"Muchos graves problemas siguen sin solución. Debemos hacer caer todo el peso de la autocrítica sobre nosotros. Primero que nada, sobre mí, como Jefe de Gobierno; sobre mi Gabinete; sobre los ministros, las ministras, el vicepresidente, sobre los gobiernos regionales, sobre los gobiernos locales"
Presentación del mensaje anual ante la Asamblea Nacional. 1 de enero de 2008
Hugo Chávez
"Las tres "R": Revisión, Rectificación y Reimpulso. Vamos a armarnos aquí en el alma con esas tres "R", los tres reyes magos pues. Revisión, vamos a revisar todo, yo comencé a revisar, a mí mismo me estoy revisando mucho, mucho a mí mismo. El Gabinete, las medidas, los programas, lo que hemos venido haciendo. Rectificar como producto de la revisión."
Aló Presidente Nº 299
Escuela de Formación Socialista Ezequiel Zamora.6 de enero de 2008
Hugo Chávez
Hoy como ayer todo militante socialista, todo venezolano y venezolana que ame esta Patria, adquiere el compromiso de luchar por la Libertad, la Soberanía, la Independencia y la Justicia social para el bienestar de nuestros pueblos.
Ayer nuestros pueblos se enfrentaron al imperio español, hoy estamos enfrentados al imperio norteamericano y sus lacayos antivenezolanistas con el mismo objetivo: la Libertad, la Independencia, la Soberanía y la Justicia Social.
Es importante destacar y recordar el momento histórico en que nuestro Comandante Chávez manifestó las tres R, esto, debido a las circunstancias políticas que subsistían en ese período.
El comandante Chávez siempre estuvo al tanto que, a pesar del desarrollo de una gran cantidad de acciones, medidas, leyes y programas para la soberanía del país y el bienestar social; muchas otras no marchaban como debían marchar porque las desviaban de su propósito original, se quedaban en el papel o simplemente se extraviaban en el camino.
Frente a esa realidad adversa, el comandante asumió el ejercicio de la crítica y la autocrítica revolucionarias como método permanente para lograr la mayor eficacia y calidad posibles de su gobierno y del proceso revolucionario en general. Ese ejercicio de crítica y autocrítica de su propia praxis, Chávez lo bautizó con nombre propio: las 3R (Revisión, Rectificación y Reimpulso).
Recordemos además que el comandante Chávez complemento esas tres R con la Reunificación, Repolitización y Repolarización de los cuadros socialistas y progresistas del país.
Después de la partida de nuestro comandante Chávez, entramos en una nueva etapa, mucho más rigurosa y crucial que las del pasado. Hay una guerra económica y un bloqueo criminal, contentivo de sanciones y medidas coercitivas por parte del imperialismo para destruir nuestro proceso revolucionario.
El Presidente Nicolás Maduro asume el legado del comandante eterno y aplica, igualmente, las 3R en las siguientes áreas de importancia estratégica: una, la defensa y consolidación del orden constitucional, la democracia participativa y protagónica, la seguridad y la soberanía con base en la unidad cívico-militar patriótica, popular y revolucionaria; dos, la recuperación y continuidad del estado de bienestar y desarrollo socio-cultural del pueblo, destruido parcialmente por la guerra económica y el saboteo institucional; tres, la construcción y desarrollo del nuevo modelo económico productivo independiente, soberano y socialista, que es la labor histórica más ardua y crecida de fuertes contradicciones; cuatro, la defensa y consolidación de la paz, el diálogo y la sana convivencia para el desarrollo integral de la nación.
El Presidente Nicolás Maduro ha asumido con extraordinaria eficacia y calidad política, la continuidad y consolidación del proceso revolucionario bolivariano. El escenario interno y externo ha sido ampliamente adverso desde un principio de su mandato. El enemigo imperialista ha mostrado todo su odio y ferocidad criminal en su empeño de liquidarlo, asesinarlo, sin éxito alguno. No han podido ni podrán consumar ese objetivo.
Ahora el Presidente Nicolás Maduro nos congrega nuevamente a la Unidad, Lucha, Batalla y Victoria mediante la aplicación de las tres R.net. A saber: (Resistencia, Renacimiento, Revolución).
En este momento, qué implican estas tres R, cómo debemos asumirlas para enfrentar esta nueva etapa de la revolución bolivarianay cómo lograr la concreción de políticas revolucionarias desde nuestros espacios militantes de lucha. Veamos.
