Usualmente para los países de nuestro hemisferio, el valor de cambio de referencia de cualquier moneda se expresa como el cociente del circulante monetario de ese país, entre sus reservas internacionales expresada en dólares de los EEUU.
Valor de cambio unidad monetaria por US $ = Circulante interno moneda local / Reservas internacionales dólares
Para conocer entonces el valor de la moneda es necesario conocer ambos valores, circulante interno y reservas internacionales, los cuales cualquier persona puede consultarlo en los boletines del Banco Central emisor. Es menester indicar además que el valor de cambio de una unidad monetaria obedece a la decisión política económica del gobierno de turno. Esta decisión podría ser por ejemplo tomar el valor de referencia anotado y considerar las fluctuaciones de las monedas de los países que compran los productos de ese país, prorrateando el aporte de esas exportaciones en función porcentual del PIB anual del país. Esta decisión ha sido y es esencialmente de política comercial, y normalmente es controlada por las autoridades financieras y gubernamentales a través del Banco Central emisor, para proteger los intereses comerciales nacionales.
No obstante hoy en día se puso de manifiesto una guerra de divisas producto del desajuste global, debido a su vez a la crisis financiera que inició en los EEUU con las hipotecas. Ese mismo año 2008 arrastró a Europa, Asia, África, Oceanía y el resto de América a los desequilibrios de sus balanzas de pago. Producto de esta situación, el crédito (confianza) interbancario llego a casi no existir en 2008 y todavía en 2010 no ha manifestado recuperación. Los analistas económicos han señalado que el trasfondo de esa crisis financiera mundial ha sido causado por la enorme cantidad de dólares estadounidenses sin respaldo que circulan fuera de los EEUU, y que han sido llamados “dólares rosados”. Entre las principales causas de esa hiperinflación de dólares podemos resaltar las siguientes:
1.- Las ventas a futuro que operan en las Bolsas de Valores, por la especulación bursátil en el precio de las acciones de las empresas y bancos internacionales, especialmente por las variaciones de los llamados “comodities” (materias primas como petróleo, hierro, oro, cobre, chocolate, café, trigo, etc) que fueron afectados por la merma de producción por los incrementos de los costos y bajas demandas.
2.- Las ventas a futuro realizadas mediante el llamado dinero plástico (tarjetas de crédito), que generan circulante sin respaldo.
3.- Los cambios de hora que generan intereses (dinero inorgánico) por el volumen y frecuencia de grandes transacciones que viajan a la velocidad de la luz (transferencias electrónicas) acortando las distancias geográficas de los pagos de materias primas, de productos semielaborados y productos terminados.
4.- El aumento de los precios de la energía por cambios climáticos y la incidencia en el transporte desde los centros de producción hasta los consumidores.
4.- La caída del dólar de los EEUU como consecuencia de sus políticas económicas que persiguen ofrecer los productos estadounidenses a más bajo precio para realizar el “dumping” a los productos de los países competidores para así aumentar las ventas de firmas estadounidenses en detrimento de la producción interna de los países. Se incluyen también los subsidios gubernamentales estadounidenses disfrazados con el nombre de estímulos a la producción.
5.- La enorme ambición de ganar más a los productos que produce China, y que remarcan precios con la excusa del uso de exclusividad de marcas que los EEUU venden a través de sus empresas trasnacionales para distribuirlos por el mundo. Este punto es el más importante, porque China produce mucho, muy barato y para todas las marcas. Hoy por hoy aproximadamente el 77% de los productos que consumen y vende los EEUU son hechos en China a precios oscilantes entre 1/10 a 1/100 del precio de compra a China.
6.- La pérdida de capacidad adquisitiva de los países con grandes deudas externas, han ocasionado la contracción en la producción y por ende el desempleo en los países industrializados, especialmente en los EEUU. Esto ha ocasionado una profunda recesión interna que ha repercutido en quiebras de bancos, fábricas y comercios.
Pocos saben cuanto ha caído el dólar a nivel mundial. Si observamos el cambio de dólares a yuanes (moneda China), comprobamos que se ha mantenido invariable los últimos años. Al subir el dólar de igual forma sube el yuan. Al bajar el dólar igualmente baja el yuan. Lo mismo ocurre en menor cuantía entre el dólar y el euro, y entre el dólar y el yen. Para conocer la verdadera caída mundial del dólar los últimos 10 años, tenemos que referirnos al valor del oro, aunque después de el acuerdo de Bretton Woods se haya eliminado el patrón oro como respaldo a las monedas del mundo.
En el año 2000 por ejemplo el valor de la onza troy de oro era de US 300 aproximadamente. En el presente año 2010 el valor de la onza troy de oro está alrededor de los US $ 2500. Si dividimos 2500 entre 300, tenemos que el dólar de los EEUU ha caído más del 800% en una década. Por esta razón ha aumentado la demanda mundial de ese áurico metal, para cada quién proteger sus ahorros de la caída de la divisa dólar. Claro, todas las demás divisas del mundo por decisión política y económica de cada país emisor de monedas fuertes (divisas) han seguido al dólar en su caída, en proporciones similares. Por ejemplo, el euro se ha mantenido en 10 años casi igual al dólar con fluctuaciones no mayores del 40%, muy lejos del 800% de caída real del dólar estadounidense y de las demás divisas con las que opera el mercado mundial.
Recientemente los EEUU propusieron una nueva moneda (divisa mundial) para sustituir a su devaluado dólar en el comercio mundial. Esa nueva moneda fue bautizada con el nombre de “amero”. Pero su implantación no ha obtenido consenso, porque existe el peligro que al hacerlo se castiguen severamente las reservas internacionales que muchos países del mundo las tienen en dólares. Este es un ardid fallido de EEUU para obviar su enorme déficit interno y externo, transfiriendo sus pérdidas a quienes todavía confían en el dólar como patrón comercial internacional. De hecho muchos países han desincorporado el dólar en sus transacciones comerciales y financieras, ocasionando la guerra de divisas mencionada.
