotados mediantes la violencia armada, han instaurado un nuevo Estado burgués. Por el contrario en Venezuela, al capturar una renta petrolera internacional, la distribuyó, favoreciendo a sectores privilegiados y formando así una burguesía rentista, que ha parasitado al Estado. Así ocurrió hasta la llegada al poder de las fuerzas populares encabezadas por Hugo Chávez. Hablando de Teodoro Petkoff, cuál fue su papel en toda esta etapa. Según narraba Douglas Bravo, Teodoro subió a Falcón cuando se estaba constituyendo la guerrilla. Pasó unos meses y dijo que eso no era para él y decidió bajar. Nunca más regresó. Él fue partidario de la lucha armada por mucho tiempo. Después nunca más quiso saber de eso. Y ahora todos conocemos sus posiciones. ¿Qué hay de cierto en esta nota que divulga los ultraderechistas venezolanos a través de internet? Dicen "Alí Rodríguez Araque, guerrillero y experto en explosivos que tuvo una jefatura eficaz durante sus acciones urbanas, con los atracos a entidades militares, bancarias y blindados". Nunca participe directamente en expropiaciones de dinero, aunque por supuesto, sabía que estas acciones formaban parte de los medios para cubrir requerimientos de los frentes y actividades de los mismos. Aunque desde luego, si estuve presente en distintas operaciones armadas. Pero como habrás notado no soy muy inclinado a comentar aquello en lo cual participé directamente. Mi rol fue básicamente político y militar, así como en la formación de los combatientes y militantes, tanto en las estructuras militares como en las del partido. ¿Cuál fue su formación militar y que instrucción recibió? Organización y Táctica de la Guerra de Guerrillas, materia tales como Armamento, Balística, Topografía Militar y Orientación. También en materia de explosivos y demoliciones. Participe en operaciones de sabotaje particularmente contra instalaciones petroleras. ¿Las acciones en las que participó afectaron a la población civil? Jamás. En esto siempre fue extremadamente cuidadoso. Nada de lo que hicieron fuerzas bajo mi mando afectó a la población civil., a inocentes. Nunca. Solamente una vez, uno de mis grupos comandos realizó unas voladuras de oleoductos en las cercanías de la población de Anaco, estado Anzoátegui. Al incendiarse fueron recalentado unas tuberías de gas que corrían soterradamente debajo de los oleoductos y algunos policías y guardias nacionales dejaron armas en el piso por algún descuido, las tuberías hicieron explosión y las armas provocaron muchas explosiones y provocó pánico en la población. Pero las cosas no pasaron de allí. No hubo victima humana. ¿Se vinculó en estos años con Jorge Rodríguez? Lo conocí por todas las relaciones que mantenía nuestras organizaciones y siempre tuve con él una excelente relación. En 1969 nos reunimos en oriente cuando subió a visitar uno de nuestros campamentos para realizar una reunión con Julio Escalona y Gabriel Puerta Aponte. No pude imaginar que sería la última vez. Poco después el MIR sufrió una nueva división en tres fracciones. ¿Cuál es el balance de esta etapa? Hubo una demostración de desprendimiento de muchos compañeros. Muchos murieron, otros fueron sometidos torturas. En general tuvieron un comportamiento heroico. Pero todos estos esfuerzos ya resultaban inútiles para revertir la situación que se produjo luego de tantos errores. ¿Será verdad que para el año 1967, el 80% de la dirigencia política y militar del PRV estaba presa, desaparecida o ejecutada? No podría precisar con certeza el porcentaje de todos los asesinatos y prisiones. En verdad fueron bastantes entre ellos Francisco Prada, Alberto Meléndez, Diego Salazar, Nery Carrillo... Otros como los hermanos Pasquier, Malaver, Félix Farías, Nikita y varios más. Se luchó con mucha mística y desprendimiento. Lo que determinó la derrota no fue la falta de firmeza de los combatientes, sino las condiciones objetivas y no pocos errores de conducción. El factor petrolero había jugado un papel importante. No solamente en la economía sino en la estructura social del país y en la cultura de la población. Estábamos viviendo un nuevo auge de la renta petrolera. Fin del capítulo III. Gracias a la dirección de Aporrea por su amable colaboración las próximos publicaciones serán menos extensas. Gracias por su amable atención. Continuará.



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German Saltrón Negretti

Defensor de los Derechos Humanos.

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