En el marco del plan 2022-2030, el Presidente también presentó un nuevo sistema, que llamó «tres R punto net», para «la nueva época de transición hacia el socialismo»: Resistencia profunda que asuma la Repolarización de nuestro pueblo, la rescilencia. Embestida al imperio, resistencia moral y política para resistir al bloqueo. Renacimiento del espíritu original de la Patria, del renacer de los valores de Venezuela y del Proyecto Nacional Simón Bolívar. Revolucionar, para cambiarlo todo de nuevo, para hacerlo de todo y para hacerlo bien.
Aquí vamos a desglosar cada una de estas R desde las perspectivas, conversaciones y opiniones recogidas del Poder Popular organizado.
Resistencia:
La resistencia no debemos asumirla o interpretarla desde el punto de vista del aguante, ni del resistir, ni del quedarse de brazos cruzados ante el cúmulo de medidas coercitivas, sanciones económicas, criminales y acciones violentas por parte del imperialismo norteamericano y sus lacayos antivenezolanistas apátridas, no, la resistencia debemos asumirla como expresión de unidad, de lucha, de batalla y de victoria en todos los frentes de la revolución bolivariana. Somos un pueblo guerrero, un pueblo creador, independiente, libre, heroico y soberano. Somos un pueblo que no se rinde ante las adversidades, al contrario, somos un pueblo que se fortalece ante las dificultades. Recordemos que por nuestras venas corre la sangre de nuestros libertadores, de nuestros hombres y mujeres que dieron la vida por la libertad y por la justicia social.
La resistencia implica a grandes rasgos la formación política e ideológica del militante revolucionario, debemos acorazarnos moral, mental y espiritualmente con valores y principios que nos identifiquen con el proceso político revolucionario real-histórico-concreto que estamos viviendo. Necesitamos sentir la revolución como un engranaje fundamental de nuestra vida. Necesitamos consolidar nuestro sentido de pertenencia, percibir el proceso bolivariano como nuestro, como una parte de nuestra vida. Porque como decía nuestro comandante Hugo Chávez Frías "No se trata de recitar decálogos o de adoctrinar: se trata de apelar a la sensibilidad y la inteligencia de cada compatriota". Saber con exactitud lo que realmente ameritan los venezolanos en el plano político e ideológico y ajustarlo a su cotidianidad.
Nos encontramos en una batalla de ideas, en una batalla donde nuestros enemigos nos atacan psicológicamente, nos debilitan moralmente y obtienen provecho mediante las necesidades más apremiantes de nuestros cuadros revolucionarios. A este respecto Rodolfo Quintero dijo «desde hace más de cincuenta años hay en Venezuela una cultura del petróleo; un patrón de vida con estructura y mecanismos de defensa propios, con modalidades y efectos sociales y psicológicos definidos, que deteriora las culturas "criollas" y se manifiesta en actividades, invenciones, instrumentos, equipo material y factores no materiales como lengua, arte, ciencia, etcétera». (La Cultura del Petróleo, pág. 19, 2007).
Nosotros, los militantes revolucionarios que amamos esta patria, no estamos exentos de este patrón de vida capitalista. Éste patrón de vida está allí y el imperialismo y sus lacayos lo saben. Por ejemplo, desde Colombia quieren imponer en nuestra patria Venezuela esa estrategia indecorosa de comprar funcionarios, policías, militares y personajes de altos cargos para garantizar sus triquiñuelas en territorio venezolano. Ante este panorama es necesaria la resistencia del militante revolucionario, entendiendo ésta como expresión de unidad, lucha, batalla y victoria, fundamentada en los principios y valores de la revolución bolivariana.
Renacimiento:
Cada militante revolucionario debe renacer de sus cenizas como el ave Fénix. Pero ese renacimiento debe fundamentarse enel árbol de las tres raíces (Bolívar, Zamora y Rodríguez) Debemos asumir los principios de la revolución bolivariana establecidos en la Declaración de Principios del libro rojo del PSUV.
Los militantes revolucionarios deben darle plena vigencia, con la práctica cotidiana, a todos estos principios, asumiendo la máxima del Che Guevara cuando dijo "la revolución se lleva en el corazón para morir por ella, y no en los labios para vivir de ella".
Debemos fundamentar valores y principios tales como: Anticapitalista y antiimperialista, anticorrupción, socialista, marxista, bolivariano, comprometido con los intereses de la clase trabajadora y el pueblo, humanista, internacionalista, patriótico, unitario, ético y con moral revolucionaria, defensor de los derechos de la madre tierra, defensor de la igualdad y equidad de género, defensor de los derechos de las personas con discapacidad, defensor de la democracia participativa y protagónica en la sociedad, vanguardia política del proceso revolucionario, original y creativo, defensor, impulsor y promotor del poder popular, promotor del desarrollo endógeno, defensor de la igualdad en el seno de la organización, crítico y autocrítico, basado en el principio del centralismo democrático y de dirección colectiva, disciplinado, practicante de la democracia interna en el partido.
