Es ya conocido que este 5 de noviembre pasado, se celebraron las
elecciones presidenciales en el país imperial, los llamados Estados
Unidos de América. Alguna gente gritó asombrada y cuestionó el
triunfo de Donald Trump. En la historia de ese país, es el segundo
presidente que logra un triunfo, después de cuatro años de haber
gobernado. El primero fue Grover Cleveland, este ganó dos mandatos, no
consecutivos. Su primer periodo fue de 1885 a 1889, el segundo de 1893
a 1897.

Sin duda alguna para nosotros, en Venezuela, era lo mismo que ganara
quien ganara; claro el triunfo de este declamador de groserías,
alienta y aviva a las fuerzas nefastas y escuálidas, manejadas por la
maricory, pero no olvidemos que fue este sujeto quien ratificó las
medidas unilaterales y absurdas, que impuso el gobierno de Obama
contra Venezuela. En el otro extremo un triunfo de la Kamala Harris
era más de lo mismo como, fiel seguidora del Obama, mantuvo durante
su mandato una feroz persecución contra Venezuela, su pueblo y sus
mandatarios.

Lo que debemos es cuestionar el proceso eleccionario gringo, donde en
el país más criminal del mundo, se elige un presidente de una forma
tan absurda y bajo unos criterios lícitos, hace dos siglos, pero
aberrantes para la actualidad.

En tal sentido debemos saber que allí votan 244 millones de personas,
sin embargo el número de gente que vota, por lo general es el 60% de
la población. Con el agravante que no es el voto popular el que elige
al presidente. En USA, el presidente es elegido por medio de los
colegios electorales.

Tengamos en cuenta que los colegios electorales son un total de 538,
elegidos en la misma proporción que se eligen los 438 miembros de la
Cámara de Representantes y los 100 Senadores, dos por cada estado. El
problema grave es como el imperio gringo pretende dar clases sobre
cómo elegir un presidente, con un sistema tan aberrante y tan dispar.
Por ejemplo, en Pensilvania se eligen 19 colegios electorales; allí
los demócrata de la Kamala sacan 9 colegios y el republicano Trump
saca 10; ello implica que Trump se lleva los 19 colegios electorales
del estado de Pensilvania. Para la Kamala nada.

Como podemos ver es un proceso electoral bastante cuestionable, donde
no importa el voto popular, quien gane los colegios electorales será
el presidente. En el caso que revisamos, las elecciones de 2024, el
hotelero Trump ganó 312 colegios electorales, ello implica que es el
nuevo presidente junto a su aliado de formula Tim Walz.
Ahora bien, tengamos en cuenta que allí, el llamado país que pretende
erigirse en amo y señor del mundo, votan, antes del 5 de noviembre,
miles de personas, vía telefónica, por carta, vía electrónica y luego
por votación. El Trump ganó con 76.5 millones de votos, la Kamala
saca 73,5 millones. Lo que implica que Donald Trump, será presidente
con el 31% de los votantes. En otras palabras 70% no está a favor del
acusado de 34 delitos penales.

En aras de entender un poco el proceso gringo, es bueno tener en
cuenta su Constitución, la cual data del 17 de septiembre de 1787, lo
que implica, o podemos decir, que es la constitución federal más
antigua del mundo y para algunos estafadores del Derecho, teóricos
genuflexos, la mejor constitución del mundo. Es evidente operan como
mercenarios del Derecho. Ésta tiene 7 artículos. Donde el artículo 1°
otorga un
gran poder al congreso. El 2° es para el poder ejecutivo y su lapso de
mandato. En el artículo 3° encontramos lo referente al Poder Judicial,
donde en sección 3° se destaca el delito de traición contra los
Estados Unidos. En el 4° encontramos lo referente a los estados y su
funcionamiento. En el artículo 5° todo lo relativo a las enmiendas, en
el 6°
lo referente al acatamiento de la Constitución y en el 7 como la
mayoría de estados determina la opetavidad de constitución y la fecha
de su ratificación.

Importante destacar en el artículo 5°, lo referente a las enmiendas.
Esta constitución tiene 27 enmiendas. Donde las primeras diez, es lo
que se conoce como Carta de Derechos. La enmienda 12 determina lo
relativo a los compromisarios, quienes vienen a ser los que eligen al
presidente. La enmienda 21 elimina la 18, que tiene que ver con las
bebidas alcohólicas o embriagantes. La 22 determina que nadie podrá
ser elegido más de dos veces para el cargo de presidente. La 23 señala
que el número de compromisarios, los llamados colegios electorales,
será igual al total de senadores y representantes, lo que implica hoy
día un total de 538
colegios electorales.

Revisando y estudiando esta realidad, creemos que es necesario que
nuestro país, elabore, redacte leyes populares, leyes que asuman el
delito de traición a la patria y se juzgue aquí y en cualquier país, a
quienes cometan ese delito y donde se decomise los bienes de toda esa
gente delincuente, que atente contra el país. La ley Orgánica de
Extensión de Dominio, es una ley necesaria en estos momentos de
angustia. No sabemos qué puede pasar en el mundo, pero entendemos que
el Trump, viene por Venezuela. Este pueblo está decidido a todo y
conociendo como se elige este presidente, hemos dicho basta y echado a
andar. Es fácil entrar lo difícil es salir de este gran país, llamado
Venezuela. La patria nos une, venceremos. Hasta la victoria siempre.