Hace muy poco tiempo, una apreciada socialista, me planteo su preocupación por considerar “innecesario que hayan discusiones que rompen la camaradería que debe existir en la organización”, se mostró molesta porque se discutan algunas divergencias ideológicas y operativas “que pudiesen dañar la imagen del partido ante sus enemigos tradicionales (..) Nuestro partido y nuestro gobierno lo que requiere es marchar unidos, debemos resaltar todo lo bueno que hace nuestro presidente y el resto del ejecutivo nacional, no estamos para discusiones y acusaciones estériles que a nada llegan..”
Estuve a punto de retirarme de la conversación, sin embargo, reflexioné, y le solicité que me escuchara con atención, requerimiento que aceptó y me permitió progresivamente explicarle el punto de vista de importantes cuadros militantes, sobre su polémica propuesta, la cual es parcialmente válida, pero que existen aspectos más de fondo que ameritan ser conocidos por el colectivo revolucionario, para entender la necesidad y obligación de generar en la organización y en algunos casos en la calle, un debate permanente sobre todos aquellos aspectos teóricos y prácticos del proceso, que pudiesen estar siendo ignorados u orientados por unos pocos, en dirección contraria a la democracia socialista que requiere Venezuela y el resto del mundo.
Comencé por reconocer, que en este siglo XXI, viene repuntado con relativo éxito, la transición hacia una sociedad socialista en algunos países de América Latina, entre los cuales Venezuela, combate por lograr la segunda independencia, plena libertad, justicia, equidad, solidaridad y la paz necesaria para avanzar por las alamedas del triunfo y de unión continental. Es indudable que las políticas de corte nacional e internacional, en un alto porcentaje son correctas; nuestros líderes y la militancia en su mayoría venimos haciendo esfuerzos importantes por salir del viejo esquema capitalista, y pasar al menos, a una etapa de transición consolidada que facilite en un mediano plazo, alcanzar la sociedad socialista que se aspira lograr.
En este orden de ideas, se tiene claro que la ideología, políticas y estrategias de corte revolucionario son las que marcan el rumbo a seguir por la mayoría de los dirigentes y militantes del proceso de cambio inaugurado en Venezuela desde el año 1999, sin embargo, vemos con preocupación que después de diez años, la contrarrevolución pro imperialista controla (Vía electoral y de hecho) importantes zonas geopolíticas del país aupadas por los dictados del Dpto. de Estado. También es evidente, que en las principales ciudades del país, hay un significativo malestar en la población progresista, lo cual limita sustancialmente el crecimiento del movimiento revolucionario, y adicional, amenaza con su indiferencia, apartarse del sentimiento patriótico que presuntamente los acompañó.
Recordemos, se han producido grandes intentos por construir el socialismo: Chile, República Dominicana, la URSS, Europa Oriental, África etc. En consecuencia, conocidos los fracasos, no parece descabellado entonces, que examinemos y busquemos con descarnada sinceridad y ánimo constructivo, las causas y consecuencias de nuestros errores, omisiones y torpezas en la conducción del gobierno y del proceso revolucionario. El propio Cte. Presidente Chávez, nos alerta:
Me consumo y me consumiré gustosamente al servicio del pueblo sufriente (..) quiero que nos consagremos en la lucha contra la inseguridad y la corrupción (15.02.09)Hay que combatir el caudillismo regional. Eso hace daño, que vengan, se rodeen de incondicionales y sobre la esperanza del pueblo crear proyectos particulares (03.05.2009)
El verdadero objetivo de los revolucionarios es lograr un país donde por lo menos el 80 % de su población mayor de 15 años, tenga una conciencia socialista a prueba de cualquier propuesta o agresión contrarrevolucionaria. Seguir ganando elecciones con no más del 60 % de los votos válidos, es necesario, pero no suficiente para consolidar el proceso de transición hacia el socialismo. Dejar crecer ideas erróneas que intenten ocultar el sol con un dedo, podría conducirnos más temprano que tarde, a situaciones políticas, económicas, sociales y militares de incalculables consecuencias.