Como estrategia salvadora y desesperada, los EEUU han presionado a China para que revalúen el yuan. Pero los chinos no son tontos, porque al ser los primeros acreedores de los EEUU, quienes de lograr la revaluación del yuan reducirían su deuda externa a China que monta a casi 6 millones de millones de dólares. Esta enorme deuda es de hecho impagable por EEUU en la actualidad, y para honrarla necesitarían por lo menos 30 años de duro esfuerzo para crecer su PIB. Además China es poseedor de las mayores reservas de dólares (yuanes) líquidos del planeta. Se estima aproximadamente en 2,4 MMM US $, porque China ha alcanzado en los últimos 10 años un crecimiento continuo del PIB en torno al 10% interanual. No se puede olvidar que China le prestó 750.000 millones de dólares a China quienes otorgaron ese préstamo a los EEUU en tres desembolsos, cada uno de 250.000 millones, tanto a la administración Bush para aplacar su déficit interno en 2008 como a la administración Obama en el 2010. Esa enorme cantidad de dinero le duró a EEUU el tiempo de permanencia de una flatulencia en un chinchorro. Recientemente la administración Obama solicitó a China más dinero prestado por su severa contracción económica. En el caso de ambas administraciones, de Bush y Obama, los Chinos exigieron como garantía para esos préstamos Bonos del Tesoro Estadounidense.
Hoy por hoy China es la primera potencia económica industrial del mundo y eso es porque los estadounidenses tienen una profunda recesión interna mayor que la de 1929. Por tanto no venden sus productos por la pérdida de capacidad de compra de los países endeudados. El desempleo por la recesión está en el órden del 10% sin poder reducirla a pesar de la baja de la “prime rate” casi a cero. Hace un año China amenazó en salir a vender de 850.000 millones en Bonos del Tesoro que tienen en su poder. En caso de seguir insistiendo EEUU la revaluación del yuan, China ejercerá así su poder económico para terminar de eliminar el dólar como moneda referencia en el comercio internacional. Si venden apresuradamente los Bonos del Tesoro estadounidense ocasionarían la caída estrepitosa del valor del dólar aproximadamente en 5000%. Esta amenaza produciría la “quiebra” fehaciente de la supremacía del dólar, arrastrando así a muchas naciones a poner en peligro sus reservas en dólares. Mientras tanto China ubicó la merma de compra del 40% de su producción industrial en su mercado interno, con los mismos bajos precios que ellos les vendían a los EEUU. Es por eso que el PIB chino prosigue su crecimiento del PIB interanual en el 8 al 10%, como si nada hubiera pasado en relación a la crisis financiera mundial.
En el caso venezolano, por ser un país petrolero con las mayores reservas de petróleo y 5to del mundo con reservas de gas, ha sido blanco de una guerra económica contra Venezuela, patética por la inflación especulativa de los poderosos grupos privados venezolanos, que apoyan las políticas económicas de EEUU (esto da vergüenza decirlo pero es verdad). Hoy Venezuela sufre una inflación artificial y especulativa del 30% anual sin haber razón para ello, solo por ser víctima de esa guerra económica desde EEUU para tratar de sacar el gobierno actual el cual se declaró anti imperialista. Venezuela ha actuado soberanamente para obtener su independencia económica petrolera. Los grupos de esa 5ta columna interna han estado propiciando fallidamente nuevas devaluaciones. Menos mal que no hay devaluación del bolívar en 2011 como esos grupos económicos aspiraban.
Como puede ver amigos lectores, el cambio de una moneda es algo complejo. Pido a Dios que no reviente la burbuja plástica (tarjetas de crédito) que en los EEUU significa una deuda bestial y que ocasionaría una brusca caída del PIB interno de ese país, en más del 30%. En la actualidad cada norteamericano cuando muere deja en promedio de deuda de 5 años, que hasta ahora ha absorvido sin problemas el sistema capitalista interno. Si la burbuja plástica revienta, la debacle financiera estadounidense sería terrible. Creo que los grandes bancos internacionales a través del FMI tienen un acuerdo tácito para mantener esa burbuja controlada, sin levantar mucho polvo. Pero eso no quiere decir que no siga aumentando, y es debido a la crisis de desempleo y aumento de los impuestos.
Alguna vez propuse a los bancos del mundo, desde mi humilde tribuna, instaurar la hora oficial Internet igual para todos los países, para así evitar el incremento de dinero inorgánico (sin respaldo) generado por las transferencias electrónicas a grandes capitales y a grandes distancias. Pues bien, a los bancos no les conviene eso y así lo manifestaron calladamente. Me imagino me dijeron loco o quién sabe que otro repulsivo adjetivo, porque de esta manera pueril desacreditan una propuesta real y verdadera para la disminuir la hiperinflación mundial.
Ojala les puedan servir estos comentarios del cambio de las monedas locales versus el dólar, para así entender las razones de la crisis actual mundial. Finalmente quiero significarr que soy solo un ingeniero civil de 41 años de ejercicio, que incursionó como autodidacta en la macroeconomía. Por tanto opino como simple ciudadano sin credenciales de economista. Los conceptos expresados en este articulo es simplemente mi opinión personal, que aspira aclarar lo que muchos afectados no quieren que se diga. Siempre he pensado que la Economía es demasiado importante para dejársela solo a los economistas. Saludos cordiales y Feliz Año 2011.
(*) Ingeniero Civil, M.Sc. – CIV No. 8.511
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