Luego de años de conflictos, pareciera estar el "hijo de Dios" en el centro de la discordia. La ciudad de Jerusalén ha sido uno de los territorios más ferozmente disputados del mundo. Jerusalén occidental es la sede del gobierno de Israel, y los palestinos consideran a Jerusalén oriental como la capital de su futuro Estado.

Jesucristo recorrió los caminos de Palestina, sanando a los enfermos, haciendo que los ciegos vieran y levantando a los muertos; al igual que lo hizo hasta donde sus pasos lo llevaron.

Los judíos creen que Jesucristo no cumplió las profecías mesiánicas que establecen los criterios para la venida del mesías. El judaísmo rechaza a Jesús como Dios, ser divino, intermediario entre los humanos y Dios, mesías o santo.

En este contexto, recordamos, en el año 2017, a pocos meses de comenzar su mandato, Donald Trump como presidente de Estados Unidos, anunció públicamente, que reconocía a Jerusalén como la capital de Israel. Situación ésta que provocó condenas de líderes palestinos y grupos musulmanes que convocaron a tres días de "indignación popular".

Estados Unidos se convirtió así en el primer país que reconoce a Jerusalén como la capital oficial de Israel desde la fundación del Estado de Israel en 1948.

Ahora, estamos ante un conflicto, donde pareciera, Palestina está decidida a terminar con el conflicto, aún reconociendo, que puede ser el exterminio total de su población; estando los organismos internacionales manejados por potencias afectas a Israel, que no les importa acabar con todo un pueblo; pero, tenemos también, otras potencias que no deberían quedar inertes ante tales pretensiones macabras.

Pero, desde otra óptica, se afirma, que este es un acto montado o provocado por los mismos israelíes, para acabar con Palestina. El gobierno de Israel estaba al tanto, a través de sus organismos de inteligencia, catalogados entre los mejores del mundo, sobre el atentado "presuntamente provocado por Hamás"; del cual debían tener conocimiento, o simplemente los perpetraron ellos mismos, con el fin de justificar un ataque a Israel, donde incluso, la reacción de sus organismos de seguridad tardó demasiado en actuar, lo que da más veracidad a esta tesis. Información que cobra más fuerza, porque Netanyahu, tiene un alto nivel de rechazo en Israel, y está señalado por muchos actos de corrupción, sirviendo esto, como una cortina de humo, para distraer la atención y unificar a todos en pro del sentimiento de patriotismo israelí.

La Casa Blanca "se centrará en los rehenes estadounidenses, los corredores humanitarios y la respuesta militar israelí"; es lo que dicen los representantes de Estados Unidos, no les interesa más nada, sino apoyar a su aliado Israelí.

El secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, dijo este jueves 12 de octubre 2023: "Estados Unidos nunca vacilará en su apoyo a Israel. El mensaje que traigo a Israel es el siguiente: puede que sean lo suficientemente fuertes por sí mismos para defenderse, pero mientras Estados Unidos exista, nunca, nunca tendrán que hacerlo; siempre estaremos a su lado".

Por otra parte, el secretario general de la OTAN, dice: "Israel no está solo".

Para acrecentar la crisis, Israel informa que no suministrará electricidad, agua ni combustible a Gaza hasta que Hamas devuelva a los rehenes.

También nos encontramos, con que, colonos israelíes mataron este jueves a tiros a dos palestinos en un cortejo fúnebre en la localidad de Qusra, en la Ribera Occidental del Jordán ocupada, informó el Ministerio de Asuntos Exteriores palestino en un comunicado.

El Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) advirtió este jueves que Gaza probablemente solo disponga de combustible suficiente para unas pocas horas más, lo que se necesita para alimentar las centrales eléctricas de los hospitales. Señaló un vocero de esta organización: "Lo cierto es que si no podemos hacer llegar suministros y si no podemos distribuir lo que tenemos dentro de Gaza, quería decir que vamos hacia una catástrofe, pero ya estamos en la catástrofe, pero aquí, vamos mucho más allá y la situación humanitaria se volverá inmanejable".

Estamos en una situación crítica y muy tensa, donde la participación de potencias en defensa de Palestina podría causar una tercera guerra mundial; pero esperamos surja la sindéresis y se designe una comisión internacional, de partes igualitarias, que se siente a resolver el conflicto entre Palestina e Israel; situación donde los venezolanos nos vemos retratados, ante las pretensiones de querer arrebatarnos el Esequibo; por lo cual estamos dispuestos a luchar hasta la muerte.