Ante tan inestable situación, cabría preguntar: ¿Qué factores y actitudes pudiesen estar influyendo para que esto suceda? ¿Es la crítica y la autocrítica la responsable de la relativa recuperación de los apátridas? ¿Se tiene claro cuáles son los principios y programas de lucha que deben acompañarnos para ir al encuentro del socialismo? ¿Hemos aprendido de las múltiples deserciones que se han venido dando en el proceso revolucionario desde el año 2000 hasta la presente fecha? ¿Estamos en capacidad de distinguir con claridad y rapidez los objetivos, estrategias y tácticas de la contrarrevolución abierta o de los que con una careta roja rojita, luchan internamente por desviar el curso del proceso de cambio y servir directa o indirectamente a los planes del enemigo? ¿Es la quinta Columna un fenómeno comprensible por la mayoría del colectivo de los partidos de izquierda o es un mal que silenciosamente corroe a estas organizaciones sin que casi nadie se percate? ¿Alguien recuerda las miles de advertencias sobre el deterioro de la Europa Oriental y de la URSS? ¿Es irreversible minimizar esta terrífica amenaza?
Para responder a las anteriores interrogantes, partiremos de algunas elementales premisas:
· Los objetivos que persigue la lucha revolucionaria, es lograr una sociedad con un alto grado de conciencia sobre la necesidad de compartir espiritual y materialmente todo lo que sea generado por ella. Las relaciones que se establezcan entre la gente deben ser de igualdad, fraternidad, colaboración, solidaridad y compromiso por hacer desarrollar las fuerzas productivas, poseídas por el colectivo y a su efectivo servicio y beneficio. Lograr ser libre del tutelaje imperial y alcanzar la soberanía plena, es un anhelo fundamental que debe ir asociado a la democratización efectiva de la toma de decisiones por las grandes mayorías, para lo cual es indispensable que se alcance un estado de creatividad e innovación permanente. Se trata de romper con todo lo negativo del pasado y sobre sus ruinas construir un mundo mejor. Acceder a una sociedad donde haya una altísima moral socialista, vale decir, impregnada de valores y conductas que apunten al bien común y honestidad a toda prueba, es una posición emblemática de insoslayable logro.
· Las estrategias mínimas que deben acompañar a toda lucha revolucionaria se resumen en a) permanente educación y formación ideológica socialista, para lo cual es necesario mejorar las relaciones de producción toda vez que son ellas las que tocan la conciencia de cada trabajador, esto sin menoscabo que paralelamente se eleve el nivel de las fuerzas productivas, armonía que debe conducir a que el colectivo nacional participe en la toma de decisiones fundamentales y en todos los niveles del partido y del gobierno bolivariano. b) Creación y desarrollo de cuadros de dirección capacitados y estimulados para ir al encuentro permanente con las masas trabajadoras c) Generación de organizaciones articuladas estructural y funcionalmente, especialmente para la transformación de la normativa legal y judicial que la haga cónsona con los ideales socialistas d) Ejecución de acciones gubernamentales ajustadas a los principios y programas que rigen el modelo de socialismo que se intenta implantar, especialmente orientar las relaciones de intercambio hacia el valor de uso y no el valor de mercado e) Combatir la especulación y la acumulación de las riquezas en pocas manos, mediante leyes aduaneras y tributarias que obliguen al factor capital a contribuir sustancialmente con las cargas del Estado. f)Estimular la educación y formación permanente de los militantes en la defensa a través de la Milicia g) Luchar por la socialización de los medios de producción, la liberación de los trabajadores, combatir las privatizaciones g) Ejercer un control y evaluación sobre las ejecutorias del partido y otras organizaciones revolucionarias, así como de los entes gubernamentales h) Generar acciones permanentes y sostenidas en solidaridad con todos los movimientos populares y gobiernos de tendencia revolucionaria i) Estimular la lucha de clases para lograr que los trabajadores derroten sin contemplación a la burguesía, en otras palabras, prepararse diariamente contra una supuesta instauración del socialismo mediante la colaboración de clases y el mantenimiento de las relaciones capitalistas de producción indefinidas J) Luchar porque sea el colectivo quien decida sobre el uso de los medios de producción y sobre el disfrute equitativo e igualitario de lo que se produce. Conseguir que la conciencia social dependa de un ser social liberado del concepto de propiedad privada de los medios de producción k) Generar políticas y acciones concretas contra el narcotráfico y todos aquellos mecanismos de enriquecimiento de ilícita factura.
