"La verdad solo se puede encontrar en la realidad." Vladimir Lenin.

A propósito de las elecciones realizadas en nuestro país, el 28 de julio pasado, y por los resultados hasta ahora publicados por el Consejo Nacional Electoral (CNE), se ha generado lo que estaba pronosticado. Nada nuevo, por cierto, en el caso Venezuela.

La figura del fraude se levantó antes de las mismas elecciones. Sólo esto no era posible si ganaba la oposición, pero, como ganó el chavismo, se desataron las pasiones y los consuetudinarios maniqueísmos. De un lado, la derecha que actúa al unísono y la izquierda que se desdibuja.

Aunque el caso Venezuela es emblemático, ese maniqueísmo está presente en cualquier acontecimiento internacional.

¿Cómo actúa la derecha?

Sólo para mencionar un caso. El unipolarismo está atravesado por la lógica del capital y aquí la moral y la ética no están presentes. Su ontología está clara. Aquí impera el pensamiento único. Quienes están convencidos de que el desiderátum de la historia es el capital, la explotación del trabajo ajeno, la extracción de la plusvalía, están del lado de los israelís, y allí prevalece la unanimidad.

Igual ocurre con Venezuela. La derecha internacional tiene su ontología clara. Disidencia no existe. Todos y todas en África, Asia, Europa, levantan la figura del fraude y afirman que el ganador de las elecciones de 28 de julio fue el principal candidato de oposición. En el caso de América Latina y El Caribe, la derecha es ciertamente diversa, contradictoria y heterogénea, pero con propósitos y fines muy claro: el capital siempre ha sido lo más importante.

Mientras que para Estados Unidos y otros países latinoamericanos, el mantra ha sido cuestionar la legitimidad del proceso y han reclamado la victoria del abanderado de la extrema derecha, en virtud de conteos paralelos realizados por la oposición; eso sin moral y sin ética.

Han dicho, repiten y repiten que el proclamado triunfo de Maduro no es procedente, porque es producto de un "fraude".

¿Cómo actúa la izquierda?

Pero en la llamada izquierda o progresismo de América Latina y El Caribe la ontología no está muy clara que digamos. Aquí hay de todo.

Veamos

Haciendo uso de la "diplomacia de micrófono", sin respeto alguno por el principio de soberanía e independencia de los estados, los presidentes Petro y Lula proponen un "gobierno de cohabitación transitorio y nuevas elecciones libres" en Venezuela.

En el caso de Luiz Inácio Lula da Silva, al referirse a las elecciones venezolanas, dijo que "hasta ahora" no se sabe quién ganó los comicios porque no se divulgaron las actas y no se ha podido verificar el resultado de forma independiente y afirmó que el presidente venezolano, Nicolás Maduro, quien fue proclamado vencedor por el Consejo Nacional Electoral (CNE), "sabe que está debiendo una explicación a todo el mundo".

Agregó: "Maduro tiene seis meses de mandato. Si tiene sentido común, incluso podría convocar unas nuevas elecciones, creando un comité electoral con miembros de la oposición y observadores del mundo entero".

Por su parte, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, estimó que su homólogo es quien puede plantear una estrategia "que lleve paz y prosperidad a su pueblo" y puso en manos de su par venezolano, Nicolás Maduro, la "solución política" para el país vecino, que lleve "paz y prosperidad a su pueblo".

De Nicolás Maduro depende una solución política para Venezuela que lleve paz y prosperidad a su pueblo. La experiencia del Frente Nacional colombiano es una experiencia que usada transitoriamente puede ayudar a la solución definitiva.

Casi en la misma línea, lo hizo la expresidenta Cristina Fernández, quien dijo: "Le pido, no solamente por el pueblo venezolano, por la oposición, la democracia, [sino] por el propio legado de Hugo Chávez, que publiquen las actas".

Esas posturas para nada hacen consideraciones sobre el masivo ataque cibernético sufrido por las plataformas de transmisión del CNE. Tampoco comentan sobre el pronunciamiento que debe hacer la Sala Electoral del Tribunal Supremo de Justicia, que tiene, en su poder, todas las actas presentadas por el CNE y las organizaciones políticas y habrá que esperar que esa máxima instancia judicial comunique su decisión.

Los presidentes Lula y Petro dan por cierto que hubo fraude en las elecciones venezolanas y prácticamente se alinean con la postura del presidente Joe Biden, quien manifiesta su respaldo a la propuesta de ambos presidentes sudamericanos y apoya la realización de nuevas elecciones en Venezuela.

Pero hay quienes, si tienen ontología y, sobre todo, dignidad. Por ejemplo, el presidente mexicano Andrés Manuel López, también se pronunció, dijo y reiteró que esperará el veredicto final de las autoridades electorales venezolanas antes de adoptar una decisión.

En el mismo sentido deben resaltarse los comunicados de los movimientos de mujeres afiliados a la Federación Democrática Internacional de Mujeres, organización con presencia en todos los continentes. Tanto la Federación internacional como las organizaciones de la FDIM en Venezuela, fijaron posición en defensa de la soberanía venezolana y en rechazo a las actuaciones de grupos de extrema derecha en su intención de desestabilizar el país. Organizaciones de mujeres de diversos países afiliadas a la FDIM participaron como veedores internacionales y dieron fe de la normalidad de la jornada electoral.

Así mismo expresan su preocupación por las declaraciones de los presidentes de Colombia y Brasil que califican como un acto de injerencia.
Los movimientos de mujeres en el mundo ratifican su solidaridad con el pueblo venezolano en su lucha por la paz y la soberanía.

Conclusiones

1.Importante a destacar, como mensaje para estos gobernantes, que dicen ser de izquierda, para algunos funcionarios y para los opinólogos, que, dos meses y medio después de las elecciones, las seis magistraturas de la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (Tepjf) de México coincidieron en que es infundada la nulidad de la elección presidencial, pues la oposición no aportó pruebas suficientes para acreditar las irregularidades y se confirmó el triunfo de Claudia Sheinbaum en la elección presidencial mexicana.

Dicha Sala informó que las impugnaciones interpuestas para anular la elección presidencial del pasado 2 de junio de 2024 fueron desestimadas, con lo que se confirma el triunfo de la candidata del movimiento Morena.

2.Dejamos la siguiente interrogante para el debate. Mientras la derecha tiene su ontología clara y actúa de forma casi unánime, en todo el mundo, ¿qué pasa con la llamada izquierda o el progresismo de esta zona del mundo, que la ontología la tiene perdida? ¿La invade el realismo, el pragmatismo o es entrega?

3. Last but not least, esto es, por último, pero no menos importante, necesario es hacer una revisión de la gestión diplomática de Venezuela que se está desarrollando en aquellos países gobernados por presidentes que dicen ser progresistas y/o de izquierda y también en la atención que se hace, nacionalmente, a las representaciones diplomática de esos países.

*Sociólogo. Doctor en Ciencias Sociales. Profesor Titular jubilado, ex director de la Escuela de Estudios Internacionales de la UCV y analista nacional e internacional.