Los resquicios democráticos exigen una defensa del orden moral, por esto, debe haber en el seno de La Asamblea Nacional una reforma de los partidos políticos, y aglutinar las masas en un reducido grupo. Porque, ya no representan un porcentaje aceptable de la masa electoral, no hay los cuadros políticos suficientes para alcanzar un parámetro de confianza. Es con la mira de consolidar una verdadera democracia socialista, expresión advenida desde Carlos Andrés Pérez cuando era presidente de La Internacional Socialista para América Latina.
El mal manejo de los datos electorales, se viene dando para crear una censura pública, y desde ese mismo seno de una manera irresponsable y vergonzante dan criterios, como sí fuesen oficiales para declarar el empleo de los mecanismos que admiten una clase dominante que maneja una praxis clandestina que se legaliza automáticamente, siendo utilizado este método contra el maestro Luis Beltrán Prieto Figueroa en unas elecciones primarias internas para elegir el candidato presidencial de Acción Democrática, en esa oportunidad el ganador fue Gonzalo Barrios, cuya excusa era tomar un perfume de uso personal y airear el ambiente, dejando una estela de fe y esperanza que después de Rómulo Betancourt, él era el señalado. Gana es la antigua maquinaria adeca, cuyos hijos de esa antigua AD, conforma los actuales cuadros políticos del Psuv- socialista y ahora democrático. Dejando muy atrás lo escrito como Legado del comandante Hugo Rafael Chávez Frías, solo resta una memoria y simbología representada en estatuas en alguna plaza pública. Gonzalo Barrios usaba muchos perfumes de variadas marcas para dislocar a sus adversarios. Luego vinieron dos ensayos con Andrés Velásquez y, recién con Henrique Capriles Randosky. En ninguna elección hubo fraude, así quedo registrado., solo que se visualizaron y les dieron legalidad a los votos. Advierto, los votos no ganan elecciones, es la responsabilidad de los cuadros políticos, y el manejo de la maquinaria electoral.
Entre perfumes, macumbas, rosarios y el odio generado en estos últimos años, porque hay padres que no ven a sus hijos desde hace diez años, la candidatura opositora- de los nueves candidatos- alimento la base de adherentes que veían en el dúo dinámico, (Edmundo con un expediente de matar cuatro sacerdotes jesuitas y tres monjas, más estar implicado en la muerte del arzobispo Arnulfo Romero en El Salvador. Y María Corina Machado que viene del grupo Súmate y su arrogancia desecho a Manuel Rosales), pero, con todo, no es suficiente para derrotar un hombre preparado desde la izquierda, y que nunca ha sido un chofer de autobús. Mueve una maquinaria partidista que va más allá del Psuv y sus aliados de izquierda y derecha, más el ala militar.
Mariátegui José Carlos, fue inmovilizado en 1924, estando en Lima < Perú>, no contaba con su pueblo de la Serranía Andina, solo de la Ciudad de Lima, (Con todo, tenía una residencia en el Barrio Acaudalado de Miraflores), y desde la capital tuvo que propalar sus ideas para darlas a conocer mediante un periódico básico, incluso, sugerir procedimientos organizativos. Años después, Alberto Fujimori, un ingeniero agrónomo que interrumpió en la política bruscamente manejando un tractor, y aplicó las estrategias de Mariátegui, solo tuvo que movilizarse a La Habana, (Cuba), cinco veces para tener la gracia del comandante Fidel Alejandro Castro Ruz. Este intercambio epistolar le valió la presidencia por dos veces en Perú, pero, su secuaz, Pedro Montesinos daño moralmente su segunda presidencia que le llevo a ambos a la cárcel, marchitando las opciones de Keiko, su hija, de ganar las elecciones presidenciales, todo estaba programado. Ir a una constituyente, reformar las leyes del Estado y la Constitución. A su gusto para perdurar en el poder.
Desde 1920, a las décadas del 70 y 80, los comunistas aceptaban la lucha armada, las cuales en definitiva > en nuestro caso< fueron sustituidas por las milicias, su perfil definido y actualizado es ser socialistas, su clave es la expresión de las bases o masas populares, Es trabajo de organización y de lucha de clases. Siendo el partido socialista, la expresión y articulación de las masas desde 1961, claro, con la llegada de Rómulo Betancourt al gobierno, solo que pacto con los norteamericanos y no con la cúpula soviética, y estaba enemistado con Fidel por circunstancias políticas en Costa Rica y Nicaragua, poco le agradaba la experiencia de Marulanda y Daniel Ortega, muy joven aún.
María Corina Machado, no supo interpretar la historia política del país, desde aquél día que le dijo unos pensamientos a Chávez como presidente, en el Congreso Nacional u Asamblea Nacional, Sus discursos, recorrer el país y tener dólares para una logística no bastan. Esos fetiches de macumba hay que explotarlos, las nuevas prácticas están fundadas como corresponden, sus objetos, símbolos y representaciones. Son espacios que chocan con la vieja izquierda, porque la interpela constantemente y, la invita a repensarse, a su vez, buscar o abandonar sus fetiches, y sus oficinas satánicas, por otro lado, hay más de seiscientos pastores evangélicos satánicos en el país.
Es un espacio mezquino para la esperanza dada en Cristo, que no acepta otros dioses. Hay muchos que desean conservar esos fantasmas, no lo olvidan, recordemos que el presidente se llama Nicolás Maduro Moros, no tengamos una resistencia homeostática sobre la realidad, (resistencia a los cambios, tendencia al equilibrio de un sistema u organismo). Estamos rodeados de fantasmas políticos, son diez. Debemos guardar silencio,
Mariátegui reordeno todo en la vieja izquierda latina.
El Cardenal Joseph Ratzinger, (Papa Benedicto XVI), TUVO UN Papel clave en la operación de desestructuración de la hegemonía y contrahegemonía del poder político en el seno de Las Misiones Católicas. Porque muchos feligreses se dedicaban el autorreconocimiento comunitario, conocido por los comunistas y socialistas como la operación tun- tun. Muchos fieles estaban en su momento insertados como chismosos y, restaba fuerza al cristianismo comunista que buscaba un tutelaje con el Estado, pero, ya el socialismo se encontraba enraizado en los grupos familiares.
María Corina Machado, Leopoldo López y Henrique Capriles pertenecían a una sociedad que se llama Propiedad y familia, con sede en el Estado Miranda en sus orígenes.