· Los objetivos que persigue la contrarrevolución son: Lograr mantener la dominación de las clases poderosamente ricas contra las mayorías desposeídas, custodiando y protegiendo toda la herencia nefasta del pasado. Justificar la sociedad dividida en clases y castas, donde las minorías conserven la mayor libertad para enriquecerse y ejercer su dominio. Estimular el individualismo y el predominio de los grupos oligárquicos, en detrimento de la solidaridad colectiva. Apoyar el colonialismo, la monarquía y el imperialismo. Institucionalizar la democracia representativa y promover la toma de decisiones por medio de élites supuestamente iluminadas que dicen representar a las mayorías.
· Las estrategias típicas que acompañan a la contrarrevolución se resumen: a) Permanente adoctrinamiento neoliberal, donde la posesión de la propiedad privada sobre los medios de producción y la acumulación particular de la riqueza, debe generar una conciencia social egoísta e individualista, la difusión de libros y programas televisivos de autoayuda son parte de esta estrategia b) Creación y desarrollo de cuadros de dirección para luchar contra el socialismo y el marxismo, con énfasis en un modo de intercambio donde el valor de mercado prevalece sobre el valor de uso de las mercancías c) Generación de organizaciones articuladas estructural y funcionalmente al servicio del mediano y gran capital, donde sin ningún escrúpulo, se hace corrupción y se comercia con drogas en complicidad con los infiltrados en las organizaciones revolucionarias d) Ejecución de acciones gubernamentales ajustadas a los principios y programas que rigen el modelo neoliberal e) Educación y formación permanente de los militantes en campo militar neofascista g) Acción sostenida para maximizar la ganancia capitalista, mediante las privatizaciones, outsourcing y cualquier otro medio similar g) Control y evaluación continua de las ejecutorias de organizaciones contrarrevolucionarias, así como de los entes gubernamentales a cargo de militantes y simpatizantes de tendencia neoliberal-fascista h) Realización de múltiples acciones en el campo internacional en apoyo a los gobiernos y empresas capitalistas del mundo, con el soporte de la CIA, paramilitares y de otros variados frentes o grupos quintacolumnistas que logran crear o infiltrar en las organizaciones revolucionarias de cada país.
No sólo en las zonas ocupadas, sino también en la Gran Retaguardia, hay tantas organizaciones del Kuomintang marca Wang Ching-wei como árboles en un bosque. Algunas son secretas y forman la quinta columna del enemigo. Otras actúan abiertamente, viven del Kuomintang y del servicio secreto, no hacen nada para resistir al Japón y se especializan en anticomunismo. Aunque no llevan encima la marea Wang Ching-wei, en realidad le pertenecen. También forman parte de la quinta columna del enemigo, sólo que guardan una pequeña diferencia formal para disfrazarse y confundir a la gente (Mao Zedong. Obras Escogidas. Tomo III, pag. 123)
Puntualizados a grosso modo, los objetivos y estrategias esenciales del socialismo y del capitalismo, se nos hace ahora, más viable explicar el porqué es de vida o muerte, valorar el significado ideológico y estratégico de la Quinta columna que se viene organizando y poniendo en contra del socialismo y de los lineamientos del Cte. Chávez.
Es necesario aclarar, que desde nuestro punto de vista político, un empresario capitalista venezolano, uruguayo, de USA o de cualquier otro país, así como los políticos y dueños de medios de comunicación que siguen la corriente neoliberal, cuando actúan abiertamente, sus estrategias capitalistas las diseñan independientemente de su país de origen o al menos son similares; definitivamente estos son enemigos reales o potenciales del socialismo que no deben ser confundidos con la “Quinta columna”, toda vez esta no actúa abiertamente, salvo contadas excepciones, sino que lo hace silenciosamente penetrando las instituciones del Estado o las organizaciones revolucionarias y comunales. Este tipo de activista, se hace pasar por revolucionario, pero en el fondo trabaja para la ideología y estrategias de la contrarrevolución. Sus objetivos son también obtener beneficios económicos de cualquier actividad que realizan en el partido, en gobierno o en la comunidad, lo que complementa con alcanzar notoriedad política y/o gremial, donde la lucha de principios no es su problema. Generalmente son gente con un alto sentimiento de inferioridad, corroídos (as) por la envidia y la ambición desmedida.
