Ya el pueblo bolivariano está al tanto: uno de sus más importantes compromisos es, aprender (sin h), amando su revolución, perseverando como los escolares, alegre, despierto, inquieto, curioso. Presto a aprehender (con h) sagaz, certero y firme, implacable cazador, un gavilán (un kuyawisi en guahibo), atrapando conocimientos para incrementar sus saberes.
Lo intenso del proceso va desnudando desde adentro, la pasión por el cambio, en agraciada correspondencia entre el pueblo, el líder sin discusión “El Comandante Chávez”, la comunidad y viceversa. Sortilegio que al ser interpretado y respetado en su esencia, hizo que se alcanzaran, en muy corto tiempo, niveles de conciencia que sorprenden, especialmente a los más cultos y eruditos del planeta civilizado y del no civilizado también.
Rechazar una mala fuente es tan importante como aprovechar una buena, alguno de los señalados, elegidos , autodeterminados o escogidos, al describir o al ser segmentos en la historia, deben tenerlo muy presente pues corren el riesgo de quedar inalcanzables o fuera de la misma, “que no es lo mismo pero es igual”. Tengamos siempre presente, exista cual principio convertido en repetición; casi mántrico: “El diálogo de saberes”. “El diálogo de saberes”. “El diálogo de saberes” ¿Cuál es el miedo?
Se pierde lo programado, que el horario establecido, que no se aprovecha como es, que se hace tarde, que sino se descuadra, que en los países desarrollados hay orden y debemos observar el ejemplo, que los invitados……. y desde el panel un erudito de la ley(invitado), diciendo que aquí no han hecho consultivo, ni revocatorio tal como lo establece la Constitución, que las normas no deben ser redactadas a escondidas y uno se la tiene que calar, porque se rompe el marco, porque se agotó el tiempo de preguntas? , Pues le dije que ese era el eslogan de la oposición. Volvió a decir lo mismo con otras palabras y se acabó la conferencia………al día siguiente la estudiante o la ama de casa que defendieron su derecho a expresarse pese al moderador, parte de las ponentes y algunas miradas estiradas de algunos presentes…..
Sería ingrato de mi parte si no reconozco la valía del evento, no quiero echarle tierra a nadie, coordinar algo así es complejo, complicado, tiene muchos imponderables. Además de tiempo quise tener el don de la ubicuidad (estar a la vez en distintas partes), eran muy buenos los temas y los ponentes, los felicito de veras, pero si el pueblo avanza ¿Por que los eventos no le agarran el ritmo y avanzan también?
La revolución es sorpresa, es asimétrica, creativa, no es inarrugable ni sanforizada, es decir: se estira se encoje, se plancha y se cose cuanto y como sea necesario para poder incluir, incluir, incluir (segundo mantra), si ustedes son flexibles, nosotros también podemos serlo ¿Cuál es el miedo? Que cosa la del indio(a) sin gracia. Perdón la idiosincrasia (naturaleza).
Cuanto más cerca se ponga y mientras más preparado sea el interlocutor(a) más hay que preguntarle, este pueblo lo sabe. Entonces se le debe encontrar tiempo, aunque sean minutos a la preguntona ó al preguntón, a la espontánea ó al espontáneo, al estudiante(a), a la revirosa ó al reviroso, a la nerviosa o al nervioso de los eventos. Sin dudas, ahí ocurrirá algo interesante, si se salió del marco, saque la casta, quizás pueda ser hasta trascendente con el diálogo de saberes. Tratemos a ver que pasa. La próxima caimanera que sea en el poliedro, en el nuevo Circo, en los estadios nuevos, o en los restaurados, con invitados de lujo, quien dijo miedo.
El soberano al prepararse, cada vez necesitará más espacios para dirimir las contradicciones, ratificar los aciertos ambos serán numerosos, el pueblo requiere expresar sus ideales, impresiones, los sentimientos, las inquietudes, participar, participar, participar (tercer mantra) ¿Cuál es el miedo? Yo soy feo pero decente, decía Carlitos cada vez que le ponían trabas, de esas que no le permitía ser. Rompamos el marco. ¿Quién ha visto negro como yo? Nosotros también sabemos ser encumbrados.
Cuando quieran un modelo de cómo comportarse, les aseguro que el bravo pueblo bolivariano de Venezuela, sabrá hacer lo que tiene que hacer sin dudas. ¿Todavía no me creen?
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