Las últimas horas, hemos sido testigos de una rebelión contra el gobierno de Vladimir Putin, en Rusia; según fuentes oficiales del gobierno Ruso, por parte del "Grupo Wagner" (en ruso: Группа Вагнера, romanizado: Gruppa Vagnera), también llamado PMC Wagner, ChVK Wagner, CHVK Vagner o simplemente Wagner, la cual es una organización paramilitar de origen ruso.
Según los medios internacionales, el Grupo Wagner, es un cuerpo de mercenarios de Rusia en Ucrania, operando también Siria y otros países.
El grupo Wagner, planteó este sábado, un claro desafío al presidente de Rusia, liderado por su jefe, Yevgeny Prigozhin, este ejército privado se adentró en Rusia desde su campamento base en Ucrania, donde se apoderó de las instalaciones militares de la ciudad de Rostov del Don, en el suroeste del país, y avanzó hacia Moscú, llegando a estar a 200 km de la capital rusa.
Las acciones de Prigozhin despertaron la furia del presidente Putin, quien calificó los movimientos del grupo como "una puñalada por la espalda" y se comprometió a castigar a quienes habían "traicionado" a Rusia.
Tras la mediación del presidente de Bielorrusia, Alexander Lukashenko, el líder del Grupo Wagner anunció la retirada de sus tropas. Todo hace suponer, que siendo estos grupos unos comerciantes de la guerra, lo primero que nos pasa por la mente es que dólares estadounidenses pudiesen estar tras este complot; porque no es fácil enfrentar con un grupo, por grande que sea, al poderoso ejército Ruso; por eso nos pone a imaginarnos muchas cosas que se estarían orquestando para armar una historia de ficción y atacar "justificadamente" al Gobierno Ruso.
Todos conocemos, porque es público, notorio y comunicacional, que los gobiernos de Estados Unidos se valen de grupos mercenarios para invadir territorios extranjeros, donde tienen intereses. En las últimas dos décadas han surgido decenas de compañías de seguridad por todo el mundo que se dedican a trabajar para gobiernos y grandes empresas, proporcionando personal procedente de las fuerzas de seguridad. Algunas de ellas se hicieron famosas por su papel en las guerras de Afganistán e Irak, otras fueron contratadas para intervenir en países donde los gobiernos no se atreven a poner un pie. Criticadas por muchos, que las consideran un peligro para la democracia, sus defensores creen que son necesarias para actuar en escenarios de conflicto donde los ejércitos nacionales no acuden.
Entre las empresas de mercenarios más activas del mundo, se encuentra "Academi (Blackwater)", que es el principal ejército de mercenarios de Estados Unidos. Esta empresa privada de seguridad fue fundada en el año 1997 por Erik Dean Prince y Al Clark para entrenar a marines de Estados Unidos. Su primer encargo fue del gobierno estadounidense para entrenar a cien mil soldados después del ataque al buque USS Cole norteamericano en las costas de Yemen. En 2002 aportó cientos de hombres para apoyar a las Fuerzas Armadas de EE UU en la guerra de Afganistán y más tarde en la de Irak. Blackwater aseguraba ser "la más completa compañía de militares profesionales para tareas de refuerzo de la ley, seguridad, pacificación y operaciones de estabilidad, en todo el mundo". La empresa actuaba en secreto y apenas se conocía de su existencia, hasta que en 2004, cuatro de sus mercenarios fueron mutilados y sus cuerpos colgados de un puente en Faluya.
En 2007 se supo que la empresa había sido responsable del asesinato de 17 civiles en una operación en Irak. También trabajó al servicio de la CIA en detenciones extrajudiciales, siempre bajo el paraguas de la inmunidad concedida por Estados Unidos. Sumida en varios escándalos, la empresa cambió de nombre en 2009 y finalmente acabó llamándose Academi. En los últimos años trascendió que Prince, fuera de la compañía, había planeado formar un ejército de mercenarios para actuar en Venezuela para derribar a Nicolás Maduro; situación que los venezolanos recordamos con mucho orgullo, porque nuestra unidad cívico-militar sorprendió infraganti a los mercenarios, y desarticularon su plan de golpe de estado o asesinato del Presidente Maduro y de otros altos funcionarios del Estado venezolano.
Otras empresas de este tipo, norteamericanas, son: Defion Internacional: Se dedica a reclutar contratistas latinoamericanos para operar en diferentes países. En la guerra de Irán envió a 3.000 peruanos y ecuatorianos para tareas de protección o de guerra sucia por un salario de 1.000 dólares.
Triple Canopy: En 2004 participó en la guerra de Irak para proteger a las tropas aliadas destacadas en la zona. También ha trabajado en el Golfo de Adén en operaciones antipiratería y en la frontera con México.
Garda World: Esta compañía canadiense es una de las empresas de seguridad del mundo con un ejército de hombres formado por antiguas fuerzas especiales británicas y otros soldados de élite. En 2013, Garda estableció operaciones en Nigeria para proporcionar "apoyo logístico" a las empresas petroleras internacionales. También participó en el conflicto de Libia. seis semanas antes de que Gaddafi fuera asesinado; "casualmente".
G4S Secure Solutions: Es una multinacional de servicios de seguridad británica con sede en Crawley, en Reino Unido. Es la mayor empresa de seguridad del mundo por ingresos y lleva a cabo operaciones en unos 125 países.
Estos, son parte de los tentáculos, que mueven los gobiernos norteamericanos para controlar o arrodillar otras naciones; pero sabemos que Putin, debe estar analizando el ajedrez, y sabrá cómo actuar en los años venideros, tanto dentro de su estructura interna, como contra el asedio de gobiernos extranjeros.