Caracas, diciembre 8 - Este sábado se conmemora el Día de la Lealtad a Chávez y el amor a la patria, decretado por el presidente Nicolás Maduro en 2013, para refrendar aquel 8 de diciembre de 2012 en el que el Comandante dirigió su última alocución a la nación desde el Palacio de Miraflores. Allí abogó por la unidad de los patriotas y pidió al pueblo venezolano que eligiera a Nicolás Maduro como presidente de la República, en caso de que él quedará imposibilitado para ejercer el cargo.
El presidente Maduro, al comentar la declaratoria del Día de la Lealtad a Chávez, dijo en octubre de 2013, en el Cuartel de la Montaña, que “tenemos que despertarnos con el alma el 8 de diciembre, Día de la Lealtad a Chávez y el amor a la patria, para recordar con amor su despedida”.
Maduro calificó la fecha de “conmovedora” para el país y para el mundo, porque el líder bolivariano tuvo la oportunidad de despedirse de su pueblo antes de partir.
Maduro comentó que el 8 de diciembre de 2012, Chávez informó valientemente a los venezolanos sobre la batalla que iba a emprender por su delicado estado de salud.
“Él tenía un solo objetivo: decirle al pueblo como siempre la verdad. Se encontraba en una situación compleja”, comentó el Mandatario venezolano frente a los milicianos y milicianas que asistieron a la reunión sostenida en el Cuartel de la Montaña.
Como la luna llena
Una relación de aquel momento dramático del 8 de diciembre de 2012, reseñada en un escrito del PSUV, detalla que Chávez pronunció por última vez un discurso al país, el cual dejó una huella imborrable en el corazón de todos los patriotas por aquellas palabras conmovedoras que expresaban su grandeza, su condición de revolucionario, estadista y humanista. Desde allí orientó, cual líder y político, a todo el pueblo venezolano, en un momento tan difícil para toda la patria: “Mi opinión firme, plena como la luna llena, irrevocable, absoluta, total, es que ustedes elijan a Nicolás Maduro como presidente de la República Bolivariana de Venezuela. Yo se los pido desde mi corazón”. Orientación que el pueblo cumplió con lealtad.
En el marco de una compleja enfermedad como el cáncer, y después de someterse a largos y rigurosos tratamientos médicos durante dos años en los que no dejó de cumplir sus responsabilidades como Primer Mandatario de la República, asumió una intensa campaña electoral en la que recorrió, sin parar en dos meses, todos los rincones de la patria, para resultar victorioso de manera contundente el 7 de octubre de 2012. Luego el comandante supremo Hugo Chávez comunica a todo el país la difícil noticia de que su enfermedad ha reaparecido.
El comandante Chávez hizo un balance de las fortalezas de la Revolución alcanzadas durante tantos años de lucha, entre las que resaltó la unidad del pueblo, la unidad de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana, la concreción de un liderazgo colectivo, elementos que permitirían mantener la estabilidad política del país y la continuidad de la Revolución Bolivariana en los próximos años.
“Venezuela ya hoy no es la misma de hace veinte años, de hace cuarenta años. No, no, no. Tenemos un pueblo, tenemos una Fuerza Armada, la unidad nacional. Si en algo debo insistir en este nuevo escenario, en esta nueva batalla, en este nuevo trance (diría un llanero por allá), bueno es fortalecer la unidad nacional, la unidad de todas las fuerzas populares, la unidad de todas las fuerzas revolucionarias, la unidad de toda la Fuerza Armada, mis queridos soldados, camaradas, compañeros. (…) Digo porque los adversarios, los enemigos del país no descasan ni descansarán en la intriga, en tratar de dividir, y sobre todo aprovechando circunstancias como estas…”.
“Entonces, ¿cuál es nuestra respuesta? Unidad, unidad y más unidad. ¡Esa debe ser nuestra divisa!”.
“El Partido Socialista Unido de Venezuela, los partidos aliados, el Gran Polo Patriótico, las corrientes populares revolucionarias, las corrientes nacionalistas. ¡Unidad, unidad, unidad! ¡Unidad!”, expuso.
En un emotivo del discurso destacó que el más preciado bien que hemos rescatado es la patria, recordando a Bolívar y a todas aquellas y aquellos patriotas que entregaron su vida durante más de 200 años, con tantos esfuerzos y sufrimientos para labrar la independencia absoluta. De igual manera, cantó con profunda pasión el himno del Batallón de los Bravos de Apure, cuya música y letra pasaron posteriomente a acompañar los actos y actividades tanto del Gobierno Nacional como de las fuerzas revolucionarias.