El tipo de delincuente que venimos describiendo, aparenta ser muy valiente, capaz y trabajador (a), pero en el fondo están lleno miedos y cobardías que no lo (a) dejan actuar ni siquiera en un buen teatro. Evaden la confrontación contra quienes ellos (as) conocen como delincuentes, escuálidos o colegas de ellos (as) mismos (as), es afirmar “Yo no voy a cazar esa pelea con..”, en otras palabras, aunque conocen quien es el enemigo antisocialista, o anticomunista, prefieren evadir el combate. Intentan reflejar una la sensación de su valentía y demostrar que su personalidad está por encima de “esas pequeñeces”. Cuando están en función de algún comando burocrático, estimulan al personal que lo consideran manejable, con prebendas materiales o ascensos, evitando en todo lo posible estímulos ideológicos o morales.
La idiosincrasia de la quinta columna, es comportarse como un ser respetuoso (a) y adulante con sus jefes y muy despreciativo (a) y agresivo (a) contra sus subalternos. A este tipo de espécimen le gusta vestirse de “rojo rojito”, tener chofer, generar comisiones ilícitas, tener retratos en su oficina del Ché, de Fidel, de Chávez y si es posible de Marx y Engels. Lo importante es aparentar que se está con la revolución, pero mientras tanto, se concilia diariamente con los contrarrevolucionarios, se margina a los patria o muerte de los puestos de comando, se hacen negocios ilícitos con empresas enemigas del proceso y con sus socios que actúan desde afuera del organismo donde trabajan.
Muy sutilmente intentan conseguir aliados (as) mediante truculentos juegos donde se puede vender o comprar sexo. Se hacen pasar por amigos (as) de gente preparada, informada y honesta para sacarles información que luego venden como propia y les sirve para maniobrar en aguas que les son poco conocidas. Generalmente evaden las discusiones ideológicas, mucho menos les interesa discutir sobre la corrupción, en todo caso, cuando lo hacen, de una manera muy elegante la justifican así: “Si alguien de nosotros (as) se hubiese cogido algo, eso sería para dárselo al partido, por lo que más bien es un gesto revolucionario (...) Yo si gaste esos reales de la Junta Comunal, pero quien manda al banco a dármelos”, es decir, de acuerdo esta opinión, habría una corrupción “buena” y otra mala, según sea el tipo de robo. Para esta calaña de “militantes no existe el Peculado de Uso, de allí que si fundasen empresas de maletín y tuviesen que usar bienes del Estado para su lucro personal, muy alegremente dirán que es para ayudar a un compatriota “que está pelando” y así sucesivamente. Pero a su vez, cuando les conviene, afirman que tienen amigos muy ricos y exitosos que les ayudan en sus campañas electorales. Siempre hay una coartada para justificar lo injustificable...El telón de sus picarescas vidas, sube y baja constantemente...
Otra actividad que les trae la atención es su participación en el ámbito internacional. No les preocupa que no sean especialistas o expertos (as), lo importante es que mediante viajes, generalmente financiados por el Estado Venezolano, hacen contactos de todo tipo con gente que también trabaja en la cuerda floja. Si alguien les critica su arribismo, inmediatamente lo justifican diciendo “Si el Dr. fulano ha viajado, porque no lo puedo hacer yo”. Esta labor les resulta muy elegante y les da buenos frutos políticos y financieros. Su afán de lucrarse a como dé lugar, los lleva a tolerar la acción del narcotráfico, para ellos, este “no es su problema” su problema parece ser comportarse como unos verdaderos mercenarios (as).
En conclusión, ha quedado claro cuáles son las orientaciones fundamentales que deben seguir los revolucionarios para alcanzar una sociedad socialista, así como también se ha puesto en evidencia, cuales son las opiniones y prácticas más comunes que adopta la contrarrevolución abierta o soterrada, para mantener su dominación y humillar al pueblo trabajador y combativo. En el caso de la Quinta Columna, esta resulta ser muy peligrosa, toda vez que simula estar con el Comandante. y con el proceso revolucionario. Actúa enmascarada y en algunos casos cuenta con el soporte de dirigentes que han llegado a ocupar importantes cargos partidistas y/o gubernamentales, así sucedió en la URSS, Chile etc. razón por la cual es necesario y urgente estar bien alerta ante sus sinuosos movimientos, entre los que predominan actos de corrupción contra el patrimonio público. ¡Es hora de actuar con prontitud, diferir la lucha pudiese resultar demasiado tarde! Recordemos a nuestro máximo guía, Simón Bolívar “Moral y Luces son Nuestras Primeras Necesidades.. (yovic01@cantv.net/gmail.com)