El renacimiento implica la re-lectura, el estudio y el refrescamiento de nuestros aprendizajes adquiridos durante la revolución bolivariana y más allá, pero además el renacimiento involucra que nosotros como militantes de la revolución bolivariana nos ubiquemos en la comprobación de los errores que cometimos en el pasado, las equivocaciones o las desviaciones en la realización de la obra o el plan de trabajo. Ese renacimiento debe ser el espejo donde nosotros reconozcamos las faltas de contradecir a alguien que haya cometido un error, modificar los errores propios, corregir las imperfecciones o defectos de algo ya hecho, enmendar los actos y procedimientos equivocados. Es aquí cuando la crítica y la autocrítica debemos ejercerla con cuidado, con inteligencia, con la mayor objetividad posible y el respeto necesario, poniendo siempre por delante el interés de la revolución, del colectivo, del país, del pueblo y no el interés personal, individual y mezquino que, lejos de unir y fortalecer, divide y debilita las fuerzas del pueblo y la revolución.
Revolucionar:
Es muy pertinente empezar con la conocida frase de Fidel Castro: Revolución es sentido del momento histórico, es cambiar todo lo que tenga que ser cambiado, es igualdad y libertad plenas, es ser tratado y tratar a los demás como seres humanos, es emanciparnos por nosotros mismos y con nuestros propios esfuerzos, es desafiar poderosas fuerzas dominantes dentro y fuera del ámbito social y nacional, es defender los valores en los que se cree al precio de cualquier sacrificio, es modestia, desinterés, altruismo, solidaridad y heroísmo; es luchar con audacia, inteligencia y realismo; es no mentir jamás ni violar principios éticos; es convicción profunda de que no existe fuerza en el mundo capaz de aplastar la fuerza de la verdad y las ideas. Revolución es unidad, es independencia, es luchar por nuestros sueños de justicia para Cuba y para el mundo, que es la base de nuestro patriotismo, nuestro socialismo y nuestro internacionalismo.
Revolucionar implica ejercer de manera permanente, la vigilancia y el seguimiento crítico de los planes y políticas del gobierno, del partido y del trabajo social con las comunidades, desde las organizaciones del Poder Popular. Ver con suma atención y cuidado; someter el plan, la obra, los recursos o el presupuesto a nuevos y permanentes exámenes para corregir, enmendar o reparar todo lo que sea necesario para asegurarse y garantizar que todo se realice tal como ha sido pensado y diseñado originalmente en sus objetivos y procedimientos metódicos. Por eso, La Revolución es permanente y equivale a vigilancia y control para que todo se haga bien en la cantidad prevista y sobre todo en la calidad necesaria.
Revolucionar implica instituir el Autogobierno Comunal para la toma de decisiones mediante la participación y protagonismo del pueblo, que su objetivo primordial sea la destrucción del Estado capitalista y construir el Estado socialista, a partir del ideario bolivariano, robinsoniano y zamorano, enalteciendo el estado de conciencia en las decisiones gracias a la formación del hombre nuevo.
Revolucionar implica la autogestión, la auto-sustentabilidad y auto-sostenibilidad, el desarrollo comunitario a través de empresas de producción social, de cooperativas con visión socialista, desarrollando el proyecto socio-productivo enmarcado en el Proyecto Nacional Simón Bolívar (2019-2025).
Revolucionar implica es garantizarle al pueblo la suprema felicidad social, es decir, vivir bien. Es desarrollar una reglamentación de igualdad para poder progresar en el proceso revolucionario, donde las instituciones sean acompañantes, aliados estratégicos y tácticos o en todo caso orientadores para poder avanzar en el proceso de construcción, sin imponer normas, sin burocratismo y acatando siempre el mandato del pueblo.
"Cada uno de nosotros debería dedicarle, unas dos horas diarias al estudio, no menos de dos horas, a la lectura en lo individual, a la reflexión en la soledad —que es necesaria— y también en equipo, en discusión de equipos. Creo que es una obligación para todos nosotros, sobre todo los que tenemos más responsabilidades, los líderes, los diputados, diputadas, los jueces, los magistrados, los fiscales, los gobernantes, los líderes económicos, sociales, religiosos, políticos".
Juramentación del Presidente de la República Bolivariana de Venezuela,
Hugo Chávez Frías (período 2007-2013) Palacio Federal Legislativo. 10 de enero de 2007.
"Cuidado, ojo pelao y oído al tambor. Cuidado con los viejos vicios que andan merodeándonos como zamuros por todas partes".
Discurso con motivo de su toma de posesión como Presidente de la República Bolivariana de Venezuela para el periodo 2000-2006 ante la Asamblea Nacional.