El Proletariado o pueblo fue aplastado en el mundo; la burguesía pelea entre sí, por más dinero y poder
1 En los últimos 25 años del siglo XIX, cuando el imperialismo surgía como "face superior del capitalismo", según Lenin, el estudiosso Marx, creador del marxismo, decía que para acabar o enterrar el capitalismo el proletariado (los obreros de la gran industria) deberían derrocar a la burguesía (los dueños del capital y el poder) Pero con las dos grandes guerras y otras más, las poderosas armas de la burguesía derrotaron al proletariado y lo sometieron para siempre. Desde entonces miles de millones de proletarios, amenazados, reprimidos y asesinados por la burguesía, jamás levantaron la cabeza, como hasta hoy.
2. Marx demostró siempre que en el capitalismo sólo había dos clases sociales antagónicas, porque una tenía que eliminar a la otra; aunque existía la clase media que aspiraba por ser burguesa para no caer en la miseria del proletariado. Hoy el presidente López Obrador habla de dos bloques, pero no de la burguesía y el proletariado, sino de dos bloques de la burguesía (los liberales y los conservadores que siempre han pertenecido a la misma familia burguesa que lucha por más dinero y más poder. Aplastado el proletariado a fines del XIX, sólo quedó la burguesía de Juárez, Lerdo y Díaz en pleno dominio del poder y el dinero.
3. En México el proletariado sigue aplastado por todos los partidos, los políticos, la iglesia, los medios de información, el fútbol, el consumismo. En los años sesenta y setenta –por la coyuntura de la época- los ayudamos en las huelgas y en las calles, pero a partir de los ochenta comenzó a derrumbarse. En México en los ochenta la burguesía electoral propagó el pacifismo y la no violencia para asegurar, no poner en peligro, sus capitales y sus robos. El triunfo de la burguesía fue total en el mundo. Parece que el proletariado no se levantará jamás porque el control de las armas, el ejército, los políticos burgueses sigue invicto.
4. A parte que todos los políticos, el 100 por ciento, son corruptos y ladrones, el problema del mundo no es de personas que nacieron corruptas, sino hechas corruptas por el sistema. Yo mismo, en vez de decir que si yo gobernara no sería corrupto, yo digo que sería tan corrupto como todos porque el sistema obliga. Por ello los marxistas y anarquistas consecuentes jamás aceptamos poder alguno. Los que dicen que son de izquierda y están mamando de la ubre de López Obrador son unos farsantes e HP que merecen ser colgados, comenzando por sus jefes. Así que hay dos bloques: unos viejos corruptos y otros jóvenes aprendices muy avanzados
